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Resistance: Retribution

¡Soy James Grayson, zorras!

…Tal vez donde flaquea un poco el control, o la dificultad según se mire, es en las situaciones que requieren apuntar rápidamente y en primera persona a zonas concretas de los enemigos, sin la ayuda del autoapuntado. Aquí sí que se echa en falta más precisión, aunque también es posible que un servidor sea un tanto manco para tal menester, pero la sensación que nos ha dado es esa.

Además de los movimientos básicos de disparar y moverse, Grayson hereda como no podía ser de otra forma a esta alturas el sistema de cobertura de Gears of War, con el matiz de que dicha acción defensiva se activa contextualmente, es decir, al acercarse a parapetos como esquinas o muebles nuestro John Mclain particular se cubrirá sin necesidad de apretar botones.

El resto de acciones habituales en este tipo de juegos, como las recargas, selección de armas, acciones como abrir puertas o aupar al compañero hasta un saliente quedan a merced de la cruceta, completándose así la cuadratura del círculo de un control más que bueno. Bend ha estado muy acertada en este aspecto, que a priori siempre ha sido el mayor escollo de PSP.

¡¡Sí!! He matado a todo lo que tuviera vida y se moviera y hoy he venido a matarte a ti…

¿Y qué os vamos a contar de la mecánica que no sepáis ya? Resistance Retribution es un clon espiritual de sus hermanos mayores. Un título de acción clásica, del aquí te pillo aquí te mato sin ninguna pretensión mas allá del mero derroche de testosterona y plomo. La verdad es que no sorprende. A estas alturas meter marcianos, marines calvos, jefes finales y tres dosis de épica en un videojuego es lo mismo que mezclar patatas, huevos y sal y querer hacer algo distinto a una tortilla. No se puede.

A su favor hay que decir que es un shooter accesible, con una dificultad más que amable en el modo normal. Los botiquines abundan al igual que la munición aunque seguiremos sufriendo esos momentos a lo Killzone Liberation de “ay virgencita dame un botiquín”. Y al igual que la obra maestra de Guerrilla, los puntos de guardado están al principio de cada misión, confirmándose la regla no escrita que dice que para disfrutar un juego en una portátil tienes que estar en tu casa. Por favor, ¿alguien podría decirle a los desarrolladores que cuando me tengo que bajar del tren necesito guardar la partida en ESE momento? Gracias. Por lo demás, existen puntos de control a lo largo de las misiones para evitar repetir una y otra vez todo un nivel en caso de muerte por accidente laboral.

Como viene siendo marca de la casa, Resistance Retribution también cuenta con un elaborado modo multijugador con numerosas posibilidades, que ofrecen todo lo que se puede esperar de un lanzamiento actual. Todos lo modos habituales están incluidos, pero el más interesante es Asimilación, algo parecido al modo Infección de Halo 3 en el que el bando de los malos (dopados con varios handicaps) van convirtiendo a los jugadores a su causa hasta que el último superviviente las pasa canutas para no morir. Puro pánico claustrofóbico. Tomen nota en Capcom.

No te imaginas cómo le crujieron las vértebras a tu hermano cuando le partí el maldito cuello

Esta vez Sony a dado en el clavo. Resistance Retribution tal vez no sea el príncipe azul que llevan pidiendo a gritos durante meses. Resistance Retribution es un gran juego de acción, que aprovecha la ambientación desarrollada en PS3 y la adapta a una consola portátil huérfana hasta ahora de títulos similares medianamente manejables.

Aclaremos una cosa, aquí no vais a encontrar veinte enemigos simultáneos [1], humo volumétrico o una IA digna de Deep Blue. Estamos ante algo hecho con dedicación pero sin virtuosismo, un juego excelente en el apartado gráfico y normalito en mecánica. Algo más allá de la suma de las partes de Resistance 1 y 2. Y eso es algo que muy pocos juegos pueden decir dentro del catálogo de la portátil de Sony. Altamente recomendado.

[1] Por el contrario aparecen, e incluso manejaremos, mechas. +1 a la nota final.

9 / 10

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