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El regreso de Chris Sawyer

La vuelta al redil de uno de los desarrolladores más influyentes de los 90.

A finales de 2004, poco después de publicar bajo el paraguas de Atari un título de gestión llamado Locomotion, Chris Sawyer dijo basta. Tras casi dos décadas trabajando para importantes compañías del sector como Epyx, Electronic Arts, Firebird, Rainbow Arts, Virgin, Gametek, Empire Software o MicroProse, primero haciendo conversiones para PC de juegos de Amiga como Birds of Prey, Virus o Frontier: Elite 2 y más tarde diseñando sus propias creaciones, de las cuales se vendieron millones de copias, cogió sus cosas y se despidió, aparentemente para siempre, de la industria del videojuego.

Nunca ha hablado abiertamente sobre las razones que le impulsaron a tomar una decisión tan drástica, pero probablemente todo se deba al fracaso comercial y de crítica que supuso Locomotion. A bote pronto ese nombre puede no decirte mucho, aunque la cosa cambia si consideras que se trata de la secuela espiritual de Transport Tycoon, uno de los juegos para PC más importantes durante la primera mitad de la década de los noventa.

Publicado en 1994 por MicroProse (la empresa especializada en simuladores que fundaron Sid Meier y Bill Stealey a principios de los ochenta), Transport Tycoon seguramente forma parte junto a SimCity y Theme Park (con el juego de Peter Molyneux comparte la anécdota de que se vendió muchísimo mejor en Europa que en Estados Unidos) la santísima trinidad de los juegos de gestión para ordenador. La secuela - la de verdad, puesto que en 1995 ya se publicó una versión mejorada de, original llamada Transport Tycoon Deluxe - era cuestión de tiempo, pero el proyecto encontró numerosos problemas y fue aplazado cuando Sawyer vio la posibilidad de hacer un simulador basado en otra de sus grandes aficiones, las montañas rusas. RollerCoaster Tycoon (aunque inicialmente debió llamarse White Knuckle, el nombre cambió cuando Hasbro compró MicroProse y se hizo con la marca Tycoon) volvió a ser un éxito masivo, y Sawyer no sólo se convirtió en uno de los desarrolladores de moda, sino que también se hizo literalmente rico al cobrar treinta de los más de ciento ochenta millones de dólares que recaudó el juego.

Quizás sea eso: debe ser difícil sobrellevar el hecho de caer desde lo más alto. Con el descalabro de Locomotion, del que se criticó especialmente la IA y la interfaz, la industria no sólo perdió al diseñador de dos de los títulos más importantes de los noventa, sino también a un desarrollador dotado de una inusitada habilidad que le hacía capaz, por ejemplo, de programar en solitario un complejo simulador como Transport Tycoon usando casi en exclusiva código ensamblador, que se dice pronto.

Hace tres años, y sin hacer ningún ruido, Sawyer fundó junto a Jacqui Lyons (su representante durante más de dos décadas), John Hurlbut (director de marketing de RollerCoaster Tycoon) y Guy Herbert (de la agencia Marjacq Micro) 31X Limited, una pequeña empresa que actuaría como holding para gestionar los derechos de Transport Tycoon, recuperados de manos de MicroProse gracias al trabajo de Herbert.

No tenía la más mínima intención de volver a programar juegos, pero el propio Sawyer reconocía hace escasos días en una entrevista concedida a Gamasutra que "con el paso del tiempo resultó obvio que el camino correcto a seguir era crear y publicar una nueva versión del juego, así que la compañía evolucionó con esa tarea en mente". Ahí es donde entra en juego la colaboración con Origin8, un pequeño estudio independiente afincado en Londres: el plan inicial era financiar el desarrollo, aunque "a medida que pasaba el tiempo empecé a trabajar mucho con ellos, supervisando el diseño y ayudando a depurar el juego, por lo general intentando ayudarles a conseguir hacer con éxito lo que básicamente es un juego tremendamente complejo para una plataforma móvil".

No son pocos los fans a los que les gustaría ver un remake para ordenador del clásico juego de gestión (pese a existir ya un solvente proyecto gratuito como OpenTTD - ver el cuadro adjunto), pero el nuevo Transport Tycoon será un juego para dispositivos iOS y Android. Aunque, si lo piensas, la interfaz táctil se adapta como un guante al género, y su propio creador opina que "el estilo gráfico (con un punto de vista isométrico y fijo) funciona muy bien en dispositivos como el iPad o el iPhone: muestra mucho detalle en una pequeña área de la pantalla, y junto con la interfaz de la pantalla hace que el juego sea muy táctil".

A Sawyer no le preocupa que los usuarios de PC, el hábitat tradicional del Tycoon, se sientan traicionados, sino que cree que "muchos de esos jugadores estarán encantados de tener una versión móvil del juego que aman. ¿Por qué debería haber quejas? El juego es muy fiel a la franquicia Tycoon y no se ha suavizado. Es, probablemente, el juego más complejo que se ha lanzado nunca en una plataforma móvil. Con un poco de suerte los jugadores de PC que tiene un teléfono o tableta iOS o Android aceptarán el nuevo juego como una versión revitalizada del clásico original".

De momento apenas se han publicado un teaser y un puñado de capturas de pantalla, pero parece que el espíritu original se mantiene intacto. Sawyer ni siquiera ha sucumbido al lucrativo - aunque en ocasiones peligroso - modelo freemium, prometiendo que Transport Tycoon será "un juego de pago" porque "no se adapta al negocio free-to-play, y además no soy demasiado fan de esos juegos que sacan dinero a través de compras ingame o de publicidad".

El resultado lo veremos antes de que termine este año (su lanzamiento está previsto para finales de 2013), pero por lo pronto el inesperado regreso de Chris Sawyer a la industria del videojuego ya es un buen motivo de alegría. Y si después de esto viene un nuevo RollerCoaster Tycoon, mejor que mejor.

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