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Presentación de Mario Galaxy 2 en Madrid

Charles Martinet, la voz detrás de Mario.

Que Super Mario es un clásico es algo que nadie puede poner en duda, y tampoco que lo es en muchos sentidos. Es un clásico porque, si fuese un libro, se enseñaría en clase; es un clásico porque tiene clase, estilo, elegancia; es un clásico porque en sí mismo supone una clase aparte. Al llegar a la presentación de Super Mario Galaxy 2 de esta pasada semana en Madrid, Super Mario fue también clásico en lo musical, puesto que nada más llegar nos recibieron unos estupendos violinistas, desgranando uno por uno los temas más famosos de la banda sonora que nos ha acompañado a lo largo de cientos de niveles plagados de setas, caparazones, monedas y plataformas. Para haceros una idea de cómo sonaba este dúo llamado Duet 1up podéis escuchar la grabación que realizaron nuestros amigos de Generació Digital. Qué mejor que el barniz de lo clásico para un clásico con mayúsculas, ¿no?

Después de haber disfrutado de la música con la que el gran Koji Kondo ha coloreado todos los Super Mario de estos últimos veinticinco años, el mismo Mario Mario nos dio la bienvenida a la Sala Cuarta Pared, un espacio para el teatro donde —muy apropiadamente— pudimos conocer al actor que hay detrás de los «Yahooooo!», «Oki doki», «Uh-oh» y del archifamoso «It’s a-me: Mario» de todos los tiempos: el gran Charles Martinet. Con un castellano más que bueno, herencia de los años adolescentes que pasó en España, allá por los primeros setenta del siglo pasado, nos contó anécdotas sobre su peripecia vital junto al buque insignia de Nintendo y las trufó de un sentido del humor inocente y completamente encantador.

Mario y Martinet, una fiesta continua.

Por ejemplo, nos contó que, como casi todas las cosas buenas de la vida, su trabajo poniéndole voz al fontanero italiano resultó ser fruto de la casualidad. Avisado a última hora por un amigo de que había un casting, llegó cuando las pruebas ya habían terminado y el director le admitió a concurso por los pelos. Cuando Martinet escuchó que debía interpretar a un fontanero italiano, imaginó al típico fontanero corpulento de Brooklyn, y comenzó a hablar con fuerte acento italo-neoyorkino, como un personaje de una película de Scorsese. El director de casting le dijo que buscaban otra cosa, y entonces Martinet recordó su propia interpretación del anciano italiano Gremio en la shakesperiana «The Taming of the Shrew», y empezó a inventarse una retahíla de situaciones absurdas y estrambóticas, de persecuciones alocadas y de equívocos en los que afinar su falsete hasta que la grabadora se quedó sin cinta. Y de esa prueba, que Martinet pensó que había sido un fracaso en toda regla, nació la voz de Mario y, por extensión, también las de Luigi o Wario.

Uno de los niveles de Super Mario Galaxy 2.

Pero, por más que Martinet nos encandilase con su encanto personal, el auténtico protagonista de la velada era Super Mario Galaxy 2, y lo era por méritos propios. Si queréis conocer nuestras primeras impresiones a los mandos del último título de la saga para Wii, sólo tenéis que echarle un vistazo al estupendo avance de nuestro compañero Josep María Sempere. Lo que pudimos ver en esta presentación no hizo sino confirmar nuestras sospechas y esperanzas: Super Mario Galaxy 2 es una lección magistral de diseño de niveles, de imaginación desbordante, de ganas de sorprender a propios y extraños, de jugabilidad inmejorable, de demostrar que la simplicidad en las formas no está reñida con la complejidad en el resultado, de que la Wii es capaz de impresionar si se sabe operar adecuadamente sobre sus resortes y que poner a prueba las capacidades y la habilidad del jugador es siempre el camino correcto. Un juego, en resumen, de los que justifican que Nintendo (y la marca «Miyamoto») siga siendo siempre sinónimo de calidad y diversión; y un juego que es, también, un aviso a navegantes: el GOTY de este año se va a vender caro.

Super Mario Galaxy 2 saldrá a la venta para Wii el próximo 11 de junio.

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