Silent Hill: Shattered Memories
Huyendo hacia delante.
A lo largo del juego Harry recorrerá la aparentemente deshabitada Silent Hill encontrándose con varios de sus residentes, desde una agente de policía local hasta una chica de instituto, mientras recupera fragmentos de su memoria, que de alguna manera alteran lo que hasta ahora era su percepción de la realidad. Este viaje iniciático está plagado de escenarios y situaciones inquietantes al margen de lo evidente: el pueblo parece abandonado, una tormenta de nieve lo azota y de manera ocasional todo queda cubierto por el hielo y surgen monstruos de pesadilla. En este sentido, la versión para PSP que estamos analizando es idéntica a la de Wii salvo por los ajustes en el control y la presentación.
¿Pero cuál es el problema? La caída en picado de la ambientación a medida que el juego va descubriendo sus cartas. Con esto no nos referimos a que el trabajo de ambientación en sí decaiga, ni mucho menos, sino más bien a que el jugador se da cuenta conforme juega que el reto sólo se presenta en determinadas situaciones. De hecho, las pesadillas son los únicos momentos del juego en los que se presentan desafíos mortales en forma de enemigos que nos persiguen, lo que deriva en una montaña rusa de sensaciones que van desde la desgarradora expectativa y sobrecogimiento de las primeras horas hasta la fría curiosidad del final. Y es una pena porque el trabajo de ambientación predispone al jugador a estar pendiente del crujido menos audible hasta que uno mismo nos preguntamos '¿por qué demonios voy tan cauto? si no voy a encontrar enemigos…', y todo se viene abajo.
Aparte de los momentos de pesadilla Shattered Memories presenta puzles más o menos brillantes (he de admitir que encontré varios muy ingeniosos) los cuáles en su mayoría se resuelven con el teléfono móvil. Con el terminal de Harry es posible llamar a números que encontraremos por todo el pueblo, en paredes, taquillas, carteles, etc., hacer fotos para capturar presencias paranormales, recibir mensajes y guardar la partida. De este modo el teléfono se convertirá en la herramienta más útil de Harry con permiso de la linterna.
Como decimos el segundo pilar sobre el que se apoya la experiencia de Shattered Memories es la preciada luz de la linterna del protagonista, la cual posibilita ver mejor en la mayoría de entornos del juego. Lamentablemente la versión de PSP no dispone de un control libre sobre el foco como ocurría en Wii y sólo se permite iluminar hacia donde está mirando la cámara. El haz de luz sigue comportándose como en dicha versión, generando sombras y reflejos de manera dinámica y realista, arrojando luz sobre pasillos sumidos en la más profunda oscuridad. Además el motor de partículas permite generar una tormenta de nieve como Dios manda, aunque padece de caídas brutales en la tasa de frames durante las escenas de huida, concretamente al atravesar puertas.