Avance de Shadow Warrior 2
Con katanas y a lo loco.
La presentación de Shadow Warrior 2 en el E3 empezó de forma bastante inocente, con un pequeño resumen de los controles a cargo de Tadeusz Zielinski, de Flying Wild Hog, para acto seguido presentar la nueva estructura de niveles de la secuela.
"El primer Shadow Warrior era un shooter en un pasillo lineal", explica Tadeusz. "Ahora cuando cargas un nivel éste se genera de forma aleatoria, con lo cual cada vez que lo juegas la disposición del escenario es distinta, así como la hora del día o la meteorología". Parece, entonces, que esta secuela pretende dar varios pasos hacia adelante.
Pero cuando llevo apenas cinco minutos con la demo, Tadeusz me mira con una sonrisa en la cara. "Mira al cielo", dice justo antes de recostarse sobre la silla cruzando los brazos. No me esperaba, desde luego, ver acto seguido un enorme pene en el cielo, formado por veinte o treinta estrellas. "¿Lo ves? ¡La polla mayor!".
"No es el único chiste sobre rabos que puedes esperar", aclara después, y no me engañaba: conté al menos otras tres referencias a los genitales masculinos en la demo de veinticinco minutos. Este juego tiene de todo menos clase.
Pero bajo esa capa de humor soez hay un juego muy decente, uno que es mejor que su predecesor en prácticamente todos sus apartados. Junto con la estructura de niveles aleatorios, Shadow Warrior 2 introduce varias características nuevas que han hecho que la saga pase de ser un shooter estándar a uno con posibilidades de ser algo bastante especial.
Hay, por ejemplo, un sistema de loot procedural que animal al jugador a repetir los niveles. Los incómodos movimientos especiales del primer juego se han simplificado a una simple pulsación de botón, y las nuevas mecánicas para deslizarte y trepar son rápidas y fluidas en mapas diseñados con la verticalidad en mente.
También se incluye cooperativo para hasta cuatro personas con enemigos que se escalan en número y dificultad dependiendo de la cantidad de jugadores. Jugué la demo con otro jugador y la cosa era tan loca que solo puedo imaginarme cómo de demente resultará con la partida llena.
Los desarrolladores admiten, además, que no solo se han inspirado en Borderlands, sino también en Diablo.
"En nuestras oficinas todo el mundo juega mucho a Diablo", reconocía Tadeusz. "Esto ya es un poco un Diablo Shadow Warrior porque coge cosas de Diablo, como la generación aleatoria de niveles y el loot".
Esta nueva dirección puede parecer demasiado ambiciosa para un equipo que es relativamente pequeña, pero tras probar Shadow Warrior 2 en el E3 confiamos en que Flying Wild Hog tiene todo lo necesario para sacarlo adelante.