Un informe de IGN muestra la preocupación de los trabajadores de Bungie por el futuro del estudio
La desarrolladora ha recortado costes y Sony podría asumir el control de la junta.
Un informe de IGN con entrevistas a desarrolladores de Bungie destaca la baja moral dentro del estudio tras la oleada de despidos del pasado mes de octubre.
Al finalizar octubre el CEO Pete Parsons anunció un centenar de despidos dentro del estudio; Bungie tenía entonces unos 1.200 empleados.
Un mes después, los empleados que han hablado con IGN describen un ambiente de preocupación creciente dentro del estudio mientras la directiva ignora o se muestra abiertamente hostil a los comentarios de los trabajadores al respecto.
Uno de los temas que se está hablando dentro del estudio es la posibilidad de que Bungie pierda su independencia dentro de Sony, que mantenía desde su compra en enero de 2022. Según indican varios entrevistados, Bungie tiene que cumplir una serie de criterios financieros y, en caso de no llegar a alcanzarlos, Sony podría disolver la junta y formar una nueva para tomar el control de Bungie.
Los directivos están llevando a cabo recortes de diversos beneficios y eventos internos para evitar que esta situación se llegue a producir. Esto está actuando en detrimento de la moral de los trabajadores, a quienes se les ha asegurado que todavía existe la opción de más despidos.
Dos fuentes mencionan que la jefa de recursos humanos Holly Babacovi dijo que los despidos eran "una palanca" que Bungie podía volver a activar de nuevo.
En cambio, en una ronda de preguntas y respuestas, se pidió a los trabajadores que no hablasen más de los despidos y que "no eran el tipo de compañía" en la que los líderes se reducían el salario para evitar futuros recortes.
Una fuente habla de que Bungie necesita que la expansión Destiny 2: La Forma Final y si no lo logran, es posible que se produzcan más despidos.
Sobre la gente que perdió su trabajo, las fuentes de IGN indican que muchos de ellos eran líderes de la comunidad como el consejero general Don McGowan, en algunos casos con más de dos décadas de experiencia a sus espaldas. También se ha despedido a gente que formaba parte de los clubs DE&I (Diversidad, Equidad e Inclusión) de Bungie, con el objetivo de fomentar un entorno inclusivo en el estudio.
La posibilidad de que Bungie opte por subcontratar parte del trabajo está provocando también preocupación dentro del estudio y "nadie se siente a salvo" de los despidos, según apunta una fuente.
Tanto Sony como Bungie se negaron a contestar al informe original de IGN.