The Sky Crawlers
¿Por qué el cielo es azul?
Es en esta misma dirección, la de hacer las cosas más fáciles –imaginamos que pensando en el público tipo de Wii– que se han incluido una serie de maniobras automáticas que nos servirán para colocar nuestro monoplaza a la cola de nuestro objetivo, algo que nos ayudará enormemente a derribarlo. Estas maniobras son conocidas como CMT y se activan una vez que aguantamos unos segundos cerca de la zona de maniobras de nuestro enemigo. Cuando el medidor de CMT se ha recargado solamente tendremos que pulsar "A" para que nuestro avión haga una espectacular pirueta. También tenemos la opción indicar una dirección con el stick del Nunchuk para indicarlo cuál queremos hacer exactamente, y en modo experto se hacen de forma manual.
Lo cierto es que estas maniobras “causalizan” tanto el juego que a la que uno le coge el truquillo acaba convirtiéndose en un hacha. Contrastan estas facilidades con un tutorial absolutamente farragoso y que no está integrado dentro del juego, y unos menús nada intuitivos que casi podríamos decir que son más difíciles de controlar que el avión.
Una vez que hemos pasado estos pesados tutoriales es el momento de salir de caza. Antes de eso asistiremos a un informe de la misión donde se explicarán nuestros objetivos sobre una clásica maqueta. El tono frío que rodea todo el juego también está presente en el oficial que nos las explica en nuestra base. La mayoría de las misiones nos obligarán a destruir a todos los enemigos de la pantalla y hay pocas variaciones sobre este esquema, aunque también tocarán otras de tipo defensivo o un rescate, pero casi siempre estaremos yendo tras otros aviones o destrozando a las unidades terrestres y sus instalaciones. En este sentido a nivel de diseño nos encontramos con la imposición de cumplir los objetivos con un orden estricto y que no podemos saltarnos si no queremos ver fallida la misión. Este orden es muchas veces cuestionable y no serán pocas las veces que veremos como fracasamos aún teniendo una actuación bastante buena. Parece mentira que detrás de este título esté la misma Namco de la saga Ace Combat.
Tras finalizar cada una de estas misiones recibiremos una serie de puntos que nos servirán para mejorar las partes de nuestro avión en el hangar o para optar por otros cazas. Las posibilidades de personalización (motor, ala, blindaje, arma, cabina y color) son bastante elevadas, cosa que se agradece.
Los aviones tiene un buen modelado y lucen bien, algo que también sucede con los escenarios siempre que nos acerquemos mucho a ras de suelo. En general, técnicamente cumple con lo que se le puede exigir a un arcade de aviones que toques de simulación para Wii. Lo mismo a nivel sonoro, con unas músicas agradables pero con un casting de voces demasiado neutro y con poca personalidad, pero que curiosamente encaja bien con el tono frío de todo el juego.
The Sky Crawlers pone la historia y el argumento por delante de la propia mecánica de juego, que no logra encontrar su lugar entre el arcade y la simulación. La ausencia de multijugador es un claro punto negativo, porque habría ayudado a hacer las 18 misiones de su modo campaña algo más entretenidas. El control cumple con mando clásico cumple y con WiiMote + Nunchuk falla un poco pero también nos pone más en la acción. Por todo ello Sky Crawlers es uno de esos juegos extraños que tanto vemos en Wii que seguramente no acabarán de encontrar a su público objetivo pero que entretendrán a aquel que decida pasar por alto sus defectos.