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Resident Evil 5: Lost in Nightmares

Vuelta a los orígenes.

Aunque pueda parecer otra jugarreta de Capcom con esto de los contenidos descargables, Lost in Nightmares es uno de esos capítulos que podría perfectamente formar parte del guión principal de Resident Evil 5 por diversos motivos, entre ellos su cuidada ambientación y el giro que supone su planteamiento dentro de la fórmula "balas vs zombies" de esta última entrega de la serie. De hecho, Lost in Nightmares es un capítulo descartado a última hora por falta de tiempo, presupuesto o por una mera cuestión comercial.

Los que habéis jugado Resident Evil 5 (pequeño destripe hasta el final del párrafo) recordaréis un flashback de Chris en el que muestran cómo supuestamente muere Jill Valentine al caer por el acantilado de la mansión Spencer arrastrando con ella a Albert Wesker. Es en este contexto a primera vista pasajero en el que se desarrolla Lost in Nightmares. Pero nada más lejos de la realidad; revisitar la mansión del megalómano fundador de Umbrella y epicentro de la historia de la saga es toda una experiencia religiosa para sus seguidores.

El regreso de la pareja de agentes de S.T.A.R.S. a la sobrecogedora finca/laboratorio ha sido doblemente significativa. La filosofía de combate non-stop contra las hordas de Majini de la sabana africana se diluye entre la bruma a medida que nos vamos introduciendo en el lóbrego ambiente de la casa que conforman los angostos pasillos, las puertas cerradas o el sonido de los truenos de la tormenta que azota la morada de Ozmund E. Spencer, y su misterioso secreto.

Para lograr el castigo psicológico que se pretende en esta vuelta a los orígenes, hay que echar el resto en la ambientación. Difícilmente podrá asustar algo que no impresione. Lost in Nightmares toma buena nota y se luce al recrear, para la vista y el oído, la mansión Spencer. Un lugar decadente, opresor, de pasillos estrechos, donde el mal se palpa en el ambiente. Avanzar con el alma en vilo para prevenir los sobresaltos vuelve a ser la tónica dominante en este capítulo, una sensación realmente conseguida gracias al buen trabajo de sonido y a la evidente escasez de munición que se supone dentro de una casa ¿deshabitada?

Lost in Nightmare representa como ya decimos un retroceso de la a 1996, a su planteamiento de exploración y resolución de enigmas, relegando el combate directo a la última posición de la lista de opciones que tenemos para evitar una muerte horrible. Tanto es así, que sólo encontraremos a un nuevo tipo de enemigos, ¡pero qué enemigos!

El resto queda en manos de la ambientación opresiva, la música nerviosa y alguno de los guiños sonoros más entrañables de los últimos cinco años (el pasillo de los perros), elementos que aúnan fuerzas para coger al jugador por el cuello de la camisa y meterlo de lleno en un remake en alta definición de un trocito del Resident Evil de Playstation.

Pero esta vez el guión no será tan magnánimo con el jugador como para hacerle un tour por toda la casa, puesto Chris y Jill deben investigar la supuesta presencia de Spencer, y no tienen tiempo que perder. El capítulo comienza exactamente en el hall principal (con su correspondiente easter egg oculto en la puerta de entrada) y nos llevará a través de sus habitaciones más conocidas para desembocar en el subsuelo de la mansión, un laberinto/prisión tremendamente siniestro, para al final volver ascender y enfrentar a Neo, quiero decir a Albert Wesker, en el ya famoso combate de la biblioteca.

La duración de este guiño en forma de contenido descargable ronda la hora y media dependiendo de lo rápido y hábiles que seáis, y su precio es de 400 Microsoft Points, una minucia si lo comparamos con la cantidad de amor que desprende. Además el pack incluye como personajes seleccionables a Barry Burton y Excella Gionne para el modo Mercenaries Reunion, y la posibilidad de desbloquear algunos más, como Rebecca Chambers o trajes alternativos para Chris y Sheva, consiguiendo las mejores puntuaciones.

Todo es posible y nada es seguro dicen, pero el sendero que ha tomado este capítulo nos hace prever futuras alegrías provenientes de Resident Evil. A pesar de las críticas lanzadas sobre Capcom por su política de descargas, las saneadas ventas de Lost in Nightmares y el beneplácito generalizado de la crítica aseguran una futura entrega mucho más familiar y fiel a sus principios que Resident Evil 5, que por continuista, lo más que se puede decir de él es que se trata de un título digno y correcto. Adjetivos patrimonio de los mediocres. De juegos que viven de las rentas. De juegos que se acaban por inercia. De juegos que, por repetitivos, están más cerca de aburrir que de divertir. Y eso sí que da miedo.

9 / 10

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