Algo pasa con Greenlight
El semáforo de Valve se queda en ámbar.
Llevamos ya unos días con Steam Greenlight en pleno funcionamiento. Un servicio/producto/idea (es difícil encontrar el termino adecuado) que ha se ha puesto en funcionamiento más rápido de lo que la empresa americana nos tiene acostumbrados. Cierto es que parece que se ha construido a partir del Steam Workshop, y que el estado en el que salió bien podría considerarse beta. A pesar de todo, me ha sorprendido gratamente lo rápido que Valve está implementando las modificaciones al sistema. Me hace pensar que la idea era sacar el prototipo y usar las críticas del usuario para acabar de refinarlo.
Por si no os habéis entretenido en curiosear la nueva comunidad o el Workshop, Steam Greenlight parte como una iniciativa para darle al usuario del servicio la posibilidad de participar en el proceso de selección de juegos. En realidad, lo que realmente quiere Valve no es que los usuarios descubran pequeñas joyas indies en Greenlight, sino tener una forma fácil de cuantificar la comunidad que hay detrás de estos proyectos y que juegos es más rentable publicar.
Porque, para que Steam siga siendo una plataforma rentable para los desarrolladores, es necesario que siga manteniendo un poco de control para poder darle a los juegos el espacio para vender. Si cada día salen decenas de juegos, como en la App Store, es muy difícil vender para quienes no están en los primeros puestos de las listas, lo que provoca que los títulos más vendidos vendan aun más.
Los primeros días de Greenlight fueron una locura: Valve, en un movimiento bastante ingenuo, permitió que cualquiera subiera una entrada al servicio sin apenas trabajo. Esto degeneró en tonterías, troleos varios, gente usándolo para quejarse de cosas o, incluso, para pedir juegos que querían que se añadiesen al catalogo de Steam. Rápidamente llegaron los baneos y se ha retirado todo lo que clamaba al cielo.
Para contener la avalancha de nuevas entradas fraudulentas, la solución que a la que se ha adoptado es exigir un pago de cien dolares, que irán a parar íntegramente a la ONG Child's Play. Lo cierto es que parece haber funcionado y, aunque es cierto que puede darse el caso que nos perdamos la obra de algún desarrollador que no desee gastar ese dinero por la oportunidad de estar en Steam, si no puedes invertir esa cantidad o no consigues recolectarla mediante donaciones, es muy probable que o no te estés tomando tu producto suficientemente en serio o nunca tendrías una oportunidad real de ser aceptado.
Aún así, la cantidad de juegos en el Greenlight es enorme. Creo que parte del problema es que, poner el juego en Greenlight no requiere ningún tipo de trabajo, aunque ahora te obligue a pagar. Con cuatro capturas de pantalla y alguna descripción que puedas reciclar de tu web puedes subir tu juego. Además, de momento, no esta nada claro si tu juego desaparece del servicio, con lo que, cualquiera que este haciendo su juego indie ha subido lo que tenía a ver si, como decimos por aquí, suena la flauta.
Entiendo que el modelo Kickstarter (que tampoco esta exento de aprovechados) es un trabajo enorme para el desarrollador. Pero creo que, sin llevar Greenlight al extremo de tener que parar el desarrollo durante un mes para hacer de community manager, podría trabajarse más el apartado de comentarios e incentivar que los desarrolladores publicaran actualizaciones periódicas. Ahora mismo, por ejemplo, no recibimos notificaciones de los juegos que hemos votado positivo, con lo que una vez das tu voto, es fácil que te olvides de la existencia de ese título.
Otro problema: como mucha gente ha subido rápidamente lo que tenía en ese momento, el nivel del material subido es bastante pobre en muchas ocasiones. Muchos desarrolladores no parecen conocer conceptos básicos del marketing y, por ejemplo, se puede valorar la calidad del juego por la portada sin equivocarse apenas. Los juegos que están más o menos bien y que ya tienen un porcentaje de votos positivos suelen tener unas portadas bastante trabajadas, mientras que los juegos que tienen una portada cutre, suelen ser cutres (Pro-tip: esto también se suele aplicar a los iconos en la App Store).
Conforme pasa el tiempo, algo que se esta viendo es un auge de juegos comerciales. Quizás no AAA, pero tampoco indies. Editores que no están en Steam están empezando a saturar las paginas con todos sus lanzamientos. Que no me parece mal, pero es que va en el mismo saco de subir rápido. Alguna editora ha subido todo su catalogo actual, y tampoco es plan. Tampoco tiene mucho sentido, porque Valve ya ha dicho que cuando un desarrollador salga en Greenlight pasará a tratar directamente con ellos, con lo que no se si esta estrategia es la más adecuada para estas editoras.
Vamos a pasar una época de aprendizaje, donde los desarrolladores van a tener que aprender a utilizar Greenlight de la forma más eficiente posible.
Estamos frente a un primer paso de un movimiento muy interesante y, a la vez, muy arriesgado por parte de Valve. Vamos a pasar una época de aprendizaje, donde los desarrolladores van a tener que aprender a utilizar Greenlight de la forma más eficiente posible. Tras los primeros días, muchos usuarios tenían miedo que Greenlight llenase la plataforma de juegos "para otros públicos" (entiéndase, lo que no le gusta al usuario hardcore) como la App Store de Apple. Lo cierto es que si se diese ese caso, sería por elección propia de la comunidad.
El miedo que tengo y que creo que tiene más números de ocurrir no es que Steam se convierta en la App Store, sino en el Xbox Live Indie Games. Siempre escucho hablar de la originalidad de los desarrollos independientes, pero en el Greenlight me he encontrado paletadas de juegos de zombis o de Slender Man, clones de Minecraft, de Terraria, de Dungeons of Dredmor y, básicamente, muchas copias bastante descaradas de títulos de éxito. Algunas tenían bastante gracia, como una especie de mezcla entre World of Tanks y Team Fortress, pero la gran mayoría eran un producto claramente inferior a la obra original y muchos ni mencionaban algún tipo de característica diferencial.
De momento, soy positivo con el futuro de Steam y de Greenlight. Si hay algo por lo que debemos defender al PC es porque es la ultima plataforma abierta. Steam es un gran mercado pero, hasta ahora, era un jardín cerrado. Y seguirá siéndolo, pero al menos ahora tendremos la oportunidad de que pequeños proyectos con mucha calidad entren en él, y eso solo puede ser bueno. Y, si no queremos pasar por el aro del DRM de Steam, estoy seguro que a GOG no le importará distribuir también esos juegos.