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Análisis de Goodbye Deponia

Rufus al cubo.

Por fin Daedalic nos desvela el final de la aventura de Rufus en su intento desesperado por abandonar Deponia y alcanzar el Elisio. Tres videojuegos en los que en su camino se cruzaron los propios ciudadanos de Deponia, la princesa Goal, su prometido Cletus y el ejército del Organon y que, sin embargo, mantienen un denominador común: su peor enemigo resulta ser su estúpida habilidad para enturbiar y complicar las cosas.

Es esa personalidad de antihéroe, tan poco amable y egoísta hasta la impertinencia, la que le ha servido para escribir tres episodios gloriosos en la historia reciente de las aventuras gráficas. Hay quienes dicen que la trilogía Deponia alcanza los niveles del mismísimo Monkey Island, yo creo que quizá no llegue a tanto, pero entre lo que se puede encontrar en el mercado ahora mismo es sin duda la que más se le acerca.

A pesart de que Daedalic afirma que cada entrega es de algún modo independiente, que se pueden jugar sin haber comprado los otros y que cada parte tiene un inicio y un final satisfactorio para el jugador, recomiendo encarecidamente jugar a la trilogía al completo ya que solamente así es posible advertir por qué Rufus se comporta de tal o cuál manera y cuán entrañable es en realidad el protagonista a pesar de su humor insolente.

Este tercer y último capítulo es sin duda el más elaborada de los tres; dentro del estilo clásico point and click brilla el dibujo a mano, los personajes secundarios todavía más hilarantes y los esporádicos minijuegos ya presentes anteriormente, al tiempo que la historia se complica nada más comenzar y Rufus tendrá que desdoblarse, literalmente, para resolver cantidad de absurdas situaciones y llevar a cabo sus planes.

Un humor más ácido que nunca y un diseño de puzles y entresijos muy madurado con respecto al primer Deponia son las bazas de Daedalic para justificar la separación de la aventura en tres capítulos. Gracias a esta diferencia en el tiempo el juego ha mejorado notablemente, no tanto en el diseño artístico, que se mantiene fiel a sus raíces, como en la solidez de la historia, su duración -es la más larga- y la elaboración de los rompecabezas.

"Tras el cierre que supone este tercer capítulo la saga al completo se ha convertido en una magnífica experiencia jugable con un estilo muy entrañable."

Tan solo se echa en falta una cosa: el excepcional doblaje de las dos primeras partes. De momento esta tercera entrega únicamente está disponible a través de la plataforma Steam y sin localizar el audio. FX Interactive, responsables de la distribución de los anteriores en España, nos ha comentado que están todavía en negociaciones con sus creadores para traerlo totalmente traducido al castellano. A pesar de que las ventas acumuladas de los dos anteriores no han sido todo lo buenas buenas que debería, todavía no la descartan.

En definitiva, Goodbye Deponia es una esperada y merecida conclusión que no defraudará a nadie, ni a los nuevos ni a los ya conquistados por Rufus. Tras el cierre que supone este tercer capítulo la saga al completo se ha convertido en una magnífica experiencia jugable con un estilo muy entrañable. Daedalic sigue sumando aventuras de calidad a su currículum.

8 / 10

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