Killzone 2 - Beta Multijugador
Rápido y brutal.
Mucho ha llovido desde el E3 de 2005, en el cual Sony sorprendió a propios y extraños con el tráiler de Killzone 2. Luego se descubrió que ese vídeo no era más que una elaborada secuencia hecha por ordenador, lo cual convirtió la sorpresa en decepción y rabia. Guerrilla, probablemente escarmentada por ese suceso, se ha mantenido prácticamente hermética durante el desarrollo de la secuela de Killzone (otro juego al que los medios hicieron flaco favor, especialmente calificándolo como "Halo killer" cuando era algo completamente diferente) hasta hace unas semanas, cuando comenzó la beta privada del modo multijugador de la segunda parte. Y lo cierto es que los resultados no podrían ser más prometedores.
Pese a que no quiero explayarme mucho en ello, resultaría inconcebible no mencionar ni que sea de pasada el apartado técnico. Y, sinceramente, a Killzone 2 poco le falta para llegar al nivel mostrado en el vídeo del E3: desde el modelado de los personajes al detalle de los escenarios, pasando por los muchos y variados filtros de post-procesado para potenciar su brutal aspecto gráfico, todo en esta beta lucía particularmente bien. No tengo ninguna duda de que cuando el juego finalmente se ponga a la venta, y multitud de graphic whores lo examinen píxel por píxel, el juego de Guerrilla superara todas las pruebas con nota. Así de bueno es. Y tanto la música como los efectos de sonido están a la altura, demostrando que sus creadores no se han querido dejar nada a medias.
El multijugador de Killzone 2 es rápido y brutal, y tienes todos los números para morir si cometes el error de ponerte en el punto de mira de uno de los componentes del bando contrario. En un momento en el que Halo 3, Resistance 2 o Call of Duty: World at War son los ejemplos a seguir, el título de Guerrilla apuesta más por un estilo similar al del clásico Rainbow Six. A ello contribuyen las armas, que resultan efectivas tanto a corto como a largo alcance, lo cual obliga al jugador a cubrirse a conciencia y evitar tanto como le sea posible los espacios abiertos, en los que se convierte en un blanco fácil. Si tienes la desgracia de acabar abatido, siempre podrás recurrir al médico durante los diez segundos posteriores a caer al suelo, pero el enemigo también tiene la posibilidad de rematarte.
Las clases en Killzone 2 son las típicas que ya hemos visto en la mayoría de títulos importantes, como la saga Battlefield o el Team Fortress de Valve. El táctico permite colocar nuevos puntos de partida en el mapa y realizar ataques mediante infantería aérea. Los scouts son francotiradores, aunque con el añadido de un sistema de camuflaje óptico y la posibilidad de marcar enemigos para que aparezcan en el mapa del resto de jugadores del equipo. También están los saboteadores, que pueden disfrazarse con trajes del bando contrario y colocar bombas. El ingeniero, por su parte, puede colocar torretas automáticas de defensa y reparar daños causados por el enemigo. El elenco lo completan los soldados de asalto (la clase inicial y más simple) y los médicos, cuya función resulta obvia. La novedad en Killzone 2 viene con la posibilidad de escoger dos clases principales para mezclarlas en una clase híbrida que se ajuste mejor a las preferencias del jugador.
En todo caso, al principio el jugador tendrá que limitarse a ser un simple soldado de asalto, puesto que el resto de clases (así como otras armas y la posibilidad de crear clanes y escuadras de asalto) se desbloquean mediante la obtención de puntos que nos permitirán ir subiendo en el sistema de rangos militares que incorpora. Cómo declaro Eric Boltjes, uno de los programadores de Guerrilla, en una entrevista que le hicieron nuestros compañeros ingleses en agosto, "este sistema deriva en una curva de dificultad muy natural que permite al jugador ir descubriendo cada característica del juego una por una y de forma un poco más lenta".
Killzone 2 soporta un máximo de 32 jugadores. Entre los 16 de cada equipo pueden montarse cuatro escuadras de cuatro soldados, lo cual implica varias ventajas. La principal es la posibilidad de renacer junto al líder de nuestra escuadra, en vez de en la base principal. Otra es un chat privado con los otros tres miembros, y es algo que abre nuevas vías para ejecutar tácticas más trabajadas. Éste es un punto interesante, ya que siempre será mejor tener cuatro escuadras bien organizadas en nuestro equipo en vez de 16 tipos disparando a lo loco.
En la versión actual de la beta hay presentes tres mapas (Radec Academy, Salamun Market y Blood Gratch), y todos resultan entretenidos y están bien diseñados. En ellos abundan puntos elevados, estrechos corredores y amplias zonas abiertas, con lo cual podremos afrontar los objetivos de forma muy variada, algo que se ve potenciado por el uso de escuadras. Sin embargo, hemos notado que había ciertos puntos en los cuales el enemigo podía parapetarse y resultaba extremadamente difícil abatirlo, así como otros en los que si se nos tiende una emboscada resulta literalmente imposible superarla, obligándonos a buscar una ruta alternativa. Desde un punto de vista táctico está bien, pero resulta tremendamente frustrante cuando uno de estos puntos está situado en una de las salidas de nuestra propia base.
Killzone 2 tiene los modos multijugador típicos: Body Count (el deathmatch por equipos de toda la vida), Search and Retrieve (o en otras palabras, capturar la bandera), Search and Destroy (en el que debemos colocar explosivos en un objetivo concreto) y Assassination (el más divertido de todos), en el cual la máquina asigna aleatoriamente un objetivo para que su equipo lo defienda y el enemigo intente abatirlo. Lo mejor de todo, sin embargo, es el modo War Zone, que permite conjuntar todos los modos anteriores en una misma partida. Da variedad y permite experimentar todas las posibilidades del juego sin necesidad de ir saliendo y entrando a diferentes partidas.
Pero al final, la beta multijugador de Killzone 2 impresiona con su elaborada mezcla de virtuosismo técnico, atmósfera opresiva y trabajada jugabilidad. Quizás el máximo problema que tenga delante es la aparente dificultad para diferenciarse del resto de títulos similares de los últimos años, pero también pensamos que muchos jugadores agradecerán su sincero regreso a los pilares básicos de la fórmula deathmatch y un planteamiento que recompensa de forma justa tanto el esfuerzo como la persistencia. Killzone 2 no viene a revolucionar un género, sino a pegar un puñetazo en la mesa para reclamar el lugar que merece. Y damos fe de que a COD5, Resistance 2 y similares más les vale irse preparando para su llegada si quieren sobrevivir a la batalla...
Killzone 2 se publicará en febrero de 2009 en exclusiva para PlayStation 3.