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Pro Evolution Soccer 2010

Ave fénix.

Pro Evolution Soccer 2009 es una mancha negra en el, por lo general, casi intachable historial de la saga futbolística de Konami. Justo cuando el veterano FIFA de EA Sports alcanzó su nivel más alto en muchas temporadas, Konami nos sorprendía (y no precisamente de forma positiva) con un PES que era casi un calco del anterior, con los mismos errores y vicios heredados. Quizás a nivel de ventas no fuese tan patente, pero a nivel de crítica el juego se llevó no pocos palos y, a juzgar por la ingente cantidad de comentarios y mensajes en foros, tampoco los fans quedaron muy satisfechos con el resultado final.

El primer paso para solucionar la situación era reconocer que las cosas no habían salido como debían. El propio Shingo Seabass, productor de la saga Pro Evolution, reconoció en varias entrevistas que el equipo no había estado a la altura, y pidió no pocas disculpas a los fans. Pero las palabras se las lleva el viento, así que la prueba de fuego sería ver si Pro Evolution Soccer 2010 volvía a errar el tiro o, en cambio, colocaba otra vez a la saga en el lugar que merece. Las buenas noticias son que, claramente, nos encontramos ante el segundo caso.

Hemos tenido la oportunidad de probar una beta al 50% de desarrollo de la edición de este año de PES, y debemos reconocer que nos ha gustado lo que hemos visto. El salto a nivel técnico es evidente desde el primer momento (ya hablaremos con más detalle sobre ello más adelante), pero os alegrará saber que el equipo de Konami no ha descuidado la jugabilidad y ha hecho los ajustes necesarios para que el juego se acerque lo más posible a sus mejores entregas.

Nada más comenzar un partido salta a la vista que se ha reducido la velocidad del ritmo de juego, algo que redunda en partidas algo más tácticas y en las que se pierde el vertiginoso ritmo de PES2009. Este nuevo enfoque, que acerca el juego más hacia la simulación que al arcade, no evita, sin embargo, que PES siga teniendo esa facilidad y rapidez de acceso marca de la casa, que permite que tanto novatos como jugadores experimentados se hagan con los controles y se adapten en cuestión de minutos. La curva está muy bien medida, y seguramente sea el hecho diferencial que hace de PES2010 algo tan grande. Se han eliminado también algunas situaciones en las que era demasiado fácil marcar gol, y ahora el reto para ello será mayor.

La beta: Liverpool-Barça en Anfield. Épico.

Puesto que la base ya era buena, en Konami han decidido ir retocando pequeños detalles y añadir nuevas características, especialmente en lo que se refiere a las opciones tácticas. Los menús de formación y gestión de equipo han recibido un buen lavado de cara, y ahora permiten visualizar de forma mucho más natural y fácil los efectos de nuestros cambios, que podrán realizarse de forma instantánea durante el propio partido. Los equipos, además, poseen variantes tácticas según si se encuentran en posición de ataque y defensa, y éstas se corresponden con las que tiene dicho equipo en la realidad. En el Barcelona, por ejemplo, puede apreciarse con claridad su juego de toque basado en la posesión y la circulación rápida del balón, mientras que en el caso del Liverpool el juego se apoya mucho en las bandas y en buscar la espalda de la línea defensiva rival. El resultado es francamente bueno, ya que estas versiones "virtuales" de los equipos realmente se comportan igual que lo hace el bloque real.

También a nivel individual se han introducido cambios, con el objetivo de conseguir diferenciar todavía más a cada jugador de los demás. Todos poseen una serie de características personales, representadas en forma de cartas, que describen sus habilidades especiales, esos trazos distintivos que hacen que, por ejemplo y pese a ser ambos delanteros, Messi y Torres jueguen de forma tan diferente. Estas cartas, que podemos activar o desactivar según deseemos, estarán también presentes en la liga master, lo cual permitirá que nuestros jugadores adquieran nuevas habilidades a medida que vamos haciendo evolucionar a nuestro equipo. Piensa en ellas como en una especie de indicaciones del entrenador: por ejemplo, Messi posee la habilidad especial de correr, y nosotros podemos escoger entre utilizarlo en defensa o ataque, y hacer que el jugador del Barça explote esa posibilidad para zafarse del contrario o más bien para perseguir con más eficacia cuando presiona en defensa.

Aunque no todo es perfecto, claro. A mi, por ejemplo, el sistema de pases no me acabó de convencer, puesto que me dejó con la sensación de que no era tan preciso como debería, y en ocasiones reaccionaba de forma un tanto extraña. Y el movimiento, pese a no estar ya tan marcado en las 8 direcciones de la cruceta digital como en ediciones anteriores, no es tan natural como el control 360º de FIFA 10. En todo caso estos son aspectos que podrían ser solventados en la versión final, y no deberían ser tomados como definitivos. En líneas generales se nota una progresión muy positiva a nivel jugable, y eso es lo que realmente cuenta.