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Los mejores juegos de 2024 que no has jugado (I): No Case Should Remain Unsolved

Her Story.

Una de las virtudes que más aprecio de los juegos recientes de Sam Barlow como Her Story e Immortality es su confianza absoluta en que el jugador va a ser capaz de descubrir el misterio antes de que un marcador dentro de la propia interfaz del juego nos diga que hemos terminado con él. Nos deja todas las pistas sobre la mesa y nos permite ordenarlas en nuestra cabeza antes de llegar al punto en que se puede hacer más explícita la solución. Llevaba un tiempo buscando un título que replicase esa sensación, y lo encontré en una pequeña aventura desarrollada en solitario por Somi, un autor de Corea del Sur especializado en juegos de investigación basados en interfaz de texto como Replica o Legal Dungeon.

En No Case Should Remain Unsolved tenemos que descubrir la verdad sobre un caso sin resolver que sucedió hace varias décadas. La desaparición de una niña llamada Seowon en un parque infantil llevó a la agente Jeon Gyeong a descubrir toda una trama de personas relacionadas que, en última instancia, trataron de mentirle sobre su implicación en los hechos de una manera u otra. Una joven policía decide tratar de dar carpetazo al suceso hablando con la propia Gyeong, jubilada desde hace años, tratando de organizar sus recuerdos inconexos.

Para ello contamos con una interfaz en la que podemos repasar conversaciones del pasado que Gyeong recuerda haber escuchado, pero no es capaz de vincular a una persona específica. Cada columna representa a un interlocutor: los padres de Seowon, su hermano, su profesor, un tendero… La mecánica principal del juego es asignar las conversaciones a cada personaje pero también ubicarlas en el tiempo, ya que los nuevos fragmentos que recibiremos pulsando en palabras clave no vendrán identificados. De esta manera, No Case Should Remain Unsolved nos fuerza a aprender a detectar las voces únicas de cada personaje, a detectar hilos de conversación y a tratar de mapear la historia en nuestra cabeza haciendo malabares con estos textos incompletos.

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Cada cierto tiempo encontraremos distintos tipos de bloqueo que nos impedirán continuar a menos que seamos capaces de responder a una pregunta (conectando un nodo a la conversación donde se encuentra la respuesta) o bien de conectar suficientes fragmentos ordenados en el tiempo con una conversación contigua. Esta es la parte más “puzle” del juego, aunque casi resulta más una ayuda para evitar que avancemos sin pensar y seamos capaces de ir construyendo la secuencia de eventos hasta que todo empieza a encajar. Aunque tiene varios finales definidos, es probable que el jugador atento sea capaz de deducir la solución mucho antes de que el juego nos ofrezca una conclusión un poco más cerrada.

Pese a ser una historia breve, con una duración de apenas tres horas, No Case Should Remain Unsolved sabe dejar poso con una historia sobre las mentiras que le contamos a los demás y las que nos contamos a nosotros mismos. Si no la jugaste en su momento, es una pequeña delicia que además recibió una traducción al español unos meses después de lanzamiento, eliminando uno de los posibles obstáculos para su disfrute. No dejes ningún caso sin resolver.

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