Rebajas navideñas
En su momento no parecía tan buena idea.
Antaño, cuando no éramos más que unos chavales imberbes, la Navidad era sinónimo de regalos y atracones en compañía de la familia. Ahora, somos muchos los que empezamos a asociar estas fiestas con rebajas digitales, compras frenéticas de títulos a los que jamás jugaremos y a tarjetas de crédito echando humo. Todo cortesía, en gran medida, de las anunciadas y cacareadas Rebajas de Navidad.
Las más clásicas, las rebajas de Steam, no son algo nuevo, sino más bien algo previsible y que esperamos ansiosos durante el resto del año. Pero esta Navidad se han subido al carro de los recortes otras plataformas, como la antiguamente conocida como "Good Old Games", GOG.com, que desde hace un par de semanas está inundando el mercado digital con precios y ofertas que harían ruborizar a los mismos vendedores de la TeleTienda. GOG consiguió, con apenas unos días de rebajas, despertar una ansía consumista entre los jugadores acostumbrados a la compra digital que solo la plataforma de Valve había conseguido hasta la fecha. Pero no han sido los únicos: paralelamente a GOG otros sistemas similares están tirando la casa por la ventana con ofertas de lo más jugosas.
Está por ejemplo la "archienemiga" de Steam: Origin, de Electronic Arts; que durante todo el mes de Diciembre celebró la llegada de la Navidad con un calendario de adviento en que cada día se ofrecía a modo de regalo una interesante oferta. También Sony y Microsoft se han apuntado a la movida de los precios rebajados: Sony lleva ya días vendiendo juegos de primer orden en su Network a precios rebajados a la mitad y continuará hasta final de fiestas, mientras que Microsoft ha empezado a darle también tijeretazos a los precios de sus productos en la tienda de Xbox Live.
Si a muchos les asustaba tener listas de Steam inundadas de juegos que probablemente no vayan a jugar en la vida, no les será precisamente muy halagüeño contar con que ésta ya no será la única plataforma anegada de títulos que jamás serán ejecutados. Valve ha demostrado, sin posible margen de duda a estas alturas, que las rebajas funcionan, lo que indudablemente ha empujado a todas estas rivales a adquirir estrategias similares en el territorio digital, medidas que es probable que continúen a partir de ahora y a las que muy pocas todavía se resisten.
Pero, en retrospectiva, no puedo evitar sentirme desconcertado ante la desfachatez de algunas compañías que hoy pierden el oremus rebajando precios y que, no hace mucho - algunas el pasado verano, sin ir más lejos - sacaban pecho asegurando que jamás caerían en semejantes maniobras, atacando en el proceso a Valve y a su plataforma digital.
Por ejemplo, por más simpatías que despierte entre los aficionados, GOG.com es una de las principales culpables de hipocresía en grado sumo. En Abril de 2012 tal y como recogía Eurogamer en su edición internacional, Trevor Longino, jefe de marketing de la compañía, aseguraba que los bajos precios de Steam enviaban un mensaje equivocado a los usuarios y que semejantes estratagemas solo conseguían devaluar los títulos en oferta.
No hace mucho, en Setiembre de este mismo año pasado, John Koller, VicePresidente de Marketing de Sony Computer Entertainment America, afirmaba aunque en referencia a los precios de las viejas versiones de su Playstation3, que los usuarios estaban hartos de rebajas, ofertas y descuentos. Koller aseguraba que sus clientes quieren es contenido de calidad, siendo el resto aspectos secundarios.
Y finalmente, pues he de confesar que no he encontrado declaraciones respecto a este tema por parte de Microsoft, en Junio del año que ya hemos despedido, David DeMartini, líder de la plataforma Origin, aseguraba que los descuentos del 75% de Steam solo consiguen devaluar la propiedad intelectual de los juegos y que ellos jamás harían algo semejante. Estas declaraciones tienen su gracia, aunque sea porque tan solo dos semanas después Origin ofreció algunos títulos como "Dragon Age: Origins" con un 87% de descuento.
El debate sobre si estas rebajas y precios bajos nos envían el mensaje equivocado o sobre si devalúan realmente o no el producto es un debate en el que no pienso entrar; o por lo menos del que no pienso manifestarme, pues en el fondo no tengo ni la menor idea del funcionamiento del valor real de las propiedades intelectuales y mucho menos sobre como lidian con ello estas grandes empresas. Pero es evidente que desde el lado del consumidor las rebajas funcionan muy bien, y casi me atrevería a afirmar que a algunas empresas no les debe ir tan mal. ¿Cómo sino se puede entender que grandes jerifaltes de empresas punteras se expongan a hacer semejante ridículo ante los medios y su público, asegurando algo para desmentirlo con sus acciones pocos meses después?
Visto lo visto, en la industria del videojuego parece haber, y perdonadme por la expresión, mucho bocachancla. La realidad es que hay que tomarse las declaraciones de unos y otros con mucho cuidado y nunca depositar demasiada fe y confianza en lo que digan ciertos personajes que, al fin y al cabo y por más convicciones que tengan, están sujetos a un mercado permeable y siempre cambiante.
Como dice el Principio Político de Todd: "Hablen de lo que hablen, hablan de dinero". Nuestra devoción y amor por los videojuegos nos hace olvidar en ocasiones que esto, en el fondo y más que nos pese, es un negocio, y que los que controlan ese negocio serían en ocasiones capaces de vender a su abuela con tal de convertirse en los cabecillas de la industria. Una moraleja que se resume en que son en realidad nuestras carteras las que deciden el devenir del mercado, y no las proclamaciones y manifiestos de algún ejecutivo por más titulares que ocupe en la prensa.
Ignoro si comprando estos títulos a precios tan rebajados estoy perjudicando a la industria o al valor de ciertas propiedades intelectuales. Como consumidor no debería importarme pues no he dejado en ningún momento de seguir las normas del juego impuestas por el propio mercado, pero no puedo evitar en ocasiones pensar si, pese a sus acciones posteriores, algo de razón tendrían esos ejecutivos con sus declaraciones.
Sea como sea y siempre desde el lado del consumidor, gracias a todas estas rebajas he podido hacerme con títulos que, con esta galopante crisis que nos afecta de por medio, no podría haber disfrutado y encontrar juegazos increíbles que en otras circunstancias jamás habría descubierto. Ni que sea por eso, y por todos aquellos desarrolladores que de otra manera nunca habrían conseguido que sus proyectos ganasen semejante popularidad, las rebajas tienen su lado bueno y positivo.
Vigilad con lo que dicen algunos personajillos y recordad que son ellos los que están al servicio de tu cartera y no al revés. Y disfrutad de las rebajas mientras duren, que al final eso es lo realmente importante.