F1 2010
Pole position.
Hay ciertos detalles, sin embargo, que nos gustaría ver solventados en la edición del próximo año. Viendo el mimo y la casi enfermiza fidelidad a la hora de adaptar las diferentes peculiaridades de la F1, es extraño que se haya omitido por completo la presencia de un elemento tan interesante e importante en las carreras como es el safety car, o incluso la vuelta de formación. También debe mejorar la IA, que únicamente supone un reto en los niveles de dificultad más altos, y el sistema de penalización en carrera debe ser un poco más permisivo, ya que muchas veces un pequeño error de trazada puede acarrear una sanción. Finalmente habría que replantearse el sistema de las ruedas de prensa, que pese a ser atractivo ahora mismo peca de una excesiva simplicidad y una influencia muy baja en el modo trayectoria.
A nivel multijugador, F1 2010 ofrece las opciones habituales (carrera rápida, carrera a ocho vueltas con pit stop obligatorio y carreras personalizadas) aderezadas con un sistema que otorga puntos de experiencia según nuestro rendimiento y el coche que usamos, pero es una pena que el juego soporte como máximo a doce jugadores de forma simultánea (uno por escudería) en el modo online y que la opción de pantalla partida se haya omitido por completo, máxime cuando sí se ha implementado una opción tan minoritaria como es la de juego a través de LAN o System Link.
El motor EGO de Codemasters ya había demostrado su versatilidad adaptándose sin problemas a títulos tan diferentes como Race Driver: GRID, Colin McRae: DiRT 2 u Operation Flashpoint: Dragon Rising, y con F1 2010 sigue mostrando credenciales como uno de los middlewares más potentes de esta generación. La fidelidad en la representación visual de los monoplazas y los circuitos y la sensación de velocidad es asombrosa, y ciertos elementos y efectos, como es el caso del asfalto mojado bajo la lluvia, jamás se habían visto con un grado de realismo tan alto en un videojuego. Seguramente se podrían mejorar las colisiones, con un modelo de daños demasiado permisivo y algo parco en detalles, y en momentos puntuales en los que haya una gran aglomeración de coches puede producirse alguna que otra ralentización.
El resultado global en todo caso es excelente, y F1 2010 es un juego que se ve tan bien como se juega. Lo que resulta incomprensible, sin embargo, es que no se haya aprovechado el look & feel de las retransmisiones en la televisión, usando el grafismo y la tipografía al que todos los aficionados a la fórmula uno están acostumbrados. Teniendo en cuenta que Codemasters cuenta con la licencia oficial de la F1 la opción estaba ahí, y lo lógico hubiese sido exprimirla tanto como fuese posible. Obviamente no es algo que afecte lo más mínimo a la jugabilidad, pero si es un detalle que se habría agradecido muchísimo y que mucha gente va a echar de menos.
El apartado sonoro también está muy cuidado, con una especial atención en el sonido de los motores y los efectos en carrera. La música para los menús cumple su cometido a la perfección pese a ser bastante genérica y las voces están dobladas al castellano, destacando especialmente Kira Montes en el papel de la periodista que nos sigue en las ruedas de prensa, desempeñando el mismo rol que Nira Juanco en La Sexta o Laia Ferrer en TV3. De Antonio Lobato no ha ni rastro, por cierto. Menos mal.
Tras años estancados en una especie de GP2 de juegos mediocres, ahora por fin volvemos al gran circo, a la categoría reina, a ese campeonato en el que jugaban los míticos Formula One de Geoff Crammond o el F1 '97 de Bizarre Creations. Las esperanzas que había puestas en Codemasters eran altísimas, pero sorprende que en su primera iteración hayan sido capaces de obtener un resultado tan bueno firmando el que probablemente sea el mejor videojuego de coches que hemos visto este año (al menos hasta la llegada de Gran Turismo 5). Sin duda hay margen de mejora y montones de pequeños detalles que nos gustaría ver en un eventual F1 2011, pero la verdad es que tal y como llega a las tiendas F1 2010 es un simulador de conducción excelente que hará las delicias de los aficionados a este glamouroso deporte.