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Opinión: La industria pide una nueva generación a gritos.

¿Y los usuarios? ¿Realmente la necesitamos?

Esta entrada está escrita por el staff de Game Over. Para ver todos sus artículos podéis visitar su blog, que está dentro de Eurogamer.es.

¿Os habéis fijado en la constante que se repite cada semana desde hace unos meses en las noticias del videojuego? De un tiempo a esta parte raro es el día en que no aparece algún titular en que la compañía de turno nos asegura que se están preparando ya para la "Next-Gen". Aquí mismo, en EuroGamer, ya hemos leído las declaraciones de los gerifaltes de Rockstar, Naughty Dog o incluso Infinity Ward, asegurando que serán pioneros en la próxima generación de consolas. A todo esto sumadle los constantes y manidos rumores sobre las supuestas Xbox 720 o PlayStation 4 que aparecen todas las semanas; o los constantes ataques de personajes como Michael Patchner a la futura Wii U.

No se si será mi imaginación, pero noto cierta desesperación en la industria por la llegada de esa nueva generación... De hecho no me extrañaría nada que esos rumores surgieran, o se alimentaran, de esas ansías de los estudios de desarrollo. Todos ellos las piden a gritos y todos aseguran estar preparándose para su inminente llegada, pero... ¿Preparándose para qué?

La historia nos enseña que las Generaciones de Videoconsolas, efectivamente, rara vez han durado más de cinco años (dejando a un lado las consolas de generación anterior que sobreviven a sus hermanas mayores, como PS2). Esta generación lleva ya siete años, pero tanto Microsoft como Sony ya han declarado por activa y por pasiva que ésta va a ser especial y que como mínimo le auguran unos diez años de vida. Tiene lógica, tanto Kinect como Move, las grandes apuestas de estos fabricantes, aparecieron justo a los cinco años de generación. No iban a dar por muerta la generación justo después de haberse gastado semejantes fortunas en las campañas de marketing de ambos ingenios. Entonces, si todavía quedan como mínimo tres años de generación, ¿exactamente para qué se están preparando todos esos estudios?

Sony y Microsoft consideran a Move y Kinect como su particular Next-Gen, una nueva generación de dispositivos en que el avance palpable no está en los gráficos sino en su control.

De una manera muy retorcida estoy casi convencido de que tanto Sony como Microsoft consideran a Move y Kinect como su particular Next-Gen, una nueva generación de dispositivos en que el avance palpable no está en los gráficos, sino en su control. Exactamente lo mismo que hizo Nintendo hace seis años, cuando nos vendió una consola de generación anterior camuflada con un nuevo mando.

¿Pero qué pasa con los consumidores? Todos los estudios quieren nuevas consolas pero, ¿y nosotros? ¿Alguien nos ha preguntado? No, pero sí han preguntado a quien nos vende esos juegos, a la franquicia Game. Tal como leíamos aquí mismo, uno de sus jefazos, Ian Shepherd, asegura que sí, que los usuarios también queremos nuevas consolas. Es más, asegura que los bajos resultados de las últimas campañas, especialmente la navideña, se deben, además de a la evidente crisis económica, a la baja confianza de los usuarios y a estar al final de un ciclo de consolas.

Shepherd asegura que los resultados en hardware son bajos, lo que nos indica que el público está listo para una nueva generación. Yo no tendré flamantes títulos económicos en mi haber, pero a mi eso lo que me indica es que las diferentes consolas ya se han asentado en el mercado y que han abarcado todo su nicho. De hecho, Shepherd asegura que la solución para todos sus problemas está en los nuevos dispositivos, como esa 3DS que ha repuntado en ventas y en el futuro lanzamiento de Wii-U y de PSVita. Espero que el señor Shepherd no esté atento a las ventas de la consola de Sony al otro lado del charco no vaya a darle un disgusto...

Comprendo que yo no soy el usuario medio, ni tampoco el comprador habitual de Game; pero si me preguntan a mi, a título personal, si quiero y deseo una nueva generación de videoconsolas, me temo que responderé que no. No quiero ni deseo todavía una Next-Gen.

¿Y por qué no? Pues entre otras cosas porque estudios como Naughty Dog o Epic Games han demostrado que todavía son capaces de exprimir y sacar un rendimiento exagerado a las consolas de esta generación. Los estudios tienen una experiencia palpable con las máquinas actuales, y cada año aparecen más obras maestras seguidas una detrás de otra, hasta el punto que soy incapaz de quedarme con tan solo un puñado de juegos selectos para este año.

No quiero todavía una nueva generación porque los estudios pequeños, los humildes y los indie, ya nos han demostrado que no hace falta una máquina puntera para crear una obra maestra. Y que los gráficos foto realistas, las tres dimensiones y los controles sofisticados de detección de movimiento no son más que artificios. Aún se puede sacar mucho provecho a las plataformas de juegos descargables, como Xbox Live o PlayStation Network, las cuales ya han significado el descubrimiento de no pocos nuevos talentos.

Si me preguntan a mi, a título personal, si quiero y deseo una nueva generación de videoconsolas, me temo que responderé que no.

Creo que una nueva generación no es necesaria todavía. Pese a que no soy un gran fan de Kinect o Move, a ambos sistemas aún se les puede sacar mucho rendimiento. Y pronto sabremos si ha valido la pena, con la inminente aparición de nuevos títulos que supuestamente aprovechan al máximo sus capacidades. Además, tener nuevas consolas en el mercado no es garantía de nada, y si no miren las ventas de PSVita o el reducido catalogo de la 3DS de Nintendo.

No me hace falta una nueva generación cuando los que deseamos gráficos de una calidad intachable ya tenemos el PC de toda la vida, donde se están y seguirán haciendo durante mucho tiempo los mayores avances en la materia. Estoy convencido, además, que vista la evolución del mercado, todo el sector hardcore acabará con los años por mudarse al sector de los compatibles, aunque esa reflexión daría para todo otro articulo.

Y por último, como catalán de pura cepa que es uno, no quiero una nueva generación porque cuesta un dinero que no tengo, y la situación económica no está para muchos homenajes.

Es evidente que las limitaciones de los sistemas actuales son patentes, y afectan a títulos como Battlefield 3 o Skyrim, pero siendo como son juegos pensados y desarrollados con el PC en mente, me remito a mi reflexión anterior. Y es que en cierta manera comparto con Microsoft y Sony que la nueva generación del videojuego ya está aquí y se llama Kinect, o Move. No me gusta nada como la están explotando; como tampoco me gustó lo que hizo Nintendo con Wii, desaprovechando un potencial increíble por el camino, pero lo comparto, pese a que acepto que es una forma algo retorcida de ver las cosas.

¿Qué tarde o temprano deberá haber una nueva generación? Desde luego, pero por más que se hable de ellas, dudo que ninguna de las dos compañías presente sus nuevas consolas en mucho tiempo. No me cabe duda que ambas ya tienen algún prototipo preparado en la recámara, pero solo por si su gran rival presenta algo a traición. En otras palabras, no me extrañaría que ambas estuvieran en un enroque perpetuo que puede durar no pocos años. Pero por lo que a mi respecta, la actual generación puede durar esos diez años prometidos. Y si quieren tomárselo con incluso más calma, tienen mi más sincera bendición.

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