FIFA 10
Mejorando lo presente.
Una de las grandes sorpresas del año pasado se produjo en el típico duelo de octubre entre FIFA y PES, al descubrir que, por primera vez en muchos años, la propuesta de Electronic Arts superaba de largo a la de Konami. Era algo que no nos esperábamos, y que recompensaba el gran esfuerzo que ha dedicado EA Sports desde que se estrenó la nextgen por conseguir devolver la saga FIFA a la posición que ostentaba durante sus tiempos dorados.
Para esta nueva temporada EA Sports contaba con una excelente base con la que trabajar en esta nueva entrega, y el gran acierto ha sido centrarse en solventar las quejas de los usuarios (como los postes, que ahora son mucho menos frecuentes) manteniendo todo lo que hizo de FIFA 09 el simulador de fútbol líder, por encima del intocable Pro Evolution Soccer. Atrás quedan los tiempos del "off the ball", el "freestyle control" o el "first touch", con FIFA 10 Electronic Arts ha aprendido la lección y ha olvidado esa molesta manía de introducir nuevos controles que sólo derivaban en un auténtico caos jugable.
Irónicamente, la principal novedad que se ha introducido en FIFA 10 es el denominado control de 360º, que no es más que la total libertad de movimientos del jugador. Atrás quedan los días en los que la carrera sólo se podía hacer en las ocho direcciones que corresponden al stick digital: con este nuevo control al fin podemos desplazar a nuestro jugador al punto exacto que deseemos. Este sistema también se aplica a los regates (pulsando L1), con lo que la pelota quedará mucho más pegada al jugador y nos permitirá controlarla con muchísima más precisión para poder superar la defensa del contrario.
Quizás el juego ha sufrido más cambios a nivel defensivo. El principal foco de atención, y el que más mejoras ha recibido, es el portero. La IA que lo controla es muchísimo mejor, y los típicos goles de vaselina de FIFA 09 son cosa del pasado. Su reacción en el uno contra uno es también mucho más natural, y con animaciones mucho más orgánicas. La defensa ahora cubre mejor los huecos, y es capaz de anticiparse a nuestros actos con muchísimo más acierto. Pero lo que realmente sobresale frente al resto es la excelente reacción que tiene el equipo como bloque, jugando de forma más real y conjuntada. Si, por ejemplo, subimos a un defensa a rematar un córner, el resto de jugadores serán conscientes de este hecho y actuarán para suplir su baja en defensa, ya sea retrasando la posición de un centrocampista o juntando mejor las líneas. Todo ello de forma automática y transparente para el jugador, controlado por una IA que, esta vez sí, actúa igual que como lo haría un jugador humano.
También la presión y el contacto físico han sido remodelados. Ahora ya no hace falta mantener pulsado un botón para presionar sobre el contrario; basta con situar nuestro jugador en la trayectoria para ver como ambos se enzarzan en un realista contacto físico por la pugna del balón. La anticipación y la colocación del defensa adquieren una importancia mucho mayor, y esto tiene ramificaciones (positivas) en la propia jugabilidad general del juego.
Claro que, al heredar motor y muchas características de las ediciones anteriores, FIFA 10 sigue cometiendo ciertos fallos presentes en el juego del año pasado. La física que rige al balón sigue siendo menos realista de lo deseable (o, como mínimo, menos que la de PES) y los chutes continúan la tónica ya habitual de ser poco contundentes. Es posible que estos detalles mejoren de cara a la versión final (su productor nos aseguró que todavía puede haber novedades al respecto, especialmente en lo que se refiere al tema de los chutes), pero llegados al punto en el que estamos de desarrollo sería extraño.
Otra novedad que nos enseñaron y que nos dejó con la boca abierta son los denominados "set pieces". Básicamente se trata de un sistema que nos permite crear nuestras propias jugadas de estrategia con una precisión desconocida hasta ahora. Se selecciona una zona del campo, la máquina situa a los jugadores según lo que sería la situación estándar, y entonces nosotros "grabamos" la trayectoria que seguirán los diferentes jugadores mientras se desarrolla la jugada. Se nos mostró un vídeo real y después un set piece creado con el juego para mimetizarlo, y el resultado era exactamente igual. Las posibilidades son inmensas, aunque el productor del juego reconoció que todavía no han decidido si implementarlo en el modo online porque genera dudas sobre si el balanceo de dificultad quedaría seriamente dañado con su inclusión.
Gráficamente el juego es tremendamente continuista, aunque sí se pueden apreciar pequeños detalles que han mejorado. Aparte de las típicas animaciones mejoradas, una constante en las actualizaciones de los juegos de fútbol, se nota especialmente el esfuerzo del equipo de programación en conseguir que las transiciones sean lo más ligeras posibles, casi sin interrumpir el encuentro. Ya no existen animaciones pre-guionizadas (como por ejemplo el arbitro enseñando una tarjeta), lo cual hace que el ritmo sea mucho mejor. Y los típicos logos de EA Sports que aparecen en pantalla introduciendo las repeticiones son tan rápidas que pasan totalmente desapercibidas.
En resumen, FIFA 10 es más de lo mismo pero mejor. Se han pulido los pequeños detalles que chirriaban en la edición anterior, y se han añadido nuevas características que afianzan al juego de EA Sports en el trono de los juegos de fútbol. PES2010 viene fuerte y apuntando maneras, pero sin duda el equipo de FIFA ha trabajado a fondo para conseguir que su juego sea capaz de resistir el envite. A nosotros el resultado nos ha convencido, pero la decisión final, como siempre, la tendréis vosotros...