La película de BioShock sigue adelante, pero será mucho más pequeña y "más personal"
Netflix reduce el presupuesto.
La adaptación de BioShock que prepara Netflix no ha sido cancelada y sigue adelante, pero ha sido "reconfigurada" como una película "más personal" con un presupuesto menor, según ha reconocido su productor.
Roy Lee explicaba en una conferencia celebrada durante la Comic-Con de San Diego que los cambios en las políticas internas de la plataforma de streaming han provocado que "el nuevo régimen reduzca los presupuestos".
Como consecuencia de ello "estamos haciendo una versión mucho más pequeña... va a ser un punto de vista más personal, en vez de un gran proyecto".
Lee, además, explicaba que Netflix ha alterado su "estrategia de compensación" para que, de forma similar a los estudios de cine tradicionales, haya bonus en función del número de espectadores, "motivando a los productores a que hagan movimienetos para atraer a un mayor público".
A juzgar por estas declaraciones, parece que la película de BioShock ya no va a ser la gran superproducción que se esperaba cuando se anunció, sino una cinta más pequeña y contenida.
Curiosamente, el elevado presupuesto - se calculaba un mínimo de 160 millones de dólares - fue lo que provocó la cancelación del proyecto original de una película de BioShock, en el que trabajaron durante unos años Universal Pictures y el director Gore Verbinski (Piratas del Caribe, The Ring).