Marvel Ultimate Alliance 2: Fusion

Como beat 'em up, MUA2 tiene sabor a clásico. Además incluye aspectos interesantes, como los ataques de Fusión, en los que dos miembros del grupo combinan sus poderes para desatar su ira sobre las hordas de enemigos. Lo realmente divertido será encontrar la combinación perfecta de ataque porque cada héroe activa un poder dependiendo de su compañero de faena: puedes coger a La Cosa con el Capitán América para arrollar a todo lo que se ponga en medio, o a Tormenta y La Antorcha Humana para dejar a todo dios a merced de la fuerza de los elementos. Las pruebas están aseguradas hasta encontrar el tándem perfecto. Además si nuestro grupo se compone por los Cuatro Fantásticos al completo o los X-Men, por ejemplo, podemos tener bonificaciones de daño u otros efectos.

Este simple añadido lo hace todo menos unidimensional que los beat 'em up clásicos, pero no arregla los defectos que atesora el juego, entre ellos el tema de los diálogos y el "tempo". En juegos de recreativa como el X-Men de Konami el jugador avanzaba, mataba a algunos enemigos y seguía avanzando y matando, pero en este disco lo que nos encontramos es un formato de fases centralizadas en un punto común en el que todo el mundo no para de rajar, aunque por lo menos te dan la posibilidad de pasar los diálogos e ir directamente a la selección de la respuesta buena, mala o regular. Evidentemente esto corta el rollo muchísimo.

En cuanto a la forma de jugar a MUA2 no hay nada destacable, si consideramos como normal que todo vaya fluido y sin ralentizaciones, el control se acople estupendamente al jugador y, aunque no nos lo creamos, la cámara funcione increíblemente bien incluso en el modo cooperativo, que es donde realmente brilla el juego. Tal vez se le pueda achacar como pega algunos fallos generalizados en la detección de colisiones, que a veces actúa de un modo muy sui géneris, provocando en los peores casos que los personajes se atoren sobre algunos enemigos de gran tamaño o sobre los elementos del escenario.

En general, el apartado técnico es todo lo contrario a un huevo Kinder, sin sorpresas. La sensación es la de tener delante algo técnicamente bien hecho, porque el control es eficaz y la mecánica más simple que la de un cubo. La variedad de los golpes se limita a los clásicos golpe fuerte y flojo, cogida y salto, y un gatillo para desatar los poderes individuales y el otro para los ataques de Fusión. Y para de contar. Ahí tenemos los ingredientes de una tarde entera repartiendo leches con los colegas. Ah, y tiene jefes finales, por si no lo había dicho.

La forma más recomendable de jugar "a dobles" a MUA2 es, como ha sido siempre, reuniendo a cuatro amigos, cuatro mandos y cuatro cervezas, y tirar de modo offline cooperativo. Esta vez además es casi obligatorio debido a los innumerables inconvenientes que tiene el modo online.

Para empezar, todos los participantes de una partida online deben llevar la historia por el mismo punto en el modo desconectado, penalizando con experiencia cero a aquellos que no cumplan el requisito. Pero para poner un poco más difíciles las cosas las caídas de las salas de espera son frecuentes, con lo que encontrar el hueco que estamos buscando puede llevar un rato inaceptable para la mayoría de usuarios.

En realidad las deficiencias del multijugador pueden ser representativas de todo el conjunto del juego, que se presenta como un brawler normalito, con ciertos toques de RPG aliñado con decisiones morales (completamente ilusorias) y un cooperativo offline bastante divertido visto desde la perspectiva de hace quince años. Su dificultad a la baja y el detalle del idioma, que por cierto se me olvidaba aclarar que está completamente en inglés, tampoco ayudan a hacerle elevar la cabeza por encima del resto de la competencia, pero sus virtudes, o mejor dicho, sus "no defectos" consiguen darle cierta estabilidad a la propuesta de Activision.