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Todas las novedades de Intel en el CES 2021

El nuevo Core i9-11900K, placas Z590, CPUs para portátiles y mucho más.

El primero de los tres grandes fabricantes de procesadores que darán una conferencia propia en el CES 2021, Intel, ha tenido un día cargado de anuncios. La compañía americana ha mostrado su nuevo chip tope de gama para escritorio, el Core i9-11900K, así como placas base de la serie 500 y la undécima generación de CPUs de la serie H para portátiles. En este artículo os explicamos todo lo que tenéis que saber, empezando por el 11900K.

En ciertos aspectos el 11900K parece más un sucesor del Core 9900K que del 10900K, al reducir el número de núcleos e hilos de diez y veinte a ocho y dieciséis, respectivamente. Sin embargo, esta reducción en el número de núcleos debería compensarse con un incremento teórico de hasta el diecinueve por ciento en el IPC (instrucciones por ciclo), una medida importante en el rendimiento con un único núcleo - y un área en la que AMD mejoró muchísimo con sus procesadores Ryzen 5000.

Este altamente inusual incremento del IPC en Rocket Lake S se produce gracias al uso de los núcleos Cypress Cove, los cuales debutaron con los chips Ice Lake de 10nm de Intel, y ahora se han trasladado al familiar proceso de 14nm que Intel lleva un tiempo usando en sus CPUs de escritorio. Las frecuencias de reloj del 11900K son iguales a las del 10900K, con lo cual el nuevo procesador es capaz de alcanzar los 5.3GHz con un único núcleo o 4.8GHz en todos los núcleos usando Thermal Velocity Boost.

Será muy interesante ver cómo se traslada esto al rendimiento en los juegos, ya que mientras que algunos títulos se benefician de un alto número de núcleos, otros prefieren la fuerza bruta con uno solo. En teoría, el Core i9-10900K podría superar al 11900K en juegos que usen todos lo núcleos, haciendo que posea una mejor relación calidad-precio si hay una rebaja tras el lanzamiento del nuevo chip.

Los datos proporcionados por Intel apuntan a que el 11900K supera al Ryzen 9 5900X en varias pruebas, con una ventaja del cinco por ciento respecto al chip de AMD en una selección de juegos que se mueven a 1080p con el detalle alto, incluyendo lanzamientos recientes como Assassin's Creed Valhalla, Far Cry: New Dawn, Cyberpunk 2077 o Total War: Three Kingdoms. Esta ventaja es más pequeña de lo que cabría esperar, pero si se confirma con pruebas independientes permitirá a Intel seguir promocionándose como la compañía con "la CPU más rápida para juegos" durante, al menos, un año más.

Aparte de las velocidades y los núcleos, Intel también ha detallado algunas nuevas características que llegarán con el 11900K (y presumiblemente con el resto de procesadores de escritorio de undécima generación). La GPU Xe de nueva generación se incluirá en algunos chips, se admitirá el uso de RAM de hasta 3200MHz sin overclocking, la decodificación del eficiente codec AV1 se realizará por hardware y la CPU proporcionará hasta veinte pistas PCIe 4.0, permitiendo a componentes como las tarjetas gráficas de nueva generación o las unidades NVMe operar al máximo de su rendimiento.

El 11900K y los otros procesadores Rocket Lake S funcionarán en las placas con chipsets de la existente serie 400 y de la nueva serie 500, incorporando las segundas PCIe 4.0 como estándar (aunque esta característica ya existe en algunas placas de la serie 400 y se podrá desbloquear con una actualización de la BIOS cuando las CPUs de la undécima generación estén disponibles). Por lo demás, las placas de la serie 500 tendrán un controlador USB 3.2 Gen 2x2 (20Gbps) y un enlace DMI x8 a la CPU, duplicando el ancho de banda disponible entre los dispositivos en la placa base (almacenamiento, red, etc.) y la CPU.

También se ha sugerido que las placas B560 permitirán overclockear la memoria, por ejemplo permitiendo configurar perfiles XMP de RAM por encima de los 3200Mhz en un sistema con un Core i9 11900K. Hasta ahora solo las placas de la serie Z tenían esta funcionalidad, una restricción que no tenía sentido cuando AMD permite overclockear la memoria y mejorar el rendimiento incluso con las placas baratas de las series A y B.

Lo más probable es que sepamos más de las placas de la serie 500, del 11900K y del resto de la gama Rocket Lake en las próximas semanas, ya que está planeado que los nuevos chips de escritorio se anuncien por completo en marzo.

Pero si prefieres jugar en un portátil gaming, entonces el otro gran anuncio de hoy hecho por Intel te puede interesante. La compañía ha anunciado sus procesadores Tiger Lake H35, los cuales se han diseñado para ofrecer un potente rendimiento con un núcleo con velocidades de hasta 5GHz con un objetivo energético de 35W, por encima de los 28W de los anteriores chips Tiger Lake. Los nuevos chips de cuatro núcleos deberían ser más potentes que sus predecesores, especialmente en tareas y juegos con pocos núcleos (Far Cry 5 y Flight Simulator 2020 son dos de los que nos vienen a la cabeza al pensar en títulos donde el rendimiento con un único núcleo es vital).

Ese incremento en la potencia bruta de la CPU se ve acompañado por una GPU integrada más rápida (el doble que la de los chips de la serie H de la décima generación), compatibilidad con RAM LPDDR4X-4266 y añadidos como Killer Wi-Fi 6 o 6E, Thunderbolt 4 y PCIe 4.0, así como BAR adaptable para mejorar el rendimiento gráfico. El Core i7-11375H Special Edition será el tope de gama, un chip de cuatro núcleos y ocho hilos con velocidades de hasta 5GHz, diseñado para portátiles gaming ultraligeros de gama alta. También se están preparando chips con más núcleos y un objetivo energético de 45W, ya que Intel promete modelos de ocho núcleos y dieciséis hilos con boost hasta 5GHz en múltiples núcleos, veinte pistas PCIe 4.0 y Wi-Fi 6/6E.

Intel también ha anunciado nuevas versiones Ice Lake de sus CPUs Xeon para servidores, con más núcleos, rendimiento y aceleración de IA, procesadores Pentium y Celeron de 10nm, con un incremento de rendimiento del 35% respecto a la generación anterior, y procesadores híbridos Alder Lake con una mezcla de núcleos de alto rendimiento y de eficiencia, los cuales llegarán a lo largo de la segunda mitad del año.

Ha sido un CES interesante para Intel, con muchas cosas a comentar, pero la compañía quizás sigue careciendo de un producto concreto capaz de emocionar al público. El 11900K es quizás lo más parecido a ello, pero debemos esperar a tener más información y, sobre todo, a poder comprobar la veracidad de las pruebas y cifras mostradas por Intel antes de emocionarnos demasiado.

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