El Starfield Direct ha ofrecido un completísimo vistazo a la nueva IP de Bethesda
Todo lo que necesitas saber.
Tal y como estaba previsto, Microsoft y Bethesda han publicado el Starfield Direct nada más terminar el Xbox Showcase de esta tarde. Lo cierto es que ha sido un vistazo muy completo a la nueva franquicia de la compañía norteamericana, en el que a lo largo de cuarenta y cinco minutos se han desgranado numerosos aspectos del gran exclusivo de Microsoft para 2023 que, recordemos, llegará el día 6 de septiembre y estará disponible desde el día de lanzamiento en el servicio de suscripción Xbox Game Pass, tanto en PC como en consola.
Quizás de forma bastante inteligente, porque ya sabemos cómo está la sensibilidad con el tema de los spoilers, el evento ha comenzado hablando de la historia y la misión, pero de forma bastante peregrina y sin entrar en muchos detalles. Starfield se ambienta en el año 2330, con la humanidad explorando el espacio para asentarse en nuevos planetas. Tu personaje se une a Constelación, un grupo de exploradores que busca artefactos por toda la galaxia, y colabora con varias facciones para cumplir su misión. Este primer tramo, además, ha demostrado que el retraso fue una decisión acertada: Starfield se ve ahora mejor que antes, y parece que estamos ante un claro caso de
Antes, en cualquier caso, hay que crear el personaje. Para los fans de estos editores, Starfield será un filón: hay un montón de posibilidades y los resultados son bastante chulos. Hay, además, un factor muy importante: el trasfondo. Se pueden elegir tres habilidades iniciales para ayudarnos en los primeros compases de la aventura y adaptar el personaje a nuestro gusto, y tres rasgos, los cuales aportan tanto ventajas como desventajas.
Luego está el sistema de habilidades, un elemento esencial en cualquier RPG. Con cada subida de nivel se pueden desbloquear habilidades en cinco árboles distintos (físico, social, combate, ciencia y tecnología), y esas habilidades poseen cuatro rangos, los cuales se aumentan cumpliendo distintos desafíos. Hay habilidades de muy distinto tipo, desde una que permite controlar la mente de criaturas alienígenas, una para mejorar el movimiento con el jetpack y otra para potenciar el combate cuerpo a cuerpo. Las posibilidades, dicen, son enormes y permitirán personalizar notablemente a nuestro personaje.
En una aventura espacial, en cualquier caso, la nave es tan importante como el personaje. Y Starfield no defrauda en este sentido, con un completo editor que nos permite crear nuestra nave usando módulos y piezas con características no solo visuales, sino también funcionales. La nave será nuestro hogar, y en ella se podrán instalar motores gravitacionales para ampliar la capacidad de salto, modulos de fabricación para el sistema de crafting o dependencias en las que almacenar nuestro arsenal. Y en el aspecto meramente visual, se podrá pintar o instalar piezas para hacer naves con la forma que queramos (en el vídeo se veía una que recordaba sospechosamente al mismísimo Optimus Prime).
Y como en otros RPGs de Bethesda, en Starfield podremos vivir aventuras por toda la galaxia con algunos compañeros. Estos compañeros, que se pueden reclutar en los puertos espaciales o encontrar en algunos de los planetas, tienen su propio set de habilidades para ayudarnos al asignarlos a la nave o en los puestos. Hemos visto varios, como una agente de Constelación o una especie de vaquero espacial, pero el que promete más es Vasco, un robot con características humanoides y una interesante personalidad. No sé vosotros, pero yo ya estoy esperando a que saquen una figurita para ponerlo en mi estantería.
Hablábamos antes de las naves, y el viaje por el espacio en ellas es también un elemento fundamental para entender la enormidad y posibilidades del universo de Starfield. Parece un conjunto de mecánicas bastante elaborado, y me ha gustado que no solo exista la posibilidad de combatir con la nave (tipo dogfighting), sino también la de acoplarnos a las naves enemigas para abordarlas y luchar como lo haríamos en la superficie de los planetas. Una vez más, las opciones son enormes.
También se han anunciado las distintas ediciones del juego. La más sencilla es la misma que podremos disfrutar en Game Pass, con el juego y nada más. Luego tenemos la Digital Premium Edition, con el juego base (y cinco días de acceso anticipado), la primera expansión de la historia (Shattered Space), el Pack de Aspectos Constelación, la banda sonora y el libro de arte. Sin embargo, la que todos vamos a querer (ya veremos si nos la podemos permitir) es la Constellation Edition.
Esta edición incluye una copia digital de Starfield con cinco días de acceso anticipado, la primera expansión de la historia (Shattered Space), el Pack de Aspectos Constelación, la banda sonora, el libro de arte, un steelbook, el parche Constelación, un espectacular smartwatch Chronomark con el mismo diseño que tiene en el juego y un estuche especial con mecanismo de cierre para guardar el reloj y el parche.
La nota de prensa que nos ha enviado Bethesda no especifica los precios, aunque parece que la estándar costará 69,99€ en PC y 79,99€ en Xbox Series X/S, la Digital Premium 104,99€ en PC y 114,99€ en Xbox Series X/S y la Constellation Edition 299,99€ en ambas plataformas. Y si os queda dinero después de comprar el juego, también tendremos a nuestra disposición un mando de Xbox y un headset de Xbox bastante bonitos con decoración del juego (en el caso del headset es el primero que se lanza con personalización).
Tras las ediciones y los accesorios, vuelta al juego para ver uno de los aspectos que generan más interés: la exploración. En Starfield se podrá escanear los planetas antes de aterrizar en ellos (un poco como el sónar con sondas de Mass Effect 2, pero más completo y elaborado) para averiguar qué recursos hay en ellos, y una vez se aterrice en la superficie se podrá explorar un escenario que combinará elementos generados de forma procedural con otros creados a mano, todo ello de forma perfectamente integrada.
Y si al explorar encontramos un planeta que nos gusta, en casi cualquier lugar podremos crear un puesto. Se trata de una edificación en la que podemos colocar - al estilo Fallout 4 - distintos tipos de módulos con diferentes funciones, ya sea para simplemente usarlo como hogar o para asignar compañeros y tripulantes para que se encarguen de ellos y obtener bonificaciones o instalar herramientas de extracción para obtener recursos.
Algunos de esos recursos servirán para modificar las armas, con una ingente cantidad de elementos que se pueden montar en los rifles, pistolas y escopetas, desde cargadores ampliados a silenciadores, pasando por mirillas, empuñadoras y tipos especiales de munición. Este tramo del Starfield Direct ha servido para ver un poco más del sistema de combate, uno de los aspectos que generó más dudas en anteriores presentaciones. No sabemos si es cierto el rumor que afirmaba que id Software ha echado un cable a Bethesda Game Studios para mejorar los tiroteos, pero la verdad es que sí parecían más interesantes y divertidos. No esperéis un combate fluido como el de Doom Eternal, en otras palabras, pero sí algo que parece varios órdenes de magnitud mejor que lo visto en Fallout 4. Ah, y habrá combate con jetpacks (bastante útil de cara a mejorar la movilidad) y en gravedad cero.
El tramo final ha mostrado a los desarrolladores hablando de sus momentos y aspectos favoritos del juego, y a Todd Howard reafirmando el enorme reto que ha supuesto el proyecto. Y está justificado: Starfield es, sin ningún tipo de dudas, el videojuego más ambicioso que ha creado nunca Bethesda, y un título espectacular que, si acaba cumpliendo todo lo que ha prometido hoy, puede convertirse no solo en uno de los mejores títulos de 2023 (¡o el mejor!), sino también en uno de los mejores de los últimos años, en el gran imprescindible de Xbox Series y una de las mayores IPs del futuro. Quedan dudas por despejar, como por ejemplo qué PC requerirá, qué tal será el rendimiento en consolas (NdR: unas horas después de la publicación de este artículo Todd Howard ha confirmado que Starfield funcionará a 30FPS en Xbox Series X y S) y, claro, si Bethesda conseguirá esta vez evitar la maldición de los bugs en el lanzamiento, pero desde luego las expectativas no podrían ser más prometedoras e ilusionantes. El veredicto final, el 6 de septiembre. Vamos.