Asura's Wrath
Japón extremo.
Creo que pocos títulos han sido acogidos con más prejuicios que Asura's Wrath. Bien sea por ser una colección de QTE's, un argumento absolutamente japonés o por ser otro producto vendido a plazos (actual marca de la casa en Capcom), lo cierto es que resulta difícil acercarse a Asura's Wrath sin una buena dosis de escepticismo.
Pero, ¿en qué consiste Asura's Wrath? La mejor definición que le podemos asignar es la de anime interactivo. Y en Cyberconnect2, que si en algo destacan es crear juegos basados en anime, como demuestran sus Naruto y .hack, no es que hayan dado un aspecto de anime al título: es que han construido todo como una serie. El juego es, en realidad, una serie de tres temporadas, divididas en seis capítulos cada uno. Y cada capítulo consta de su resumen inicial, su cortinilla a mitad de episodio y su "Continuará" al final.
Esa es la columna vertebral del producto, y desde allí ramifican todas sus virtudes y defectos.
La historia es tremenda, exudando japonesidad y con un elenco de personajes con mucho carisma pero absolutamente encasillados; como en cualquier shonen que se precie. La polaridad en los caracteres de héroe y villanos es absoluta, lo que proporciona que el único giro de guión de personajes nos parezca emocionantísimo. Juegos de luces, en el fondo.
El argumento, principal y casi única baza de Asura's Wrath, es una historia de venganza. La tierra es protegida por ocho deidades conocidas como los Ocho Generales, que combaten a una fuerza maligna llamada Gohma mostrada en los primeros compases como una especie de gusano gigante que habita dentro de la tierra. Y cuando digo gigante quiero decir grande de la hostia, porque este es un juego que se enorgullece de enemigos gigantes. Y sí, enemigos del tamaño de un planeta es algo bastante asombroso de ver.
Estos generales protegen la tierra desde una flota gigantesca de naves que sobrevuela el planeta, siempre vigilantes a las apariciones de los siervos de Gohma en los pueblos. Todo se tuerce cuando el emperador es asesinado y Asura es acusado del crimen y perseguido por sus compañeros, mientras su mujer es asesinada y su hija secuestrada. Tras una imposible lucha contra Deus, jefe de los generales, Asura acaba siendo arrojado a la tierra desde la flota espacial, cayendo hasta Naraka , que representa una especie de limbo entre la vida y la muerte, y donde gobierna una araña dorada.
Tras doce mil años en Naraka, Asura consigue escapar trepando por una columna que lleva a la tierra y promete venganza contra los Siete Generales. En este punto del juego tuve que salir corriendo tras mi cerebro, que se había encerrado en el baño dando un portazo y gimoteando.
El desarrollo de historia y personajes, como podéis ver, es absolutamente nipón y en la línea que a ellos gusta, con situaciones que no se explican, referencias culturales casi desconocidas en occidente y metáforas oscuras.