Mega Man 9
Regreso al futuro.
Pero para quien sepa apreciar su peculiar modus operandi Mega Man 9 ofrece muchísima diversión. Tal y como es tradición en la serie puedes escoger el orden en que superar las distintas fases, y cada una contiene en su último tramo un jefe final. Dichos bosses responden a los nombres de Concrete Man, Jewel Man, Hornet Man, Tornado Man, Plug Man, Galaxy Man, Magma Man y Splash Woman. La igualdad de sexos ha llegado ya incluso a los juegos retro...
Cada vez que superes a uno de ellos obtendrás una nueva arma con la que enfrentarte a la siguiente fase con mayores probabilidades de éxito. Así, Splash Woman nos dejará un tridente láser, o Magma Man un útil bazooka. Es importante destacar que todas ellas no sólo resultan divertidas sino que también afectan nuestros enfrentamientos con los jefes finales restantes, puesto que el arma adecuada combinada con el enemigo adecuado puede decantar la balanza a nuestro favor.
A lo largo del juego puedes ir recogiendo tornillos, con los cuales podrás desbloquear nuevos ítems y habilidades. Entre ellas es particularmente útil la ayuda del perro robot Rush, con el que podrás alcanzar plataformas más altas o incluso volar montado sobre su lomo.
Necesitarás, eso sí, una buena dosis de perseverancia para desbloquear los extras más interesantes. Entre ellos se esconden nuevos modos de juego que se añaden al Time Attack inicial (ideal para amantes de los speed-runs y que tiene incluso una tabla online de récords), como el modo Endless Attack (el típico modo de supervivencia, en otras palabras) o una sección de minijuegos. Es la forma obvia de alargar la vida del producto una vez terminada la aventura principal, pero menos da una piedra.
Mega Man 9 ofrece también una lista de 50 retos, a cada cual más difícil que el anterior. ¿Acabar el juego 30 veces? complicado. ¿Terminar el juego sin recibir ni un sólo impacto? sencillamente imposible, no hay mortal capaz de hacerlo. Estos retos corresponden a los logros en la versión de Xbox 360, pero desafortunadamente no puede decirse lo mismo de la de PS3, puesto que ésta no tiene trofeos.
El riesgo inherente a publicar un juego como este a día de hoy es bastante alto, más en términos de credibilidad que económicos. Habrá quien no entienda un producto destinado sólo a nostálgicos, quien reniegue del juego por no tener en cuenta la evolución del género durante dos décadas o incluso quien verá pedantería en un homenaje tan claro de Capcom hacia si misma. Pero independientemente de si estamos en 1988 o en 2008, Mega Man 9 debe ser valorado exactamente como lo que es: un juego de NES. Y la verdad es que bajo esos términos resulta un producto poco menos que excelente.