Soplar en los cartuchos de NES no tenía ninguna utilidad
Hemos vivido en una mentira.
Es una escena que reside en la memoria de muchos de nosotros: ¿quién no ha soplado en los cartuchos de NES para poder seguir jugando tras una pantalla de error? Pues un estudio reciente ha demostrado que soplar en ellos no sólo no tenía ninguna utilidad, sino que de hecho dañaba el propio cartucho.
"Cuando las cosas iban mal en tu NES, el problema normalmente se debía a una mala conexión entre el cartucho y la ranura", aseguran en Mental_Floss. "Eso se podía deber a un empañamiento, a corrosión, a proquería acumulada, clavijas débiles y otros problemas."
"Si bien es cierto que pude haber soplado en algún cartucho cuando era un ingenuo joven jugando a la NES, llevo tiempo aconsejando que no se haga porque aunque puede servir como ayuda temporal, en última instancia abre la puerta a daños y dificultades para el hardware," asegura en el informe Frankie Viturello, de Digital Press Webcast.
Aunque Viturello asegura que esa acción no tenía un uso real, el hecho es que siempre funcionaba. ¿A qué se debía?
"Quitar, soplar y volver a poner el cartucho crea otra oportunidad aleatoria de que se realice una mejor conexión. De modo que quitar el cartucho diez veces y volverlo a poner sin soplar puede tener los mismos resultados que soplar en él cada vez."
"La humedad que se crea cuando soplas en el cartucho tiene algún tipo de efecto inmediato en la conexión eléctrica que tiene lugar. O bien la humedad ayuda a eliminar cualquier porquería presente cuando se realiza el contacto, o bien aumenta la conductividad a un grado que puede enviar la información a través de cualquier cosa que estaba interfiriendo."
Para llevar a cabo el estudio, Viturello ha usado dos copias de Gyromite, les ha quitado la carcasa de plástico y ha soplado en una de ellas diez veces al día durante un mes, mientras la otra copia quedaba tal cual. Ambos cartuchos se han guardado en un mismo lugar, así que ¿cuál ha sido el resultado? Comprobadlo por vosotros mismos.