Ken Levine: "La violencia es un instrumento del narrador"
El creador de BioShock asegura que forma parte de la narrativa "desde sus albores."
Ken Levine, creador de BioShock Infinite, ha asegurado que la violencia en los videojuegos no es más que otra herramienta disponible para el que cuenta una historia.
A veces se acusa a los videojuegos, injustamente, de ser un reducto de violencia en el que lo visceral tiene libertad total para desatarse y para convertir a jóvenes cuerdos e inocentes en psicópatas en potencia, pero para Levine eso no es así: él pasó su infancia jugando a Dragones y mazmorras, siendo testigo de matanzas y suicidios, y parace que le ha ido bastante bien.
"La violencia, para bien o para mal, se remonta a los albores de la narrativa, forma parte de las herramientas del narrador," ha asegurado Levine al programa de radio OnPoint.
"Recuerdo cuando era un niño; no era muy popular. Era un pequeño nerd," confiesa. "Y no tenía amigos porque no era muy bueno socializándome. Y encontré Dragones y mazmorras, y si recuerdas, en los setenta todos ponían el grito en el cielo con este juego: los niños se iban a matar todos entre ellos y a desaparecer en cuevas. Y eso sucedió con los cómics y con la música rock."
A pesar de ello Levine se ha convertido en uno de los creativos más laureados de la industria. Su último juego, BioShock Infinite, se llevó un 9/10 en nuestro análisis.