La Conferencia de Microsoft desde LA

Ayer no fui nada benevolente con la primera presentación de Microsoft, en la que el Cirque du Soleil presentó Kinect. Tuvo un mal ritmo y tanto los juegos como la forma de enseñarlos sembraron dudas y pánico.

Hoy, sin embargo, he vivido una experiencia muy distinta a la de mis compañeros de España. Hemos llegado al edificio de la presentación de buena mañana, en el centro de Korea Town. Las colas eran largas, y las caras también; no puedo decir que los ánimos o las expectativas fuesen elevadas.

Sin embargo Microsoft ha hecho lo que tenía que haber hecho desde buen principio. La conferencia no ha sido memorable, eso está claro. No ha tenido ni la explosividad ni la espectacularidad ni los anuncios de años anteriores. Apenas se han enseñado juegos nuevos —Codename Kingdoms, de Crytek, que huele bien— y tampoco ha habido grandes apariciones de actorazos o estrellas de rock.

Pero ha sido una conferencia de esas que calman los ánimos. Sinceramente creo que han hecho lo mejor que podían hacer. Sin sorpresas, pero haciendo las cosas de forma lógica. Algunos dirán que déjà vu, pero yo digo que han arreglado y explicado de forma adecuada —ojo, que no es lo mismo que decir que me guste o que me apasione— Kinect.

Si el otro día Kinect parecía una orgía de familias felices pastelosas, juegos a medio hacer e interfaces baratas hoy han conseguido, por lo menos, volver a ponerlo en su sitio. Lo que parecía un producto a medias ahora es un producto bastante más definido. Está claro que es algo enfocado al casual gamer, es obvio que van a por ese sector. Pero bueno, eso no está mal, no es algo negativo, es su opción, y seguro que ahí les esperan copiosos beneficios. Nosotros no somos quién para juzgar si deben ir o no a por ese segmento de jugadores. Kinect: un producto enfocado al público casual con juegos divertidetes y bastantes posibilidades. Eso es lo que debían transmitir, eso es lo que han transmitido y, sobre todo, eso es lo que han arreglado.

En todo caso, han hecho que esté más tranquilo. ¿Cómo? Respondiendo a una serie de preguntas clave que debían ser aclaradas...