Skip to main content

PS2: 10 años, 10 juegos

Estos son nuestros imprescindibles.

Tal día como hoy pero de hace diez años PlayStation 2 llegaba a las tiendas de toda Europa. Quizás muchos de vosotros recordaréis ese día... ¡Cómo olvidar ese día en que nos sablearon 74.990 Ptas. por aquella reproducción del monolito de 2001: Una Odisea en el Espacio! Y no olvidaréis tampoco todo aquel papeleo nunca antes visto que tuvimos que hacer para tenerla desde el primer día. En fin, lo cierto es que molaba bastante, todo hay que decirlo. Y tenía eso del DVD.

Ya llevaba unos meses en Japón, donde salió el 4 de marzo de 2000, y aquí no llegó hasta el 24 de noviembre, a punto a punto para Navidad. Desde entonces se han vendido más de 140 millones de unidades en todo el mundo, y aunque su lista de juegos no es tan numerosa también tiene tela. Para celebrar esta bonita efemérides hemos decidido hacer eso que tanto nos gusta a los de nuestra especie, una lista. Una lista con los que para nosotros son los 10 mejores juegos de PlayStation 2.

Devil May Cry

por Juan Francisco Bellón

Todavía recuerdo como con 16 años mis ahorros no me daban para comprarme la bestia negra de Sony, es por eso que aún hoy sigo dando gracias a aquel buen amigo que me dejó la que por entonces era la consola más potente del mercado. Cuando llegó a mi poder me dijo, "Te voy a dejar solo este juego porque quiero que sea lo primero que veas". No sabía que era Devil May Cry, y acostumbrado a juegos de PSX de acción lenta tampoco esperaba nada muy diferente.

Qué equivocado estaba, DMC era lo que siempre había querido de un juego de acción: gráficos de alucine, velocidad, disparos, espadas, saltos y acción vertiginosa, todo ello combinado con un diseño artístico salido de mi querida Barcelona y con una banda sonora a la altura del ritmo y la fuerza que transmite el juego. Por si fuera poco contaba un protagonista con pinta de lo que mi madre consideraba que era llevar una "mala vida", y a esa edad eso mola.

DMC nos dejó una ristra de palabras que no deberían faltar a la hora de realizar un juego de acción, palabras que a día de hoy siguen resonando en mi memoria y no deberían faltar en las vuestras, ¡Cool!, ¡Bravo!, ¡Awesome! y finalizando los grandes combos la grandiosa ¡Stylish!

De lo que sí podemos estar seguros es de que este primer Devil May Cry dejó huella, y no solo en el corazón de este jugón. Y es que hoy por hoy todo gran juego de acción frenética deja en el paladar un dulce sabor al "chulopiscinismo" de Dante.

Final Fantasy X

por Gustavo Benéitez

Final Fantasy VII destapó la caja de lo que unos cuantos ya conocían: los juegos de rol japoneses. El fenómeno se extendió por todo el mundo y aprovechaba mejor que ningún otro el soporte digital para impresionarnos con tremendas cinemáticas y sonido de alta calidad.

Con la llegada de Playstation 2 confluían varios retos: mantener vivo el efecto J-RPG, asombrar a través de su superioridad tecnológica con respecto a la generación anterior, y demostrar que el género seguía evolucionando y que sabía ofrecer cosas nuevas.

FFX fue la primera gran apuesta de Square en Playstation 2 para reivindicar el género y para crear otro "best-seller". Y no lo hizo desde el terreno de la duración, igual de enorme que en cualquier otro Final Fantasy; ni de los gráficos, por fin contaba con un motor totalmente 3D en el mapa y en las secuencias dramáticas; ni de su genial historia, siempre dispuestos a soltar alguna que otra lágrima. Sino a través del carisma de sus personajes: muchos de nosotros quisimos llevar a Auron al nivel final para verle destrozar enemigos de un sólo golpe.

Esa es la verdadera magia de FFX, recorrer el camino de las esferas –todo un acierto– para construir un personaje a medida y mantener al jugador en los raíles de un relato directo, sin bifurcaciones ni objetivos secundarios, pero sólido e intrigante hasta el final. Repleto de momentos emotivos, tensión sexual y grandes, muy grandes eones equipados de magias y golpes demoledores que evolucionaban al ritmo que marcaban sus portadores. FFX es un Final Fantasy redondo.