Avance de Battlefield V
Probamos el modo Grandes Operaciones.
Tras la Conferencia del E3 de Electronic Arts pudimos jugar una partida de Grandes Operaciones, la gran novedad de la próxima entrega de la saga Battlefield. Este modo es una versión evolucionada de las Operaciones que debutaron en Battlefield 1, con 64 jugadores enfrentándose para cumplir sus respectivas misiones como atacantes o defensores. El gran cambio es que las Grandes Operaciones duran varios "días", cada uno de ellos con sus dinámicas propias. Al igual que en BF1, antes y después de los combates se puede escuchar a un narrador que convierte este modo multijugador en algo más parecido a una historia.
La Gran Operación que probamos estaba ambientada en Noruega y enfrentaba a alemanes contra británicos (las dos facciones que vendrán en el juego base). El modo del primer día se llama Airborne: los atacantes se lanzan en paracaídas y tratan de derribar las baterías antiaéreas. Los defensores deben hacer todo lo posible por evitar que eso ocurra y pueden disparar las baterías para mermar las fuerzas enemigas. Una vez finaliza esta misión se indica cuál ha sido el resultado, cuyas consecuencias se hacen notar en el segundo día: los atacantes tienen más vidas si logran terminar el primer día con pocas bajas. Tras Airborne llega el día 2 con Breakthrough, en el que los atacantes debían capturar sectores del mapa poco a poco hasta capturar un único mapa. Es una estructura que en el juego final se alargará un poco más, hasta un máximo de cuatro días en caso de que la partida no se resuelva en el día 3.
A pesar de que la partida era más corta que las que incluirá el juego final, ya se aprecia interés por priorizar el largo plazo sobre el corto, donde cada momento de debilidad del equipo puede decantar el resultado de la partida final. Al principio íbamos todos un poco como pollos sin cabeza por desconocer el mapa (y además estábamos experimentando un poco para los avances) y los defensores perdimos muy rápido dos de los cuatro antiaéreos, pero supimos recuperarnos y al final solo capturaron uno más, pero el precio en vidas que pagó el rival fue tan grande que en la siguiente partida se quedaron sin vidas bastante antes de lo que les interesaba.
Como jugadores del bando defensor, pudimos probar la construcción de estructuras. Aunque lo primero que se nos pasa por la cabeza en la actualidad al pensar en construir en un shooter es Fortnite, la verdad es que es un sistema que parece mucho más sencillo y contextual. Cerca de las baterías antiáreas el juego nos sugería levantar barricadas, aunque podremos también poner alambre de espino o bloqueos para que no pasen los tanques u otros vehículos, como el Kettenkrad alemán (una especie de híbrido entre moto y tanque) que nos permitía desplazarnos a toda velocidad por la nieve.
Durante la partida tuvimos la ocasión de probar cinco clases: Assault (subclase Grenadier), Medic (subclase Field Surgeon), Support (subclase Engineer) y Recon (subclase Sniper) además de una subclase "exótica". Es una pena no haber probado la personalización de clases de la que presume el juego completo, pero teniendo en cuenta que era una demo pensada para un evento tiene todo el sentido del mundo. De todas estas clases los Sniper enemigos fueron con diferencia los que más se cebaron conmigo y de hecho el poco rato que lo probé parecía ideal para un mapa nevado en el que los enemigos en movimiento destacan más de lo habitual.
Por la forma en que DICE habla de Grandes Operaciones, parece claro que su intención es convertirlo en el modo estrella de Battlefield V, y el primer contacto parece indicar que van por buen camino. Sabemos que, más allá de las Grandes Operaciones que incluya el juego de salida, las sucesivas actualizaciones de Vientos de Guerra irán incorporando más de estas batallas al juego; estaremos atentos a ver qué historias nos quiere contar DICE en esta ocasión, teniendo en cuenta que aseguran que se van a centrar en las partes más desconocidas de la Segunda Guerra Mundial.