FF XVI y Pixel Remaster compensan la bajada de ingresos de MMO y juegos para móviles en la primera mitad del año fiscal de Square Enix
La compañía ha reducido sus beneficios con respecto al año anterior.
Square Enix ha presentado sus resultados económicos para la primera mitad del año fiscal (abril-septiembre de 2023).
Dentro de la división de videojuegos han crecido ligeramente los ingresos con respecto al mismo periodo del año anterior hasta los 122.000 millones de yenes (+4,2%) con una caída de los beneficios hasta los 15.500 millones de yenes (-36,9%).
El crecimiento en ingresos se debe en gran medida a la división HD -juegos completos para PC y consolas- que pasaron de 29.400 millones de yenes a 43.700 millones de yenes.
Los dos lanzamientos que se han destacado en este frente son Final Fantasy XVI y Pixel Remaster. La última cifra que conocemos de FFXVI son los 3 millones de copias de su estreno, la misma cifra que suman los diferentes Pixel Remaster en PC, dispositivos móviles y consolas (llegó a PS4 y Switch este mes de abril).
Por contra, los ingresos de MMO han bajado con respecto al periodo comparado, donde aún se recoge la explosión en popularidad de Final Fantasy XIV tras la expansión Endwalker a finales de 2021 que generó problemas de acceso. Pasa de 59.000 millones de yenes a 54.400 millones, pero sigue siendo la principal fuente de ingresos de la compañía.
Los resultados deberían mejorar en 2024, ya que en verano del próximo año se publicará la expansión Dawntrail y el juego dará el salto a Xbox Series X/S en primavera.
En la división de juegos para navegadores y smartphones se ha indicado que el lanzamiento de nuevos juegos como Dragon Quest Champions o Final Fantasy VII Ever Crisis no ha amortiguado la bajada en descensos de otros juegos anteriores de la compañía. Aquí la reducción es de 28.600 millones de yenes a 23.900 millones de yenes.
En el conjunto de la compañía, incluyendo otros sectores como la editorial de libros o el merchandising, los ingresos han aumentado hasta los 172.000 millones de yenes pero se han reducido los beneficios (de 26.000 a 17.300 millones). La compañía espera terminar el año con un 5% más de ingresos que en 2022 pero con un 21,9% menos de beneficios.
De cara al futuro, la compañía tiene tres problemas que abordará al final del año fiscal, en la reunión de mayo de 2024: aumentar los beneficios diversificando las fuentes de ingresos, reubicar sus recursos económicos para crecer a largo plazo y mejorar la comunicación con los inversores.