Driver: San Francisco
El regreso del mito de PSX.
¿Os acordáis de cuando en los sandbox para cambiar de vehículo teníamos que bajarnos del nuestro, correr detrás de otro y tirar al ocupante de dentro? Sí, hablo en pasado, porque alguien tiene claro que eso es historia antigua. Se trata de Reflections, el estudio detrás de Driver: San Francisco.
Tanner, el policía que nos ha acompañado a lo largo de la saga, cree que tiene una misión muy importante que cumplir. En realidad está en un hospital, en coma, soñando con esa misión. Este hecho es importante, ya que permite una licencia artística bastante importante: puede trasladar su consciencia a otros cuerpos, en lo que los creadores han decidido llamar “Shift”.
Así, si nos encontramos en una persecución y nuestro coche está a punto de explotar, podemos sacar nuestra alma, pasearse por los coches cercanos a ver cuál nos parece mejor (mostrando estadísticas de cada uno) y por fin cambiar nuestro cuerpo por el del pobre desgraciado que iba al volante. Reflections no quiere que nos tengamos que bajar del coche en ninguna ocasión.
Por supuesto, uno no tiene por qué limitarse a cambiar de coche para seguir persiguiendo. Podemos ir en busca de un tráiler y cruzarlo en medio de la calzada, con lo que el criminal terminará empotrado contra el camión o, como mínimo, teniendo que alterar la trazada. Esta nueva técnica permitirá misiones más estratégicas, que se pueden resolver de distintos modos. Por ejemplo, si tenemos que apagar un fuego, podemos coger un camión de bomberos y aparcarlo al lado, o romper las bocas de incendio cercanas pasando por encima con nuestro coche.
Usar Shift tendrá un precio: tendremos primero que realizar toda clase de acrobacias para recargar un medidor, como derrapar o pasar rozando otro vehículo. Cuando traspasemos nuestra alma, aunque sigamos viendo el cuerpo de Tanner, asistiremos a algunos flashes de la memoria del asaltado. Estaremos atentos, porque puede ser una técnica narrativa interesante.
Donde esta técnica será ilimitada será en algunos de los Modos Multijugador. El único mostrado hasta ahora, Trail Blazer. Un coche deja una estela azul. El jugador que sigue la estela azul gana puntos. El jugador que llega a 100 puntos gana. Todos los jugadores pueden cambiar constantemente de coche para liártela parda. Más cercano a un Mario Kart o un Blur que al GTA, el multijugador de Driver apuesta por la vena de la espectacularidad, y promete piques antológicos en los 9 modos que habrá disponibles en total.
Reflections se lo ha jugado todo a una carta, el Shift. Si bien es una apuesta arriesgada, que posiblemente empobrezca escenarios en pos de una mayor fluidez, también puede ser un elemento que cambie para siempre la forma de entender los sandbox. De momento, Driver: San Francisco pasa a nuestra nómina de juegos a seguir la pista.
Driver saldrá para PS3, Xbox 360 y PC, con una versión de Wii independiente del resto, a finales de este año.