Darksiders

En esta ocasión llevamos a un Jinete del Apocalipsis, nada menos. Se llama War (Guerra). Nuestro barroco personaje, lleno de gadgets epicofantásticos, se encuentra con que el Apocalipsis ha empezado antes de tiempo y tiene que averiguar porqué. Mientras tanto tendrá que abrirse paso entre ángeles, demonios y un montón de bichos enormes que no pondrán las cosas nada fáciles.

La influencia más clara del juego es la saga Zelda, de quien toma muchas ideas. Una de ellas es el sistema de combate. Con el gatillo izquierdo fijamos el objetivo y atacamos con la Y (o triángulo) y la X (o cuadrado). Con la B (redonda) se hacen presas y la A (equis) sirve para saltar. También podemos bloquear, esquivar o lanzar conjuros.

Sin embargo, y por extensión, los combates también tienen muchos tintes de God of War. Sobre todo en lo concerniente en la violencia. Madre mía la de cosas que se pueden hacer con una espada y que yo no sabía; desde partir enemigos por la mitad hasta lanzarlos por el aire y hacerlos pedazos. Los jefes finales en determinadas ocasiones también son de gran tamaño, y los combates recuerdan a los de Kratos y su tropa. Eso sí, nosotros también podremos igualarnos en altura y competir cara a cara con los villanos más potentes transformándonos en un ser enorme. Por último, cuando nos atacan tenemos opción de lanzar contraataques si bloqueamos en el momento justo, y esto desemboca en carnicerías todavía más exageradas.

Por tanto Darksiders vendría a ser una versión +18 de Zelda. Quizás no será tan brillante como la saga de Nintendo, está por ver, pero sí que tendrá más afinidad con ese tipo de público al que le gusta ese rollo recargado, exagerado y extremo del fin del mundo y de la fantasía medieval. O Madureira, como es mi caso.

De Zelda también coge la afición por las mazmorras y los puzles. Aunque en las primeras fases hay poco más que mover bloques y escalar paredes se van complicando y llegan a estar bastante bien pensados. Por si fuese poco, y para rematar el homenaje, un Jinete del Apocalipsis debe tener caballo, ¿verdad? Nuestra Epona gótica nos permitirá enfocar los combates de una forma totalmente distinta y cuando aparece el juego mejora bastante.

En cuanto a armas y hechizos, y a pesar de que no hemos podido probar muchas —la versión que tenemos no está acabada— ya intuimos por los menús que será una de las cosas que más disfrutaremos. Desde la guadaña de la muerte hasta espadones infernales, pasando por invocaciones y bolas de fuego. Se las compraremos a un demonio sediento de almas, que conseguiremos matando enemigos o descubriendo cofres escondidos por el escenario.

Darksiders sale este cinco de enero y puede ser uno de los tapados de este final de año. Está lleno de acción brutal y violenta y tiene puzzles muy bien pensados. Si consiguen engancharnos con el progreso del personaje y las armas están a la altura será una opción muy a tener en cuenta.