Todo sobre la PlayStation 4K Neo
Examen a fondo de las specs de la revisión de Sony.
Desde que se filtró la existencia de una revisión de PlayStation 4, la cual más tarde pudimos confirmar con nuestras propias fuentes, la gran incógnita era averiguar las especificaciones completas del hardware. Todavía no sabemos las razones que han impulsado a Sony a actualizar a mitad de generación su consola, pero ahora ya tenemos una idea más precisa de lo que incluirá la nueva máquina gracias a una información publicada por Giant Bomb.
Para empezar debemos valorar la fiabilidad de esta filtración y, por extensión, si las especificaciones son reales o no. Hasta hace muy poco el conocimiento de la PlayStation 4K entre la comunidad de desarrolladores era muy limitado. Hemos tenido en nuestras manos varios detalles a la espera de una segunda fuente que nos permitiese corroborar la información para publicarla, pero los últimos acontecimientos nos han pillado por sorpresa: Sony está compartiendo abiertamente las especificaciones con los desarrolladores y Giant Bomb las ha filtrado en internet. La documentación que tenemos en nuestras manos es la misma, con lo cual no hay ninguna duda. El rumor es cierto y estamos ante una nueva y más potente PlayStation 4.
La fecha de lanzamiento no está clara, pero el calendario para la distribución entre los desarrolladores sí: los prototipos de los kits de desarrollo están ahora mismo camino de los estudios. El test kit (o estación debug, si lo prefieres) estará montado en un chasis no definitivo -el cual Sony pide a los desarrolladores que no muestren- y llegará poco después. Un segundo test kit, una vez más no montado en el chasis final, se distribuirá en junio. Sony ofrecerá información sobre Neo en el evento DevCon de mayo, y el envío de código de juegos compatibles con Neo empezará en agosto.
¿Y qué hay de las especificaciones? En nuestro anterior artículo desgranamos tres posibilidades: una PS4 Slim basada en el sistema actual pero con compatibilidad completa con medios 4K, una versión ampliada del modelo existente y, finalmente, una nueva consola que vaya aún más allá. ¿La realidad? La nueva consola, que tiene el nombre clave Neo, es básicamente un híbrido entre la segunda y la tercera opción, y más potente de lo que esperábamos. Teniendo en cuenta las limitaciones tecnológicas y económicas inherentes a diseñar una nueva consola con AMD, lo cierto es que es lo mejor que podíamos esperar. La especificación filtrada es la siguiente:
PS4 base | PS4K Neo | Boost | |
---|---|---|---|
CPU | Ocho núcleos Jaguar a 1.6GHz | Ocho núcleos Jaguar a 2.1GHz | 1.3x |
GPU | 18 unidades de computación GCN a 800MHz | 36 unidades de computación GCN 'mejoradas' a 911MHz | 2.3x FLOPs |
Memoria | 8GB GDDR5 a 176GB/s | 8GB GDDR5 a 218GB/s | 24% más ancho de banda, 512MB más utilizables |
Veamos de forma un poco más pormenorizada los tres grandes cambios:
CPU: La buena noticia es que habrá una mejora en la CPU respecto a los decepcionantes núcleos x86 de PlayStation 4. La mala noticia es que esos núcleos no han cambiado, y simplemente han sido overclockeados de 1.6GHz a 2.1Ghz, lo cual supone una mejora del 31%. Al igual que ocurre con la PlayStation 4 actual uno de los núcleos y parte del otro están reservados para el sistema operativo.
Memoria: Seguimos teniendo 8GB de GDDR5, con una mejora del 24% en el ancho de banda respecto a la PS4 original. La consola que tenemos ahora utiliza módulos de memoria de 5.5gbps, con lo cual parece que Sony utilizará en el nuevo modelo los módulos de 7.0gbps que montan las tarjetas gráficas de gama alta como la GTX 980 o la GTX 980 Ti. Pero tenemos dudas en este apartado: la mejora en el ancho de banda no es especialmente grande, y seguirá estando limitada por el uso de la CPU (al compartir la misma interfaz), aparte de no estar demasiado bien escalada con la gran mejora de la GPU.
GPU: Este es el apartado más interesante de las especificaciones. La cantidad de unidades de computación se duplica, pasando de 18 a 36, y la velocidad de reloj aumenta un 14%, de 800MHz a 911MHz. Esto, en total, supone un incremento de 2.3X en FLOPs. La pregunta es, ¿qué tecnología se está utilizando? AMD creó los procesadores de las dos consolas de actual generación utilizando componentes antiguos y desactivando un par de unidades de computación. Xbox One usó la Radeon HD 7790, mientras que en PlayStation 4 se optó por una Radeon HD 7870 personalizada. Aquí es donde las cosas se ponen interesantes: las 36 unidades de computación no caben en ninguna de las GPUs actuales de AMD. Esto sugiere que Sony y AMD han ido más allá y han usado la nueva arquitectura Polaris.
En concreto, las 36 unidades de computación se montan con un bus de memoria de 256 bits, lo cual suena tremendamente parecido a las especificaciones que se rumoreaban para uno de los dos nuevos chips gráficos que AMD tiene en desarrollo con el nombre clave Polaris 10. AMD no ha presentado aún datos oficiales de este procesador, pero algunos usuarios bastante avispados descubrieron las especificaciones extrayendo el hardware ID de Polaris 10 de un kernel Linux para luego compararlo con un benchmark de Sisoft. Curiosamente esta prueba de Polaris se había hecho con una velocidad de reloj de 800Mhz y memoria GDDR5 de 6gbps, inferior a la especificación de Neo. Algunos opinan que se debe a que era un chip de pre-producción, aunque también puede ser una simulación de la variante para portátiles en la que es indispensable reducir la velocidad de reloj.
Imaginamos que la situación se aclarará en breve, pero ahora mismo todo apunta a que la PlayStation 4 utilizará la tecnología gráfica de nueva generación de AMD en vez de los antiguos diseños. Sony nombra específicamente una 'GCN de AMD mejorada', con lo cual solo tenemos dos alternativas reales: Polaris, que tiene 36 unidades de computación, o la vieja arquitectura Tonga, que solo tiene 32. La documentación de Sony también menciona nuevas instrucciones de la GPU exclusivas para Neo, lo cual apoyaría aún más la teoría del uso de una arquitectura más moderna. Sin embargo, también debe tenerse en cuenta que no hablan en ningún momento ni de tecnología de 14nm ni de Polaris.
Nuestra preocupación estaba en que las APIs de bajo nivel de PS4 no fuesen compatibles con la nueva arquitectura, lo cual provocaría problemas al cargar juegos antiguos, pero parece que no será así. Y la buena noticia es que las mejoras en eficiencia de Polaris podrían añadir aún más al incremento de potencia. En este sentido esperamos ver mejoras acumulativas en compresión de memoria, lo cual ayudaría a sacar más partido de la interfaz GDDR5 de 256 bits. Hasta donde sabemos, no se usaron estas tecnologías en la PlayStation 4 original.
¿Cómo coexistirán las dos PlayStation? Los modos Base y Neo
Sony parece reconocer la necesidad de integrar los dos modelos de PlayStation 4 disponibles simultáneamente en el mercado, internamente llamados 'Base' y 'Neo'. No habrá juegos exclusivos para el modelo Neo y todos los títulos estarán disponibles para ambas, así que nada parece indicar que haya títulos VR exclusivos para Neo de momento. Los desarrolladores tienen prohibido crear características jugables exclusivas para Neo, y las mejoras parece que se limitarán a los gráficos y el rendimiento. Los jugadores de ambos sistemas estarán ligados al mismo ecosistema, lo cual significa que los usuarios de ambos modelos competirán frente a frente en los juegos online. La interfaz de usuario y los sistemas de la PSN, además, serán también idénticos.
La gran duda es qué se podrá hacer con el hardware mejorado. La necesidad de mantener el apoyo a la PlayStation 4 existente pone un techo al tipo de experiencias que podrán ofrecer los desarrolladores, porque cualquier proyecto multiplataforma se define por el mínimo común denominador, y es raro ver a una desarrolladora que dedique recursos significativos a una pequeña minoría de usuarios.
Según los propios documentos de Sony hay cierto enfoque en proporcionar contenido de juegos en 4K, aunque lo más probable sea el escalado a resolución UHD. Los usuarios de 1080p también obtendrán beneficios, como:
- Frame-rates más altos
- Frame-rates más estables
- Mayor fidelidad gráfica
- Características gráficas adicionales
Sony habla de compatibilidad vía parches, lo cual permite a los desarrolladores revisitar sus títulos actuales de PS4 para añadir características de Neo a juegos existente. Neo, además, ofrece más memoria a los juegos para Neo. Por qué esta memoria extra no es posible en el modo Base no se explica, pero Sony dice que los títulos Neo tendrán acceso a 5.5GB de memoria y que las funciones de medios de PS4 "se podrían" expandir, por ejemplo con la adición de grabación de gameplay a 1080p.
Qué no es la PlayStation 4K/Neo
En nuestro primer artículo sobre PS4K sugerimos que Sony podía añadir compatibilidad con gamas de color ampliadas y alto rango dinámico como parte de la nueva especificación UHD 4K, al ser posible con el futuro hardware Radeon de AMD. Sin embargo, la documentación de Sony no hace mención alguna a ello, pese a que estas funciones deberían estar ahí si finalmente se usan los bloques de AMD. Su omisión parece indicar que ahora mismo no es una prioridad.
Tampoco hay mención alguna a si algunas de las funciones de la caja de procesamiento externa de PlayStation VR se trasladarán al hardware Neo, ni tampoco si éste proporcionará ventajas a PSVR. Se espera, en cualquier caso, que la misma diferenciación que tendrán los juegos normales entre Base y Neo se extenderán también a PSVR.
Aunque la documentación especifica que el disco duro seguirá siendo el mismo (Sony usa varios, con lo cual asumiremos que se refiere a uno de 2,5 pulgadas), no hay pistas sobre la unidad Blu-ray. Esto es sorprendente, porque habíamos asumido que Sony aprovecharía para ofrecer compatibilidad con el nuevo estándar UHD 4K para películas, con discos no solo de 50GB, sino también de 66GB y 100GB. Por ahora parece que los desarrolladores tendrán que contentarse con solo 50GB de almacenamiento.
¿Cuándo saldrá la PlayStation 4k / Neo?
Los desarrolladores podrán añadir compatibilidad con Neo a sus actuales juegos de PS4 a partir de septiembre vía parches, mientras que los juegos con soporte Base/Neo se esperan para octubre en adelante. Sony no ha explicado a los desarrolladores cuándo pretenden lanzar la consola al mercado, pero sí que no tienen problemas en que los juegos salgan antes que el hardware. O bien se están guardando las cartas en la manga o bien no tienen clara la fecha de lanzamiento.
Las especificaciones de hardware apuntan a una tecnología de fabricación de 14nm, y la demanda para la misma crecerá de forma exponencial el último trimestre de este año. AMD lanzará en esas mismas fechas su nueva tecnología gráfica, mientras que la demanda por parte de los fabricantes de móviles también será inmensa. Es posible que Sony no pueda cumplir con la demanda y decida retrasar el lanzamiento debido a ello. Todo lo que sabemos por los documentos de Neo es que los prototipos del hardware de desarrollo se recuperarán en enero para ser reemplazados por unidades 'producidas en masa', lo cual históricamente significa después del lanzamiento.
Hay una falta de claridad que parece algo caótica. Los tiempos, sin embargo, parecen más obvios: esperábamos la nueva PlayStation para 2017, pero con títulos ya disponibles en el último trimestre de este año es posible que ese sea el momento en el que llegue el nuevo hardware. Teniendo en cuenta que se solaparía con el lanzamiento de PSVR, la situación no es ideal. Quizás un lanzamiento en marzo de 2017 sea lo más probable, pero la existencia de la nueva consola puede disuadir a los usuarios que pretendían comprar la vieja. Cuando hablamos de los primeros rumores sobre PS4K decíamos que no teníamos claro por qué quería Sony jugársela con ella, teniendo en cuenta que ahora mismo dominan el mercado de las consolas. Ahora, tras conocer las especificaciones, seguimos sin tenerlo claro. Esperemos que en unas semanas, durante el E3, Sony explique mejor sus intenciones.