Escuela de Ladrones (ZX Spectrum)
Vintage Triple AAA.
Aunque llevamos prácticamente desde el inicio presentándoos algunos contenidos retro/vintage en Eurogamer, es ahora cuando por fin podemos presumir orgullosos de una sección en toda regla, la cual inauguramos de manera muy especial con esta producción llamada Escuela de Ladrones .
Poco a poco, y siempre que el respetable esté por la labor, iremos rescatando experiencias ya vividas en añejas consolas y micro-ordenadores, ya sea aplicando un nuevo prisma o por mero afán documental. Porque ya sabéis todos que se hace arduo y complejo entender mucho de lo que sucede en la industria de hoy día si apenas tenemos un mínimo conocimiento de su pasado. Máxime cuando demasiadas voces categorizan muchos males basándose en verdades sesgadas.
Esperamos una buena acogida, que nos planteéis constantemente nuevos contenidos e ideas ya que aun a riesgo de sonar algo moñas, nada de lo que hacemos tiene mucho sentido si el lector no disfruta de ello. De verdad de la buena.
Y como uno de nuestros objetivos es no sólo vivir de las rentas sino también prestar atención al nuevo software que todavía se sigue programando para sistemas vintage, estrenamos este espacio aplicándonos el cuento.
Mas allá de que sigan existiendo juegos para correr en emuladores o que la estética retro siga muy viva en producciones independientes (por no hablar de lo rentable que sigue siendo para las grandes compañías el explotar franquicias de hace 20 o 30 años), el hecho es que es bastante complicado encontrar una línea de productos en soporte físico que puedan seguir disfrutándose en nuestros todavía vivos MSX, CPC Amstrad o Commodore 64. Las posibilidades de que estos aparatos sigan funcionando a la perfección es un hecho gracias al esfuerzo de muchos aficionados o asociaciones que están por la labor, lo que abre las puertas de par en par con el objetivo de que el usuario siga comprando software tal y como lo hacía en el pasado. El caso que nos ocupa es un ejemplo de cómo se pueden hacer las cosas para que todo esto sea factible.
Por una parte, ahí tenemos la obra de World XXI , un equipo de programación chileno capitaneado por Ariel Ruiz con unos cuantos años a sus espaldas y que tras un titánico esfuerzo han sacado a la luz Escuela de Ladrones. El apelativo de superproducción lo encontramos más bien en las intenciones con las que se ha desarrollado este juego y en las que entraremos más adelante, ya que al fin y al cabo no estamos delante de ninguna gran corporación. No hay millones de euros invertidos, pero sí muchísimo esfuerzo y, lo que es mejor, grandes dosis de inteligencia y respeto hacia el usuario final. Para que el lanzamiento físico haya sido posible contamos con el trabajo de otro gran equipo español llamado Compiler Software quienes también llevan lo suyo creando nuevo material pero que ahora han diversificado sus acciones con la edición de programas ajenos.
La iniciativa es loable, y de hecho muchos pudieron comprobar en el stand de Matra en RetroMadrid el cuidado con el que se ha presentado en nuestras tierras Escuela de Ladrones. El formato elegido (sólo para ZX Spectrum 128k en adelante) es una cassette transparente serigrafiada, con portada desplegable a todo color e incluyendo su correspondiente manual (en inglés, aunque el juego cuenta también con textos en Español) y cuyo precio (8,75 €) rinde homenaje a aquellas 875 pesetas que normalmente se pagaban por la mayoría de producciones ibéricas. Llevarlo a cabo no ha sido una tarea sencilla, pero es que además es inevitable caer rendido a la enorme calidad del juego en sí mismo.