Skip to main content

Retrospectiva: Tetris

El videojuego que definió todo un género.

La semana más larga en la ciudad de los Zares

Por aquellas vicisitudes del destino, los tres empresarios se desplazan a la capital rusa la misma semana de febrero de 1989 con la intención de hablar directamente con los responsables de Elorg. El caso de Henk Rogers es más peliagudo todavía, pues se presenta en la capital rusa sin conocer a nadie, sin saber a quien debe dirigirse y sin invitación alguna. Éste grabó en vídeo todo su periplo en suelo moscovita quedando para el recuerdo un valioso documento gráfico para comprender lo que sucedió durante aquellos fríos días.

Los tres se hospedan en hoteles diferentes y nunca llegarán a cruzarse pese a coincidir en la sede de Elorg donde Velakov los ha citado el mismo día. Éste tiene por delante un día nada aciago, obligado a reunirse con Stein del que ya sospecha que no es trigo limpio, con el hijo de un multimillonario con contactos en las más altas esferas del gobierno y con un risueño joven que se ha presentado como representante de una desconocida empresa japonesa.

Rogers es el primero en sentarse en una lúgubre oficina de Elorg que parece más una sala de interrogatorios que otra cosa. Velakov sabe que Rogers cuenta con el apoyo del propio Pajitnov, con el que pese a las fronteras culturales ha acabado haciendo muy buenas migas. Al fin y al cabo a ambos les fascinan los videojuegos y los juegos de mesa. Las únicas armas de Rogers son su labia y desparpajo, armas que consiguen ganarse incluso al frío agente ruso con su sinceridad. Pero un momento muy tenso pone en peligro toda la negociación cuando Rogers explica a qué se dedica Nintendo y le muestra uno de los cartuchos de "Tetris" para Famicom que están comercializando en su país. El responsable de Elorg queda estupefacto. ¿Cómo puede Nintendo comercializar juegos para consola cuando él mismo está negociando aún con Stein su licencia?

El Tetris para Nes de Tengen.

Rogers consigue salvar el tipo siendo totalmente sincero, explicando que él no ha hecho más que comprar unos derechos que creía en regla y poniéndose en disposición de hacer lo que sea necesario con tal de enmendar la situación. Además, el trato que ofrece Rogers es impecable: un 1% de todos los beneficios obtenidos por el juego serán para Elorg y se comprometen a pagar la licencia por adelantado.

El siguiente en pasar por el amago de interrogatorio es el mismo Stein, el cual Velakov recibe con graves acusaciones lejos de su habitual postura fría y calculadora. No es para menos, no solo aún tiene que formalizar varios pagos pendientes, además ahora tiene pruebas concluyentes que Stein ha estado negociando a espaldas de Elorg con licencias que todavía no estaban en su poder legalmente, lo que en el peor de los casos podría acabar ante un tribunal soviético. Stein se excusa como buenamente puede y reafirma su intención de adquirir, como era su propósito inicial, esas licencias todavía pendientes.

Finalmente será Kevin Maxwell el que se entrevista con Velakov, cuyo total y deliberado desconocimiento de los acuerdos comerciales que ha llevado a cabo su compañía con la licencia "Tetris" le pasará factura. Sin dejarle tomarse ni un respiro, el funcionario ruso aborda directamente a Maxwell acerca de todo lo que ha descubierto en la anterior entrevista con Rogers. ¿A cuanta gente ha vendido esa licencia de forma ilegal su empresa? ¿Cómo ha podido obtenerla Nintendo en primer lugar? ¿Qué les vendió exactamente Stein y con que garantías?

Incapaz de responder a la mayoría de preguntas de Velakov, la ignorancia de Maxwell es de nuevo manifesta cuando asegura que esa copia japonesa de "Tetris" que le ha cedido unas horas antes Rogers ha de ser una copia pirata. Un terrible error que Velakov no olvidará... Pese a ello, Maxwell cumple su función mostrandose dispuesto a comprar las licencias a golpe de talonario, ofreciendo como garantía el gran tamaño de su corporación.