Guía Castlevania: Lords of Shadow

Ante todo ten presente que aunque no lo parezca esto es un Castlevania, por lo que lo primero que hay que hacer cada vez que desbloquees una nueva habilidad, mágica o de la Cruz de Combate, es volver sobre tus pasos y explorar los niveles buscando nuevos caminos que escondan mejoras de armas o talismanes. Paredes que se pueden destruir, saltos imposibles, mecanismos que antes no podías activar... recuérdalos más adelante, tal vez te saquen de un apuro.

Resulta determinante dominar el movimiento de bloqueo y contraataque de Gabriel, puesto que la mayoría de combates contra semi-jefes y jefes finales se vuelven mucho más sencillos controlando la técnica. Además es una de las vías más rápidas para llenar la barra de concentración.

No te olvides nunca de combatir de forma ágil y variada, intercalando combinaciones adecuadas de golpes fuertes y débiles, lucha aérea y contraataques, para rellenar la barra de concentración. De esta manera tendrás siempre disponible el acceso a la energía de Gabriel, tanto oscura como luminosa, lo que evitará estar pendiente de encontrar fuentes de vida o altares de magia durante toda la partida. Amén de que los golpes quitarán un poco más de vida a los enemigos. Durante los enfrentamientos con jefes finales es de vital importancia luchar en estado de concentración.

No siempre es recomendable comprar habilidades justo cuando consigamos la cantidad de experiencia necesaria para desbloquearlas. A veces merece la pena ahorrar un poco más y adquirir un ataque más caro y potente en lugar de un combo de golpes que tal vez sólo uses en dos de cada cinco combates.

Abusa de la energía mágica, no seas tacaño. Existen muchas combinaciones que se aprovechan de ella para hacerle la vida a Gabriel un poco más sencilla. No te preocupes por que se te acabe, si dominas la concentración de combate siempre tendrás reservas.

Comprueba en el diario qué armas secundarias son más efectivas contra cada tipo de enemigo y aplica ese conocimiento. Esos hombres lobo están deseando parar tus dagas de plata con el pecho.

Reserva las gemas del alma para los monstruos más letales; quitan un buen pellizco de vida. Ideal para rematar jefes finales.

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