Skip to main content

Primeras impresiones de Dead Synchronicity: Tomorrow Comes Today

Cuatro personas y el sueño de hacer una aventura gráfica.

Puede que a muchos no les suene el nombre de Fictiorama Studios, algo perfectamente normal, aunque no es que este pequeño estudio indie madrileño haya hecho mucho por permanecer escondido. Desde la publicación en octubre de 2012 del primer mensaje en su blog personal hasta la actualidad - incluyendo una charla en AdventureX, la feria sobre videojuegos de aventuras en Londres - ha pasado mucho tiempo, sí, pero cualquiera que siguiera un poco de cerca el tema ha podido comprobar semana tras semana la devoción que sus componentes, los tres hermanos Oliván (Mario, Alberto y Luis) más un cuarto miembro, Martín Martínez, sienten hacia un género tan apreciado en el imaginario colectivo de los que disfrutamos con los videojuegos como es el de las aventuras gráficas.

Ahora, con la campaña tanto en Kickstarter como en Steam Greenlight de Dead Synchronicity: Tomorrow comes Today, su primera demostración práctica de ese amor por el género, han dejado de lado el anonimato previo y han comenzado a llamar la atención del público; algo a lo que ha ayudado también la colaboración del popular Alfonso Azpiri, mítico ilustrador español responsable de las carátulas de algunos de los videojuegos más importantes de la industria española en los 80 para compañías como Dinamic Software, Topo Soft o Opera Soft, entre otras; que ha puesto sus pinceles a disposición del estudio para crear una pieza de arte original francamente notable incluida, por supuesto, dentro de las habituales recompensas del popular sistema de crowdfunding.

La demo que hemos podido probar, apenas unos minutos más larga que la versión disponible para el público, nos hace ver en gran medida ese respeto ya mencionado hacia los grandes nombres del género. La historia, eso sí, opta por un camino diferente, bebiendo de autores de ciencia ficción como Philip K. Dick o Tartovski para mostrarnos a Michael, un hombre sin memoria que busca recuperar su identidad en un mundo post-apocalíptico en el que una concatenación de catástrofes naturales, un hecho conocido como la "Gran Ola", han provocado el desarrollo de una misteriosa enfermedad que convierte a la gente en enfermos con capacidades cognitivas sobrenaturales que les conducen a la muerte. Un objetivo que para más inri ha de ser cumplido, casi nada, antes de que el tiempo se disuelva por completo.

Si bien el guión elige un enfoque distinto a lo habitual en el género es en el control donde se aprecia ese clasicismo ya mencionado, siempre muy bien entendido. El hecho de usar tan solo los dos botones del ratón para efectuar tanto el movimiento como las dos acciones básicas -mirar y interactuar- y el poder acceder al inventario con un solo click en su respectivo icono hace que el juego se sienta ágil, cómodo e intuitivo, a diferencia de lo ocurrido con muchos de los sistemas empleados previamente por otros títulos. Especialmente decentes son también los escasos puzles que encontramos durante la demo, no excesivamente sencillos en su resolución pero sí lo bastante lógicos como para evitar solucionarlos con demasiada rapidez o probando al azar con todos los objetos a nuestra disposición.

"Dead Synchronicity pertenece a ese grupo de juegos indie que, por calidad y ambición, podrían formar parte del catálogo de cualquier estudio más importante."

Ver en YouTube

Visualmente el aspecto del juego es bastante sorprendente, teniendo sobre todo en cuenta las circunstancias. Quizás la escasez de animaciones se haga un poco extraña en un primer momento y, como es lógico, el paisaje apocalíptico deje poco lugar al detallismo y excesivo lucimiento, pero el estilo tradicional cartoon en 2D y algunas triquiñuelas visuales como los primeros planos dentro de las escenas interactivas de diálogo o los desfases temporales, que se intuyen como algo fundamental dentro de la trama, hacen que estemos ante un producto mucho más pulido a nivel gráfico de lo que podría esperarse en un principio.

Aunque sí existen aspectos que pueden resultar molestos, como lo inapropiado de una música que, pese a estar realizada por dos de los miembros del estudio como parte del grupo Kovalski y ser realmente estupenda en solitario, no termina de encajar con fluidez con el resto de la escena en algunas ocasiones; o el hecho de que los personajes secundarios que encontramos durante el juego no están bien definidos del todo a nivel de guión, con una cierta tendencia a repetir los mismos esquemas; lo cierto es que son detalles fácilmente mejorables y comprensibles dentro de una primera demo cuya duración no sobrepasa la media hora.

Dead Synchronicity: Tomorrow Comes Today pertenece a ese grupo de juegos indie que, por calidad y ambición, podrían formar parte del catálogo de cualquier estudio más importante. Independientemente del éxito de su campaña en Kickstarter o de la aprobación de los usuarios para su publicación en Steam la salida del juego en PC y y Mac en algún momento de 2014 parece darse por hecha, y será entonces cuando podremos comprobar si las intenciones honestas de este pequeño estudio madrileño son capaces de satisfacer las expectativas creadas y ofrecer una aventura gráfica clásica pero novedosa al mismo tiempo.

También te puede interesar