Cómo derrotar a la Bestia divina león danzante en Elden Ring: Shadow of the Erdtree
Te ayudamos a vender el primer jefe de Belurat.
La Bestia divina león danzante es uno de los primeros jefes que os encontraréis en Elden Ring: está al final de Belurat, asentamiento de la torre, que es la primera gran mazmorra de la expansión Shadow of the Erdtree.
La Bestia divina león danzante es un jefe bastante poderoso, con tres fases y magias de distintos elementos que le añadirán daño extra a sus golpes. Si necesitas ayuda para superarlo, os damos unos cuantos trucos para derrotar a la Bestia divina león danzante en Elden Ring: Shadow of the Erdtree.
Cómo derrotar a la Bestia divina león danzante
Antes de entrar a la batalla con el jefe, tendrás la oportunidad de usar una marca dorada en el suelo para invocar a Melena Roja Freyja como ayudante. Puede ser bastante útil para distraer al jefe durante un rato y darte espacio para atacar o curarte.
Además de esto, también puedes usar invocaciones como la Lágrima mimética, así que no dudes en echar mano de ella si lo necesitas.
Primera fase
Con tus asistentes al lado, ya puedes empezar. Muchas veces, la Bestia divina león danzante empezará la batalla lanzándote un ataque de aliento que tiene bastante rango, o saltando hacia ti para darte un cabezazo. Es mejor esquivar estos ataques desde lejos, ya sea hacia atrás o hacia un lado. Si llevas escudo y tienes suficiente resistencia, puedes bloquear el ataque de aliento, aunque te consumirá bastante estamina.
Hay dos puntos débiles principales en los que te tienes que fijar para hacerle daño a la Bestia divina león danzante: la parte frontal de la cabeza y la joroba de la parte trasera, cerca de las patas. La sección media de su cuerpo está hecha de tela y no podrás acertarle ahí los golpes.
Por desgracia, no podrás fijar el apuntado en la joroba trasera, pero intenta atacar allí si puedes porque es donde más daño le harás.
También se levantará sobre sus patas traseras y golpeará la cabeza contra el suelo o esparcirá un círculo de su ataque de aliento gris; nuevamente, moverse hacia atrás es una opción razonable. Es una apuesta segura en estos casos, y le toma unos segundos recuperarse después de este ataque, lo que lo convierte en un buen momento para realizar algunos ataques.
Si se abalanza sobre ti, rueda hacia él en el último momento posible. Los frames de invencibilidad de la acción de rodar evitarán que sufras daños. El ataque más peligroso en esta fase es el mordisco, así que si le ves abalanzarse sobre ti con las fauces abiertas, ten cuidado, porque te atrapará entre sus mandíbulas si no te apartas.
Segunda fase
Una vez que le hayas quitado un cuarto o un tercio de la salud, la Bestia divina león danzante entrará en su segunda fase, que siempre empezará con él saltando en el aire y desatando un poderoso ataque de rayo que ocupará toda la arena.
También te lanzará relámpagos que pueden hacerte mucho daño si eres débil a la magia. Puedes consumir Hígado disecado antirayos si lo necesitas en esta fase. Aunque, en mi experiencia, lo más fácil es ser muy agresivo para avanzar de fase cuanto antes.
Si lanza rayos desde el cielo, dejarán una pequeña marca circular en el suelo antes de impactar. Aléjate de ella en cuanto la veas.
Todos sus ataques físicos también añadirán daño de rayo durante esta fase, igual que sus ataques de aliento, así que ten cuidado si no puedes resistir bien los elementos.
Después de un rato, volverá a sus ataques habituales, sin rayos, así que si ves que te hace demasiado daño, aléjate y procede con cuidado hasta que vuelva a la normalidad, que será un momento mucho mejor para atacar.
Tercera fase
Una vez que la Bestia divina león danzante tenga un 50% de salud, se elevará en el aire nuevamente, pero esta vez desatará un rugido que cubrirá el lugar con hielo en lugar de rayos.
Ya te imaginas como va esto: ahora sus ataques al suelo y su aliento también tendrán efecto añadido de hielo. Si te alejas, hará una ráfaga circular de escarcha que es uno de sus ataques más peligrosos.
Lo peor de esta parte es que, si te golpea demasiado, sufrirás congelación, así que asegúrate de estar atento a tu medidor de congelación y de tener listos los elementos curativos necesarios para mantener el efecto a raya.
Sin embargo, aguanta y sigue atacando a la cabeza y la parte trasera, aprovechando los momentos en los que se distrae con tu invocación y con Freyja para derrotarlo.
Una vez lo hayas derrotado, obtendrás el Recuerdo del León Danzante, que podrás llevarle a la lectora de dedos Enia para canjearlo por uno de los dos objetos a continuación:
- Bestia divina enfurecida: un amuleto consumible que aumenta la potencia de las tormentas.
- Ceniza de guerra: pisotón de bestia divina: se puede utilizar en todas las armas cuerpo a cuerpo, lo que les añadirá afinidad con el frío y te permitirá usar el ataque de área de escarcha que ha usado el león en la pelea.
No te olvides de coger del suelo la Cabeza de Bestia Divina una vez terminada la batalla, un yelmo especial que puedes usar y será importante para la misión del Cornamentado.
¡Ánimo con la pelea, y disfruta de Elden Ring: Shadow of the Erdtree! Si aún con estos consejos, se te hace muy difícil, visita nuestra guía de consejos generales para saber cómo hacerte más fuerte.