El hacker Gary Bowser acepta pagar una multa de diez millones de dólares a Nintendo
Se sumará a la pena por la demanda federal.
El hacker canadiense Gary Bowser ha alcanzado un acuerdo con Nintendo of America por el cual pagará una multa de diez millones de dólares para cerrar uno de los casos judiciales abiertos contra él.
La sentencia definitiva del caso civil que enfrentaba a ambas partes se archivó anoche, y es independiente al caso federal por el que ya se declaró culpable a finales de octubre. En esa otra sentencia fue condenado a pagar cuatro millones y medio de dólares y a una pena de hasta diez años de cárcel.
Bowser, de cincuenta y un años de edad, montó un negocio en el que vendía consolas modificadas para jugar a videojuegos piratas.
Según la sentencia, al trabajar con la empresa de modchips Team Xecuter, Bowser "participó con conocimiento en un negocio cibercriminal en el que se hackeaban consolas" desde 2013.
Como parte del acuerdo alcanzado en el caso federal, Bowser admitió haber "desarrollado, fabricado, publicitado y vendido una variedad de dispositivos que permitían a los compradores jugar a versiones pirateadas de títulos con copyright, comúnmente conocidas como 'ROMs'".
El caso que ha enfrentado a Gary Bowser con Nintendo se ha alargado durante años, aunque alcanzó un nuevo nivel de gravedad cuando el gobierno norteamericano presentó cargos federales contra el hacker, que fue arrestado tras fugarse a República Dominicana, donde se cree que todavía se encuentra al menos uno de sus socios.