Rock Band 2
El nuevo estándar en el género musical.
La voluntad de Harmonix de potenciar las posibilidades de juego en red de su título hacen posible la aparición de un modo reservado a los más hábiles, la Batalla de Grupos. En esta modalidad todos los grupos pueden competir entre sí para comprobar quien “rockanrolea” más y mejor en diferentes desafíos programados, cuyos resultados pueden seguirse en forma de rankings desde el propio juego o a través de la página oficial. También es nueva la modalidad Desafíos de Gira, que nos propone superar listas de canciones con una temática determinada (incluyendo las descargas) y que aunque pueda sonar a relleno ayuda a alargar todavía más la vida del juego.
Ahora bien, todo esto no serviría de nada si en el momento de ponernos a jugar no nos encontrásemos con una experiencia realmente divertida. Tranquilos, porque en Harmonix no son tan visionarios como para desechar ese gran corazón jugable que tan bien nos esbozaron en el primer Rock Band. En esta segunda parte no notamos grandes cambios en este aspecto, por lo tanto el título sigue siendo igual de entretenido. Sin embargo hay que reseñar un pequeño y necesario aumento en la dificultad de juego, y que notaremos especialmente en una guitarra con solos más atrevidos y en un bajo que ya no encontraremos tan aburrido y monótono. Con la guitarra el modo Experto realmente hará honor a su nombre y se agradece. Como ya se ha comentado en varias ocasiones, la distribución de las pulsaciones que hacemos en Rock Band cuando tocamos una canción sigue asemejándose más a lo que realmente se oye que en su competidor Guitar Hero. Mientras Guitar Hero siempre se ha caracterizado por sus canciones de escalas frenéticas de trastes en Rock Band siguen predominando más las combinaciones de acordes, algo mucho más realista.
Otro elemento importante que ayuda a transmitir esa sensación de que estamos tocando un instrumento de verdad son las canciones, puesto que hay temas que se adaptan mejor que otros a un juego de estas características. En este sentido, es de agradecer que el tracklist de Rock Band haya sido pensado más en función de la experiencia de juego que de que las canciones fueran reconocibles para el oído mainstream. Pensando en la formación de grupo muchos temas incorporan sus respectivos solos para cada instrumento, incluido el cantante, y la calidad de sonido de las pistas es impecable. Y no penséis que con esto quiero decir que la lista de canciones de Rock Band 2 no tenga canciones conocidas, ni mucho menos. Con un total de 85 canciones disponemos de temas de todos los estilos que van desde Bob Dylan hasta Interpol, encontrándonos por el camino grupos como Guess Who, Nirvana, Beck, Foo Fighters, Survivor, Red Hot Chili Peppers, Fleetwood Mac, Duran Duran, Billy Idol, Bon Jovi, The Who, Steve Miller Band, Smashing Pumpkins, ACDC o Metallica, entre muchos otros.
Añadidle a esto todas las canciones del primer Rock Band en caso de que lo tengáis, porque se nos da la opción de pasar todas las pistas al disco duro para poder acceder a ellas sin cambiar continuamente de juego, otro gran acierto en términos de comodidad. Y a todo esto, todavía no hemos dicho nada de la Tienda de Música, con un catálogo online que ya sobrepasa el medio millar de temas y desde donde podemos apaciguar nuestras ansias de tocar más canciones. Eso sí, os tocará pagar su precio una a una o en packs, pero de pasar por caja no os libraréis.
En cuanto a los instrumentos Harmonix no ha tenido tanta libertad como Neversoft para un rediseño de los mismos porque debía partir de la base del primer Rock Band. No obstante, se nota que han oído las quejas de algunos usuarios y han acabado de pulir sus periféricos, que ya de por si eran más que notables. En lo que respecta a la guitarra, más allá del nuevo acabado estético, tenemos unos botones que ya no hacen tanto ruido y que tienen un tacto más de pulsador. Por su parte, en la nueva la batería nos encontramos con unos toms que también hacen mucho menos ruido al golpearlos, sobre todo porque hacen un sonido más grave, como si tuvieran un silenciador. A su vez, el pedal ha sido recubierto de metal y es más resistente, y se han emplazado dos conectores tipo Jack en la parte trasera que pueden usarse para conectar unos platos adicionales (como en la batería del Guitar Hero). En definitiva, ambos instrumentos molestan menos y “suenan” más agradables.
En Harmonix han masterizado como nadie la fórmula mágica de los juegos musicales, su secuela de Rock Band es un título muy medido, perfectamente balanceado y con una presentación que transpira mimo y cuidado en cada uno de sus píxeles. ¿Se trata del mejor juego musical de la historia? Sí. Y aunque se le podrían añadir algunos cosillas más (como un editor de canciones) continua siendo el rey del género. Entonces, ¿vale la pena comprarlo si ya tenemos el primero? En opinión de un servidor la respuesta también es afirmativa. Las nuevas opciones no suponen una revolución pero acaban de pulir muchos aspectos. Si a esto le sumamos su completo tracklist con más de 80 nuevas canciones y la posibilidad de jugar con las del primero, seguro que los seguidores agradecerán este avance.
Y retomando la pregunta que nos hacíamos al principio, ¿Qué podría aportar un posible Rock Band 3 para mejorar Rock Band 2? Podríamos decir que ahora por ahora no se nos ocurre nada más que una actualización de las canciones. Ojalá me equivoque, pero con este juego se ha alcanzado un techo creativo difícilmente superable. Es algo parecido a lo que le sucede a los buenos títulos de deportivos, que sacan una nueva edición cada año donde sólo cambian las alineaciones y poca cosa más. Seguramente a partir de ahora, cambiarán los pequeños detalles pero con Rock Band 2 se ha dado la forma definitiva a un género.