Quantum of Solace

Chicas guapas, cócteles y coches caros. Sofisticadamente básica, esta combinación ha llevado a la franquicia cinematográfica protagonizada por el agente secreto británico de más famosa línea introductoria a extenderse a lo largo de, atención, la friolera de veintidós películas.

Y con motivo del lanzamiento del videojuego homónimo de esta última vigésimo segunda entrega, Quantum of Solace, se celebró recientemente un evento de presentación en el que no faltaron elementos del universo Bond como los ya citados, al que en Eurogamer.es tuvimos la oportunidad (y el gusto) de asistir, y procedemos a resumir a continuación.

El ambiente en el que el juego se dio a conocer no pudo ser más efectista: un impresionante Aston Martin presidía la sala del elegante disco bar madrileño MOMA, alrededor de la cual se dispusieron una coctelería y dos mesas de casino. No es difícil imaginar por tanto, que cuando Mónica García y Fernando Moreu, RRPP y Jefe de Producto de Activision España respectivamente, quisieron congregar a los asistentes para presentar las características del juego, lo tuviesen complicado con tanta distracción. Cuando lo consiguieron, y tras una breve charla introductoria, pudimos ver a Fernando jugar un escenario hasta entonces inédito, para que nos hiciésemos una idea de lo que el juego ofrece.

James Bond: Quantum of Solace es un juego de acción en primera y tercera persona, en el que asumiremos el papel de Bond (¡por favor!) y haremos uso, no sólo del arsenal habitual en un juego de este tipo, sino también del amplio repertorio de gadgets con el que cuenta el agente secreto. Y es que no sólo de tiros parece querer vivir este juego, porque se hizo especial hincapié en el hecho de que contaría también con numerosas fases de infiltración en las que pasar inadvertido sería la clave.

Utiliza un sistema de coberturas y movimiento similar, por lo que pudimos ver e intuir, al de otros títulos como Gears of War, esto es: una vez estemos a cubierto parapetados tras algún elemento del escenario, podremos asomarnos y disparar a nuestros enemigos haciendo uso de los gatillos, mostrándose la acción en tercera persona. También típicas de las películas de 007 resultan las escenas de peleas y forcejeos con enemigos. Esto está trasladado al juego de una manera bastante curiosa. Una vez cerca de un enemigo, podremos prescindir de nuestras armas de fuego para apretar un botón y entrar en un modo de QTE (Quick Time Event, aprieta un botón en un determinado instante) para intentar desarmarlo y noquearlo al instante. Si bien muchas veces se abusa sin criterio de este recurso en el diseño de juegos, lo que pudimos ver (esperemos tener razón) en esta ocasión no llegó a chirriar como en un principio pudiéramos imaginar.