RetroNavidades
Santagaming del Vintage Fermoso.
Tetas, Psicopatas y Lemmings
O lo que es lo mismo, la combinación perfecta que hizo del periodo comprendido entre 1988 y 1994 los mejores tiempos para insuflar irreverencia y noñez soportable a todo esto de lo que estamos hablando.
De lo primero se encargo aquella Valkiria de la opulencia mamaria y diosa de la hipérbole pectoral llamada Maria Whitakker. Sí, aquella que escondía (poco, eso sí) sus secretos mas íntimos en la portada de Barbarian (1987) y que sólo un año después nos lo mostraría TODO (bueno, casi todo) en Maria´s Christmas Box. Programado para Amiga, Atari ST, Commodore 64 y Spectrum (pobres, lo que sufrieron) por Anco Software, se trataba de un Strip Poker con imágenes digitalizadas de aquel torbellino sexual.
Para compensar el sofoco que nos produjo, las siguientes navidades se mostraron mucho mas tradicionales con The Official Father Christmas (1989) para Amstrad, Spectrum y Commodore 64, juego cuyos beneficios se destinaron a la fundación Save The Children y que evidenciaba la mala vida que se traía nuestro amigo sufriendo el acoso de duendes, aviones, pajarillos o nubes muy puñeteras que le impedían repartir a tiempo Madelman´s y GiJoe´s por todo el mundo.
Claro que todo cambió radicalmente cuando los programadores empezaron a aprovechar las capacidades del todopoderoso Amiga 500, que salvo excepciones netamente infantiles como Barney Bear Meets Santa Claus (1990), insuflaron nueva vida con arcades tan surrealistas como Santa Xmas Caper (1992). Años antes, esta producción de Zeppelín Games había sido programada en Spectrum, Commodore 64 y Amstrad en la línea de aquel scroll horizontal que inauguró el ya mencionado Special Delivery. Sin embargo, en Amiga se opto por convertir aquello en un plataformas manejando a Santa (sin trineo) por unos escenarios donde aquellos muslos de pollo y paisajes a medio camino entre Zool (de ese mismo año) y Monty Python's Flying Circus resultaban brillantes. Otros incunables como Psycho Santa (1993) o Santa & Rudolph do Christmas se encargaron de dejar bien claro que era perfectamente posible realizar juegos que aprovecharan el indudable potencial cómico del personaje y lo bien que se acoplaba su idiosincrasia en aquellos tiempos de píxeles locos, locos.
Por otra parte, compañías como GraftGold distribuyeron versiones gratuitas de sus juegos como Fire&Ice (1992) en revistas especializadas; filón que se aprovechó en franquicias tan populares como Lemmings (1991-94) o All Terrain Racing (1994) y cuyo último representante de envergadura lo representa Christmas Nights into Dreams (1996). Sega decidió regalar esta expansión (jugable sin necesidad del original) tanto en diversos magazines como en packs de su consola, presentando una estética navideña siempre que el reloj interno de Saturn indicara encontrarse en los meses de noviembre a enero.
Conclusiones y misceláneas
Como han podido comprobar, el mundo de la consolas no ha sido pródigo en juegos de este tipo, cuya excepción representa el simpático Daze Before Christmas (1994), desarrollado originalmente para Megadrive por Funcom y aprovechando el motor gráfico de su producción anterior, We´re Back! A Dinosaur´s Story; empleando todos los tópicos habidos y por haber en el genero plataformero sin especial brillantez pero de manera muy competente gracias a su notable variedad de escenarios e incluyendo, como no, los inevitables repartos en trineo. Fue programado también en SuperNintendo con resultados igual de convincentes por su desenfadado carácter cómico y asequible jugabilidad.
Aunque a posteriori existen títulos de reminiscencias navideñas en formatos como Game Boy Advance, Dreamcast o Game Cube, así como juegos que por cuestiones de espacio se nos han quedado obligatoriamente en el tintero, no queremos dejar de mencionar el trabajo de algunos programadores amateurs en hacks para Nes o Megadrive. Aquí tienen, por tanto, algunas capturas de ediciones bastante curiosas sobre Final Fantasy, Super Mario Bros 2, Sonic o el dificilísimo Luigi and the Christmas Quest, que fácilmente encontraran por la red para hacerlos funcionar con su emulador favorito.
El espiritu de Santa Claus también ha empapado la publicidad de revistas ya añejas, causando horrores como los libro-discos navideños de Pac-Man, generando merchandising o ya en la actualidad, inspirando a artistas del Chiptune como es el caso de 8BitsPeople u 8BitsJesus.
Relegado prácticamente al formato Flash o Java para navegadores y móviles, todo esto parece haberse quedado en un pasado muy, muy lejano, nada aprovechado por las compañías actuales e irremediablemente sin visos de regresar a nuestras flamantes consolas “next generation”. Tal vez algunos se pregunten si realmente lo necesitamos. Lean ustedes de nuevo las primeras líneas de este articulo y digan si realmente no pagarían por ver juegos así en sus Xbox 360 o PS3. Mientras reflexionan en ello, aprovechamos para lanzarles una felicitación retroactiva elaborada en su día por Matra Corporation y que servidor utiliza como merecido homenaje a una de las compañías autóctonas que mejor han sabido demostrar las posibilidades de una presencia vigente en lo vintage. Con este oportuno (e inevitable) juego de palabras y rememorando aquello que dijo cierto genio de Minneapolis hace algunas décadas, creo que esta noche me iré de fiesta a encontrarme con Santa...como si fuera 1999. Va por ustedes, lectores.
Eurogamer Staff: Este artículo y la galería de imágenes que lo complementan han sido posibles gracias a un extenso trabajo de recopilación llevado a cabo por su autor, quien mientras todo el mundo se come el turrón, se encuentra en tratamiento post-traumático después de descubrir la verdad oculta sobre Papa Noel. En este laborioso ejercicio de documentación también ha tenido gran importancia el fondo gráfico de las páginas World of Spectrum, Lemon Amiga y Lemon Commodore 64.