Bungie despide a 220 empleados, alrededor del 17% de su plantilla actual
Y trasladará otros 155 a Sony para formar un nuevo estudio de desarrollo.
Bungie ha confirmado el despido de doscientos veinte empleados, alrededor del 17% de su plantilla actual.
Estos despidos se suman a los otros cien que se efectuaron en octubre del año pasado, cuando la compañía contaba con cerca de mil doscientas personas en plantilla.
Sumando ambas oleadas de despidos, por lo tanto, Bungie ha despedido a una cuarta parte de sus empleados en los últimos nueve meses.
El CEO de Bungie, Pete Parsons, describía la decisión en un post en el blog oficial como "uno de los cambios más difíciles que hemos tenido que tomar como estudio".
"Debido al incremento de los costes de desarrollo y a los cambios de la industria, así como a las actuales condiciones económicas, ha quedado claro que tenemos que hacer cambios en nuestra estructura de costes y centrar nuestros esfuerzos de desarrollo completamente en Destiny y Marathon".
Esta última parte es importante, porque aparte de los doscientos veinte despidos también hay cientocincuenta y cinco puestos de trabajo (el 12% de la plantilla) que pasarán a formar parte directamente de Sony.
Como parte de este movimiento "un juego de acción ambientado en un nuevo universo de ciencia y fantasía" que estaba en los primeros compases de desarrollo en Bungie pasará a estar desarrollado por un nuevo estudio de PlayStation Studios.
Parsons ha confirmado que "estas acciones afectarán a la compañía a todos los niveles, incluyendo la mayoría de nuestros puestos ejecutivos y senior".
"Soy consciente de que estas son noticias duras, especialmente tras el éxito que hemos tenido con La Forma Final. Pero mientras navegábamos la realidad económica del último años y tras agotar todas las opciones esta ha sido una decisión necesaria para refocalizar nuestro estudio y nuestro negocio con objetivos más realistas y una economía viable".
Según Parsons, durante los últimos años "fuimos demasiado ambiciosos, nuestros márgenes de seguridad financieros se excedieron y empezamos a funcionar en rojo".
Sin embargo, la reacción de la plantilla no ha sido buena. El máximo responsable global de comunidad de Bungie, Dylan Gafner, definía en redes sociales esta decisión como "inexcusable", añadiendo que "se está perdiendo talento en la industria, otra vez. La responsabilidad recae en los trabajadores que han cumplido con nuestra comunidad una y otra vez".