Spore Creatures
Evolución de bolsillo.
Gráficamente Spore Creatures no es el último grito en DS...ni el primero. El mundo está representado en 3D con escasez de detalles, y las criaturas son sprites 2D que se ajustan a la perspectiva de la cámara como pueden. ¡Ay! Si Duke Nukem levantara la cabeza... Aparte los cambios constantes en el origen de ésta hacen que lo que antes era arriba ahora sea izquierda, derecha o abajo, provocando desconcierto a la hora de desplazarnos. El hecho de poder ajustarla con los botones laterales pierde toda importancia cuando de nuevo la cámara empieza a bailar al son que ella misma se impone. Muy mala señal considerando que estamos ante un juego en el que prima la exploración.
Por otro lado tenemos a las criaturas paridas por el editor, que lucen sencillamente horribles. El Hombre Elefante en comparación con ellas es la princesa de un cuento Disney. La poco cuidada perspectiva de los sprites unida a la baja resolución hace que las criaturas parezcan amalgamas de partes sin sentido ni sensibilidad, un collage heterogéneo de miembros dispuestos aquí y allá entorno a un cuerpo sin definir.
Pero es precisamente el editor la parte más interesante del juego. A pesar de ser una versión adaptada del editor de Spore, no pierde la esencia de éste y consigue un resultado majo, aunque evidentemente ofrece menos opciones de personalización. Como ya dijeron durante la campaña de lanzamiento las posibilidades para crear cualquier tipo de criatura son amplísimas. Sin duda el aspecto más atractivo del juego y con el que más rápido pasarán las horas. El mero afán por descubrir el efecto de esa nueva parte que acabas de encontrar se le suma el hecho de que el propio juego obliga a realizar ajustes en momentos puntuales de cada escenario. Éstos, dicho sea de paso, limitan en cierto modo la libertad creativa e imposibilitan concluir la historia con una criatura propia al ciento por ciento.
En un intento de no desaprovechar la conexión inalámbrica de la consola se ha implementado la opción de intercambiar criaturas vía wifi. Lejos de explotar la idea se limita el papel de las nuevas criaturas a la aparición como fauna autóctona en los distintos planetas. Aunque siempre es interesante poder devorar a la criatura de tu amigo y demostrar nuestra superioridad como macho alfa.
Dicho esto, concluir que Spore Creatures como experiencia independiente puede tener un pase y llegar a merecer la pena, pero como alternativa al título de PC no tiene ningún sentido. Porque más allá de todo el sistema de personalización de la criatura hay un concepto de juego totalmente distinto, monótono y lineal, al que se le añade, en función de los gustos, inconvenientes de lo más molestos, como la falta de definición, el poco acierto de la cámara o una historia demasiado simplona que no motiva en absoluto a continuar jugando.