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La Liga de Videojuegos Profesional

El deporte electrónico llega a España.

«Estamos sorprendidos también porque nos han enviado mucho feedback de la web», reconoce. La web de la LVP permite al usuario informar de errores o sugerir mejoras tanto de funcionamiento como de reglamento, y el entusiasmo de los jugadores está siendo tal que «no podemos arreglar tantas cosas como nos piden», nos dice, ilusionado, David. Esta pretemporada en fase beta está sirviendo para pulir todos los detalles de la web, no sólo eliminando fallos sino también depurando la usabilidad para que todo sea lo más sencillo e intuitivo posible para que lo importante, aquello a lo que el jugador dedique más tiempo, sea lo realmente importante: competir. Para la fecha de lanzamiento final y abierta al público, todo apunta a que la experiencia usable será perfecta y fluida.

Como decíamos al principio, este fin de semana se realizó la primera tanda de torneos. Tanto los juegos oficiales como los de exhibición fueron puestos a prueba por los ya muchos cientos de usuarios que conforman la base de competidores de la Liga, y la respuesta fue muy positiva. Muchas comunidades de juego «se han estrenado y desde entonces parece que el pique ha surgido y los rankings se han puesto calentitos», asegura David, y la base de usuarios se va nivelando. Uno de los problemas que tuvo (y en parte, aunque mucho menos, tiene y tendrá hasta el lanzamiento público) la Liga en sus primeras semanas fue la proliferación de jugadores de muy alto nivel, lo que hacía que cualquiera que no dominara a la perfección los juegos se encontrara poco menos que indefenso en cualquier partida que jugara.

La preparación de la sala de máquinas de Halo: Reach.

Esto es comprensible por una razón sencilla: los jugadores profesionales, muchos de ellos con experiencia internacional en torneos de primer nivel, fueron los primeros en enterarse de la iniciativa y, mientras la Liga iba llenándose de usuarios, los que más jugaron en las primeras fases. El sistema de torneos de la LVP recompensará el buen nivel pero no penalizará a los jugadores que no sean profesionales: habrá distintas categorías en las que competir repartidas en distintos puntos del ranking, para que cualquiera pueda, con un poco de esfuerzo, llegar a competir con jugadores de su nivel. Lo más importante aquí es jugar, divertirse y disfrutar de la competición, con lo que las posibilidades de mejorar e incluso ir escalando hasta llegar al nivel de los maestros están más que presentes desde el primer momento.

De cara a la primera temporada, las expectativas son altas: aunque los campeones de la temporada 0, que se desarrollará antes del lanzamiento público, son «un poco simbólicos», esta no será la tónica general de la Liga. Los torneos de las temporadas oficiales tendrán «una dotación económica importante, no sólo para los primeros de los rankings como ha ocurrido en los torneos bienvenida, sino para los cuatro primeros». Desde la LVP animan a todo el mundo a competir, a escalar en el ranking y a mandar feedback para mejorar todo lo posible la Liga; nosotros en Eurogamer ya estamos entrenando y participando en algunos juegos, y creemos que una Liga de juego competitivo serio y bien organizado es interesante e importante. En la redacción ya estamos entrenando para intentar colarnos en algún torneo importante; os animamos a jugar, escalar en los rankings y, si os encontráis con nosotros en alguna partida, os deseamos suerte: contra nosotros, la vais a necesitar.

Podéis consultar la página de la LVP mediante este enlace.

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