ModNation Racers
Un lienzo en blanco para la creatividad.
Si hay algo que me ha gustado de Sony durante esta generación es su apuesta por el concepto play.create.share, inaugurado con el magnífico LittleBigPlanet. Es el sandbox definitivo: no sólo ofrece una completa libertad jugable, sino también las herramientas para liberar nuestra creatividad y dar rienda suelta a nuestra imaginación generando contenido y compartiéndolo a través de internet con nuestros amigos y la comunidad global. Ahora llega ModNation Racers, un juego de karts que hereda el espíritu creativo del exitoso título de Media Molecule.
Ello queda patente desde buen principio. ModNation Racers tiene como núcleo un enjambre de plazas (los ModSpots) desde el que se puede acceder a todas las opciones del juego, ya sean online o offline. De hecho la separación es muy difusa, empujando involuntariamente al jugador para que se integre dentro de la comunidad. En los ModSpots también hay varios paneles y pantallas gigantes en las que se muestran los karts más votados por los fans, los mejores pilotos y mucha información adicional.
Los tres diferentes editores que incluye ModNation Racers son tremendamente completos, ofreciendo una gran flexibilidad con la cual crear nuestras pequeñas obras. El editor de personajes (llamados Mods), por ejemplo, incluye una ingente variedad de elementos decorativos y pegatinas. Quizás no sea estrictamente necesario ofrecer más de doscientos tipos de ojos para colocar en la cara de nuestro muñeco personalizado, pero se agradece la apuesta por el exceso antes que la limitación. Y al igual que en LittleBigPlanet, la gran mayoría de ellos son desbloqueables, lo cual obliga a seguir jugando y a cumplir numerosos retos si queremos ampliar nuestra selección.
El editor de karts es similar al de personajes, pero el que brilla de manera propia es el creador de circuitos. Usando una apisonadora podemos trazar el recorrido sin problemas, para después adornar la pista con multitud de extras y objetos. Su simplicidad no limita para nada la potencia: al igual que ocurría con el editor de niveles de LittleBigPlanet, aquí la única limitación es prácticamente nuestra imaginación. Podemos optar por lo fácil y producir un circuito plenamente funcional en pocos minutos, o bien dar rienda suelta a nuestra creatividad y obtener un resultado que puede rivalizar sin problemas con el de los circuitos que se incluyen de serie en el disco. Su uso es tan fácil que los tutoriales (aunque existentes) se vuelven casi innecesarios.
Si habéis jugado a cualquier Mario Kart ya os podéis hacer una idea de lo que podéis esperar de las carreras de ModNation Racers, porque éste sigue a rajatabla los principios instaurados por el juego de Nintendo… en lo bueno y en lo malo. Se mantienen esos vicios adquiridos en el género, como lo injusto de ir primero en una carrera y, estando a punto de cruzar la línea de meta, terminar en las últimas posiciones debido al uso de un power-up. Aquí tienen diversos niveles de potencia, y en los más avanzados la efectividad es demasiado elevada. El control no ayuda y podría haber sido algo mejor: el stick analógico es quizás demasiado sensible y exige más precisión de la que quizás hubiese resultado ideal.