E3 2010: Opiniones sobre la conferencia de Microsoft

Microsoft acaba de celebrar su conferencia anual en el E3 2010 de Los Angeles y lo cierto es que las opiniones que sobre ella se están vertiendo son diametralmente opuestas a las del año pasado. Pocos nuevos anuncios y mucha importancia para Kinect, el sistema de control gestual anteriormente conocido como Natal.

De todos los anuncios los más sorprendentes han sido la colaboración con Crytek, que dará lugar a un título exclusivo para Xbox 360, y, sobre todo, el más que cantado rediseño de Xbox 360 que, por cierto, saldrá a la venta esta misma semana en Estados Unidos.

Algunos de los miembros de la redacción de Eurogamer.es hemos decidido escribir brevemente lo que nos ha parecido la conferencia de Microsoft y este ha sido el resultado...

La conferencia de Microsoft sólo se puede definir con una palabra: decepcionante. Únicamente han mostrado un juego nuevo (en colaboración con Crytek), Kinect sigue generando serias dudas sobre su viabilidad (aunque como gadget para navegar por la interfaz es más que interesante) y el nuevo modelo de Xbox 360 es muy poco atractivo: bastante fea (un verdadero imán para el polvo y las marcas grasientas de los dedos), grande (de slim tiene poco) y sin reducción de precio. Ni siquiera lleva fuente de alimentación interna, algo que se daba como seguro. Lo único que me ha sorprendido gratamente es el servicio ESPN, aunque falta por saber si llegará a Europa porque parecía muy enfocado al público americano. Muy mal tendrían que ir las cosas en Nintendo y Sony para que no superen de largo la presentación de la compañía de Redmond, así que de momento todo parece indicar que Microsoft va a salir este año del E3 como la gran perdedora.

Creo que el hecho de que Microsoft no haya desvelado el precio que tendrá Kinect cuando salga a la venta es una muestra de debilidad y duda. Después de un año entero generando expectativas el proyecto que tenía que revolucionar los videojuegos ha acabado sabiendo a poco. ¿Y esa nueva forma de comunicarnos con los juegos que iba a hacer que los juegos fueran distintos y nuevos? ¿Y Milo? ¡Es lo mismo de siempre! Kinect tendrá que salir a la venta a un precio muy reducido, porque de no ser así el batacazo puede ser de los que marcan época.

Aparte de esto podemos lamentar las pocas novedades que se han presentado en la conferencia, de la que solamente la alianza con Crytek se salva. Pero también sería un error olvidar el gran catálogo que videojuegos que Xbox 360 recibirá en los próximos meses. Halo: Reach, Gears of War 3, Black Ops y Metal Gear: Rising son un buen ejemplo.

¿Sobre el rediseño de la consola? ¡Pues, qué queréis que os diga, a mí me gusta!

Déjà vu. Esa es la situación que he sentido este año con la Conferencia de Microsoft. Déjà vu de Nintendo anunciando por primera vez Nintendo Wii, mostrando el que sería el futuro de los videojuegos con la llegada del "casualismo". Déjà vu de Sony viendo cómo su conferencia quedaba estropeada por las filtraciones. Me voy con la sensación de que todo, desde ese Gears of War 3 con aires de Dead Space hasta Halo Reach, lo he vivido antes. Dust y Limbo, el último de los cuales ni siquiera apareció en la propia conferencia, son lo único a destacar de una Microsoft que ha perdido toda esa magia que poseía el año pasado.

El problema de la conferencia de Microsoft es que su lema -"no expliques: muestra"- debería haberse aplicado en la extravagancia de ayer; ¿por qué le han dedicado tanto tiempo a Kinect cuando en teoría ayer era el momento del periférico? ¿Por qué invitar a Cirque du Soleil cuando bastaba con haber recreado lo de hoy? El espectáculo ha empezado bien, con Gears of War 3 o Metal Gear, pero poco a poco ha desembocado en una déjà vu que se remonta al año 2006 y que no aporta nada nuevo al sector de los videojuegos. Y la pobre niña no se merecía esa tortura con el tigre, que luego vienen los psiquiatras y baratos no son. Ah, y si el megatón consiste en ganarse la simpatía de los presentes con una Xbox Slim, apaga y vámonos.

Microsoft tenia la oportunidad de demostrar que no ha dado la espalda a los llamados hardcoregamers, pero en vez de eso, solo han anunciado un juego exclusivo, del que no se ha visto nada real, y el resto de la conferencia ha sido dar más cancha a Kinect, que ya tuvo ayer su momento.

El otro problema, y esto no ha sido culpa suya, es que el gran golpe de efecto que tenían preparado para el final, el nuevo modelo de consola, fue filtrado ayer y obviamente la sorpresa se ha ido a tomar viento fresco.

La sensación que me transmiten es que están dejando un poco de lado a los jugadores que durante estos años han apoyado su plataforma para intentar sacar tajada de un mercado del que Nintendo es la reina.

¡Mamá, mi Wii ha poseido a mi Xbox 360! Resumido en una frase retórica, esto es lo que ha dado de sí la conferencia de Microsoft. Creo que la decepción es generalizada. Aunque quedaba un resquicio de esperanza con el recién renombrado Kinect, su presentación se ha visto envuelta de una desmesurada cantidad de títulos casual que no han tenido otro fin que agravar la decepción de la Premiere de hace sólo unas horas. La compañía americana se ha olvidado de los usuarios que la han copado al lugar donde está. En parte es lógico, pero los fieles nos sentimos bastante decepcionados. No sólo por Kinect las sensaciones han sido ágrias.

Solamente se ha presentado un título no anunciado que posee buen aspecto y la garantía de Crytek, pero no deja de ser un teaser. Como lado positivo, Metal Gear Solid: Rising me ha dejado un muy buen sabor de boca (¡a la rica sandía!) y Gears of War 3 promete muchas horas de diversión en una campaña cooperativa para cuatro jugadores en la que por fin parece que tendremos variedad de enemigos.

Nada nuevo bajo el Sol en la conferencia de Microsoft, que se ha centrado en presentar Kinect y a su prole de juegos familiares obviando lo más importante, el precio. El resto ha sido relleno; exclusivos que ya conocíamos y una o dos novedades que ya nadie recuerda. El "one more thing…" ha recaído en la presentación de la 360 Slim y el golpe de gracia, una de regalo para cada asistente a la conferencia. En general, el evento no llega al nivel del año pasado y se queda en agua de borrajas de cara al jugador de toda la vida. Aunque claro, por lo menos sabemos qué significa Zan-Datsu.