Avance de PlayStation All-Stars Battle Royale: ¿Un rival para Smash Bros.?
Las mascotas de Sony se unen en este juego de lucha familiar.
Así es, esto es Super Smash Bros. para la generación PlayStation. ¿Y por qué no? "Somos fans de los juegos de lucha - no es algo de lo que nos avergoncemos," afirma Omar Kendall, director de este trabalenguas llamado PlayStation All-Stars Battle Royale.
El juego, que el estudio indie SuperBot ha descrito en su revelación esta semana en LA como "un juego de lucha alegre y divertido," es una mezcla de la iconografía de los últimos 18 años de Sony convertida en un juego de lucha al estilo de las series que tan bien han servido a las plataformas de Nintendo durante una década.
"Estamos cogiendo lo mejor que ha ofrecido el género en su historia y añadiendo nuestras cosas," asegura Kendall. "Estamos orgullosos de existir en el mismo espacio que esos juegos. Las comparaciones no nos importan mucho - nuestro juego tiene una jugabilidad única y muy interesante."
Volveremos a eso en un minuto, pero antes vale la pena considerar a los responsables de todo esto. La fértil comunidad creativa que Sony ha fomentado alrededor de su base en Santa Mónica es reconocida no sólo por haber creado éxitos súper ventas como Uncharted o God of War, sino también por los experimentos y riesgos comerciales que financia y permite que florezcan.
Pongámoslo de esta forma: sin Sony no existiría Journey. Y hay otra excentricidad que se guarda bajo la manga, y que podría revelarse la semana próxima - algo que de nuevo saca a relucir el loable apoyo que la compañía ofrece a los nuevos talentos.
Y ahora está SuperBot, un equipo indie nacido en 2009 con 100 empleados "que se ha nutrido en Sony Santa Monica," como el propio estudio afirma. Su primer juego es PlayStation All-Stars y ha reunido para la tarea a un equipo cuyos currículums incluyen UFC, WWE, Gears of War, Mortal Kombat y God of War.
Sega y Nintendo han estado sacando tajada de sus IP durante muchos años. Sony, en ese sentido, es la hermana pequeña de las grandes factorías de franquicias, pero como el gran anuncio de televisión "Michael" demostró, el panteón de PlayStation ya no se queda rezagado.
El plantel completo de All-Stars sigue siendo un secreto, así que mejor que nos preparemos para revelaciones a cuentagotas fruto de laboriosas campañas de relaciones públicas - pero por ahora puedo jugar con Fat Princess, Kratos, Sly Cooper, Sweet Tooth, el Coronel Radec y Parappa the Rapper, lo que te da una idea de lo amplio que está siendo.
Los escenarios también están sacados de lo mejor del catálogo, con intrigantes giros en mitad de los enfrentamientos. Hades, de God of War, se avecina imponente en el inframundo de uno de ellos, cambiando el campo de batalla con los golpetazos de sus puños. A mitad del combate, aparece un ejército de guerreros Patapon detrás de él, y empiezan a tirar lanzas a su espalda mientras los personajes principales se apalizan en el fondo.
Luego está la Metrópolis con el estilo de Ratchet and Clank, un escenario de una sociedad futurista ordenada impecablemente y destrozada por las tres cabezas de Hydra del God of War original, mientras los cielos se oscurecen y se abren para dejar ver el camino hacia el infierno.
También está Sandover Village, el decimonoveno hoyo de Everybody's Golf, y la lucha sucede entre el green y la caseta del club. Hay golfistas que periódicamente aporrean a alguna pelota y que si no se esquivan pueden hacerte mucho daño.
Lo más impresionante es un escenario de LittleBigPlanet que se cosntruye a él mismo - a través del Popit - mientras la ronda avanza. Al menos hasta que el escenario se transforma en un episodio de Buzz!, en el que los contrincantes deben contestar preguntas con múltiples opciones, por ejemplo, "¿Qué animal es Parappa?". Las respuestas aparecen en diferentes puntos y necesitas situarte encima de ellas antes de que termine el tiempo para evitar alguna penalización violenta, pero mientras sigues peleando.
Los controles básicos son muy accesibles: X para saltar, L1 para bloquear, R1 para coger un objeto (un escudo o un arma cuerpo a cuerpo, me dicen), el cuadrado, el triángulo y el círculo para realizar distintos ataques (que varían dependiendo de la dirección que pulses y de si estás en el aire o en el suelo), y R2 para el ataque especial "súper importante".
El medidor de cada personaje se llena con cada ataque exitoso, y hay tres niveles de carga. El ganador se decide al final de las rondas según su ratio de muertes, y Kendall afirma que los 'Súpers' son la clave para el éxito. "Es la forma en la que ganas".
En el primer nivel estos ataques pueden echar a un luchador, pero si llegas al nivel 3 - que requiere casi una ronda completa para que se cargue - puedes acabar con todos. Cada uno se desata con un espectáculo visual único para cada jugador: Sweet Tooth se mete en un traje de mecha, Fat Princess se zampa un montón de pasteles mientras los habitantes de su pueblo arrasan con todo y Sly cambia el punto de vista de la cámara haciendo que los jugadores puedan morir fácilmente.
Tu medidor va descargándose si te atacan con una de las armas que periódicamente aparecen en el escenario y que se agarran con R1: los más normales son un lanzacohetes y la Lanza del Destino. La pérdida de vida se representa en forma de orbes translúcidos que pueden coger otros personajes. Sly, como buen carterista, puede conseguir energía por sus propios medios.
Los estilos de lucha de los personajes se han repartido en favor de lo que el equipo cree que es la "esencia" de cada uno. Kratos, sorpresa sorpresa, es un tipo enfurecido al que se le da muy bien el combate cuerpo a cuerpo, mientras que Radec es más efectivo a largo alcance porque va armado con un rifle francotirador.
La plantilla no es flexible. El equipo sintió que un ataque de bloqueo estándar para Sly Cooper no tendría sentido, así que es el único personaje del juego sin él. En su lugar posee la habilidad de volverse invisible, algo que es "fiel a su estilo".
Eso lo convierte en uno de los personajes más complicados de dominar, un ejemplo de la profundidad que encontrarán los habilidosos jugadores que, como dice SuperBot, tienen mucho que aprender. Con la experiencia del equipo, afirma Kendall, "no sería interesante trabajar en ello si no tuviera profundidad".
Como de momento sólo había disponible el combate libre para cuatro jugadores, las primeras rondas son caóticas y confusas, pero el espectáculo tiene un encanto tremendamente vibrante.
Yo apuesto por una estrategia más cobarde, de ataques tímidos y retiradas veloces, y me concentro en llenar mi medidor de súper poder hasta el límite. En un combate equilibrado, desatar un ataque de Nivel 3 funciona de maravilla para aumentar tus estadísticas. Pero corres el riesgo de ser exterimnado por algún enemigo listillo.
Después de un rato más con el juego empecé a experimentar con algunos de los satisfactorios combos y a darme cuenta de los puntos fuertes y débiles de los personajes. Todavía queda por ver cuánta profundidad táctica hay realmente, pero, por ejemplo, hay una forma de usar los poderes más allá de mi desesparada técnica en el último minuto.
Fat Princess tiene un poder de Nivel 2 impresionante: se monta en un pollo gigante que mete unas estocadas muy poderosas. Si el escenario es ampliamente llano es algo devastador, pero para los campos de batalla embrollados y de diferentes capas o niveles es algo bastante torpe.
PlayStation All-Stars es un territorio familiar tanto por su inspirada jugabilidad como, por definición, por el material del que bebe. Tiene un aspecto encantador, se mueve suavemente y su acción a todo gas refleja el contagioso entusiasmo del equipo.
Seguro que es muy divertido, pero saber si es diversión simple o profunda requerirá el escrutinio de una partida más extensa. Superficialmente, eso sí, los primeros signos son esperanzadores.
"Es raro que un juego de lucha se haga fuera de Japón," apunta Kendall. Pero aunque la idea se originara en el lejano oriente, ¿por que no deberían estos chicos de la costa oeste golpear son sus mejores armas?