Avance de The Legend of Zelda: Wind Waker HD
Link nunca lució tan bien.
Ahora está considerado como uno de los juegos más remarcables de la saga, pero cuando Wind Waker se anunció para GameCube por primera vez fue duramente criticado por su aspecto infantil y simplificado cercano a los dibujos animados. El cell-shading fue un revés mayor del esperado para muchos, más aún tras la espectacular y realista demo técnica de un enfrentamiento entre Link y Ganon mostrada años atrás, pero al final, como ya ha sucedido en otras ocasiones, el tiempo terminó dando la razón a Nintendo.
Resulta paradójico que uno de los juegos de la franquicia más sólidos en su apartado gráfico, precisamente uno cuyo aspecto se resiste al inevitable paso del tiempo, sea el elegido para vestirse de gala en un remake en alta definición. Wind Waker ya era hermoso en su concepción original, y parecía que por mucho que intentara maquillarse resultaba complicado mejorar un estilo visual tan redondo. Pero Wind Waker HD ofrece algo más que una cara bonita y un físico hercúleo: es una experiencia que ha sido pulida y mejorada al detalle desde los cimientos, y que aquellos que jugaron al original agradecerán y disfrutarán a partes iguales.
Wind Waker HD ha sido el resultado de una experimentación con la tecnología de alta definición más que un proyecto premeditado desde hace tiempo. Tal y como confesó Eiji Aonuma, director de la franquicia y productor de Wind Waker, este remake nació en un proceso de búsqueda de ideas para un nuevo Zelda, cuando el equipo encargado de la nueva iteración trasteaba con juegos ya publicados y probaba qué tal se verían en HD. No es fruto de la necesidad ni únicamente de la intención de hacer caja viviendo de glorias pasadas: es un remake concienzudo y bien planeado que ha tenido detrás el tiempo necesario.
Wind Waker HD se beneficia de las características de Wii U y perfecciona el diseño de una aventura que, diez años después, sigue sorprendiendo y manteniéndose tan sólida e inmersiva como siempre.
El núcleo de la aventura y su desarrollo es el mismo. La expresividad de Link no ha cambiado ni un ápice y el encanto del mundo y de los memorables personajes que aparecen a lo largo de la aventura se mantiene intacto. Pero todo luce mucho mejor. Ahora el océano, que refleja las nubes en su superficie, parece no tener fin y se funde dócilmente con el cielo ampliando notablemente el detalle y la distancia de visionado. La remozada iluminación tiñe a los escenarios de unos contrastes entre luz y sombra espectaculares que replican la calidez y el brillo cegador de las costas tropicales, y que también despliegan sombras más profundas en las mazmorras más hostiles, confiriéndoles una mayor sensación de riesgo. Todo a 1080p y a 60 frames por segundo, con la opción de jugar íntegramente en el GamePad. Parece, de hecho, que se trate de un juego concebido y desarrollado para Wii U.
Pero sobre todo se han mejorado aquellos pequeños detalles que alejaban a Wind Waker de la excelencia y que los fans se encargaron de constatar. Se ha ajustado el ritmo de la aventura en determinadas secciones un tanto tediosas, - como cuando debemos buscar las piezas de la Trifuerza en el tramo final, algo que de momento no he podido comprobar- así como la velocidad de navegación de Mascarón Rojo, del rescate de tesoros y el uso de la Batuta del viento; ahora, además, cuando usamos un objeto y la vista pasa a primera persona podemos movernos libremente y apuntar con el giroscopio del mando de Wii U. Es todo mucho más dinámico.
Para satisfacer a aquellos que buscan un mayor desafío se ha añadido un modo Héroe que podemos elegir cada vez que cargamos la partida y en el que no hay opción de recuperar corazones. El inventario también ha cambiado y pasa a estar en la pantalla del mando de Wii U, lo que permite seleccionar los objetos necesarios sin tener que pausar la aventura. El sistema puede jugarnos alguna mala pasada cuando nos estamos enfrentando a un jefe final, pero no deja de ser una opción más. También es interesante cómo cambia el papel de Tingle en Wind Waker HD: mientras que en el de GameCube nos invitaba a probar la conexión entre la consola y GameBoy Advance, en esta ocasión gracias al inquietante personaje de hocico colorado podemos escribir mensajes en Miiverse, meterlos en una botella y lanzarlos al mar para que los encuentre cualquier otro jugador. Es algo que tampoco he podido comprobar debido a que el juego todavía no se ha puesto a la venta, pero que sin duda puede servir de interesante nexo de unión entre la comunidad del juego.
Wind Waker HD es precioso, evocador. No es un título nuevo, pero esta reedición se beneficia de las características de Wii U y perfecciona el diseño de una aventura que, diez años después, sigue sorprendiendo artísticamente y manteniéndose tan sólida e inmersiva como siempre. Falta por ver cómo funcionan las demás novedades en el conjunto de la aventura, pero todo apunta a que Aonuma y su equipo han pulido las aristas necesarias para que dé un fuerte golpe en la mesa y se vuelva a erigir como una de las mejores entregas de la saga Zelda.