Scene It? Grandes Éxitos de Taquilla
Tras la estela de Buzz.
Te ríes bastante y a veces hasta te tronchas. La segunda parte del juego de preguntas Scene It para Xbox 360 consigue lo que ya hace un año logró la que entonces fue su primera aparición en consola: divertirnos con una propuesta de concurso para cinéfilos que jugamos mediante unos mandos que simulan ser los pulsadores de un programa de televisión. Como principal novedad, en esta ocasión se incorpora la posibilidad de usar los nuevos avatares del New Xbox Experience.
Para aquellos que no conozcan su mecánica, Scene It parte del mismo planteamiento que un clásico juego de preguntas de tablero de los de toda vida. En este caso sobre un tema específico, pues todo gira alrededor del mundo del cine, por lo tanto es un título que encantará a los amantes del séptimo arte. El objetivo es acertar el mayor número de preguntas para ganar la partida. Como siempre se ha hecho, vaya.
En el terreno de los videojuegos, este Scene It bebe claramente del que desde siempre ha sido su gran rival, Buzz, el juego de preguntas y respuestas (o “Quiz” en su abreviatura en inglés) de su competidor Sony. Como en el juego de PlayStation, aquí encontramos diferentes tipos de pruebas que un dicharachero presentador nos irá explicando. De esta forma, así como Buzz está planteado como si de un concurso de televisión se tratará, este Scene It es mucho más humilde en su puesta en escena, pero no menos atractivo. Toda su acción gira alrededor de un destartalado patio de butacas que, sin embargo, desprende un inconfundible ambiente cinéfilo de sus aterciopelados asientos granate.
Esta “humildad escénica” hace que el juego desarrollado por Krome Studios y Screenlife sea mucho más rápido que Buzz, puesto que al no haber un presentador físico, ya que es una voz en voz (y muy cachonda, por cierto), ni tampoco todo el ceremonial televisivo, se aceleran mucho los trámites entre prueba y prueba. Este hecho redunda en partidas más rápidas que van desde los 15-20 minutos de la Corta, hasta los 25-30 de la Larga.
Y no os confundáis si os digo que es sobrio en su ritual de preguntas y respuestas, pues esto no está reñido con el hecho de tener un apartado gráfico más que correcto. La posibilidad de vernos a nosotros mismos en la pantalla haciendo mil y una posturas es un elemento muy divertido (eso sí, olvidaros de usar vuestros avatares si no tenéis la consola conectada a Internet). Así, visualmente el título es bastante atractivo para pertenecer a un género poco dado a virguerías gráficas.
Pero vayamos a lo más importante, las pruebas y la durabilidad. Respecto a la pruebas, se dividen en 21 distintas en las que deberemos ser el primero en responder, ordenar películas, descifrar enigmas visuales o bien estar muy atentos a un clip de vídeo sacado de alguna peli. Algunos de estos juegos son realmente ingeniosos, por ejemplo, adivinar una película a partir de una escena recreada con píxeles como si se tratará de un videojuego antiguo. También resulta curiosa la prueba consistente en acertar el film a partir de la formación de su poster, los retos con canciones o cortes de voz, o claro está, cuando nos piden que pongamos toda nuestra atención en los detalles de una escena en concreto (siempre con una compresión de imagen y sonido más que aceptable). Evidentemente, en cada partida no jugaremos a las 21 pruebas, sino que la consola decidirá por nosotros a que nos tendremos que enfrentarnos.