Lo negativo de un buen Metacritic
Los juegos cada vez son menos malos.
Warren Spector es un señor al que respeto mucho por su impresionante curriculum y con el que, normalmente, suelo estar de acuerdo cuando opina. La semana pasada, Warren escribió una columna en GamesIndustry sobre "el éxito". Contaba que los dos títulos de Epic Mickey habían sido los juegos más vendidos de su extensa trayectoria, y también de los que más cartas de aficionados había recibido (más que de Deus Ex, el juego que cuando se menciona alguien lo reinstala). Paradójicamente, habían sido los peor recibidos por la crítica.
En su columna, se quejaba de la influencia que tienen las reseñas en general, y especialmente Metacritic, dentro de la industria. Ya hemos hablado alguna vez de la cara oscura de esta web; de como desarrolladores como Obsidian pueden perder los bonos si el juego no alcanza una determinada nota o de como se embargan la publicación de análisis dependiendo de la nota de cara a tener un buen Metacritic los primeros días.
Metacritic se ha convertido para la industria en una forma empírica de medir la calidad de un juego, al menos para la gente que controla el dinero. No creo que el problema sea que Epic Mickey 2 no venda lo suficiente porque tenga un 59 (según Warren vendió más que Deus Ex, que tiene un 90), y tampoco que él o su equipo no encuentren trabajo porque sus últimos dos títulos no han tenido éxito. El problema es que, cada vez más, se desarrollan los proyectos pensando en el Metacritic.
Cada vez es más frecuente que durante el desarrollo se contraten a antiguos periodistas/bloggers para que te escriban una reseña del juego. Con este análisis, se intentan corregir todos los problemas que el analista haya sacado a la luz. Este tipo de prácticas puede llegar a influir en la fase de diseño, donde se priman las características que se valoran en los análisis. ¿Cuantos multijugadores mediocres hemos visto estos últimos años? Como no tener multijugador resta, muchos juegos lo añaden para que no les penalice su ausencia. Yo no sé si los juegos son cada vez mejores, pero lo que es seguro es que cada vez son menos "criticables". Quizás no tienen virtudes, pero tampoco tienen defectos.
Spector comparaba el crítico de videojuegos con el crítico de cine. Tal como él lo veía, el valor del crítico de cine es su opinión y lo que consideraba que debía ser una buena película y como aplica su criterio en todas las reseñas que hace. Creo que esto no lo hemos explotado lo suficiente en videojuegos. Por juventud del medio, por recursos o, simplemente, por falta de valentía, nos ha faltado potenciar las firmas. Y Metacritic agrava el problema. Se están haciendo juegos para el jugador medio. Si ya la mayoría de "analistas" tienen gustos muy parecidos, solo hace falta que lo que de verdad importe sea lo que opina la media estadística.